𝐄𝐧𝐠𝐚ñ𝐨/𝐇𝐲𝐮𝐧𝐒𝐚𝐞𝐧𝐠/𝐘𝐚𝐨𝐢/𝐒𝐒𝟓𝟎𝟏

Hyun Joong de niño

—Estoy harta de seguir buscando al niño. No aparece. Llevamos buscando muchos años.

—Tenemos que seguir buscando o por lo menos fingir que estamos buscando.

—No, ya no quiero, por eso vine a buscarte, hay un niño por aquí en la calle, que anda rodeando las casas para que le den comida o trabajo para poder comer. Tiene más o menos la edad del hijo de Asher. Se llama Hyun Joong.

—Sí, creo que lo he visto. Un niño ratero muerto de hambre que solo se mete en problemas. ¿Y qué piensas hacer? —me pregunto Lorenzo mirándome.

—Mandar a hacer análisis de sangre y que salga que realmente es su hijo. Yo misma me hare cargo de eso. Sera fácil. Pero tú, después tendrás que ayudarme a mantenerlo calmado a que cierre esa boca.

—No te preocupes, yo me encargo. 

Hyun Joong

—Otro día que tendré que dormirme con el estómago vacío. No me dieron nada, ni siquiera un pequeño trabajo. La gente es tan cruel. —Dije hablando solo y triste.

Me acosté en la cama con el estómago rugiéndome. Al final me quede dormido.

En la mañana salí a dar una vuelta por ahí, para ver si puedo conseguir comida.

Mientras camino por ahí me encontré al señor de la tienda. Me acerqué corriendo. — ¿Don Gus, le barro la calle y me da algo para comer?

Él me sonrió. —Bueno está bien. Toma —me dio la escoba. —Pero bien barrido, si no, no te doy nada.

—Se lo prometo.

Barrí la banqueta hasta que quedo bien limpio. Al terminar, Don Gus, me hizo entrar a su casa y me preparo algo de comer, al último me dio unas galletas y un jugo.

—Muchas gracias, Don Gus, ya me hacía falta comer algo.

— ¿Por qué no vienes por la tarde para comer?

—No, así está bien, no quiero ser encajoso.

—No me importa, te vienes a comer y punto. Te espero a la 1 de la tarde.

—Está bien. Aquí estaré.

—No me falles ¿eh?

—No, no lo hare.

Tome rumbo a la casa abandonada en dónde me quedo. Tome las cosas que uso para limpiar los autos y fui al estacionamiento que está afuera de un hospital de algunas calles de dónde vivo.

Al llegar me dieron autos para limpiarlos, al terminar me dieron un poco de dinero. Luego llegó la hora de la comida y me pase por la tienda de Don Gus. —Llegas puntual. Vente vamos a comer.

Más tarde llegué a casa y me tire en el colchón viejo dónde duermo. Tomé la foto de mi madre y sonreí. —Ay mami, perdóname por haberte dejado. Pero ya no quería vivir esa vida. Aunque aquí me muero de hambre y frío. Hoy si comí y comí mucho. Don Gus me dio comida.

Escuché ruido afuera de la casa y me encontré con una señora. Ella me sonrió. Yo solo me quedé asustado mirándola. ¿Es otra señora del orfanato?

Tome la botella de cloro que tengo aun lado del colchón para estas cosas. —Sí es del orfanato, de una vez le digo que le voy a tirar el cloro en toda la ropa para que se le manche. —Dije enojado.

Ella se rio.

—Tranquilízate ¿quieres? Vengo a darte un trabajo. Un trabajo en el que no pasaras hambre, frío, no tendrás que trabajar. ¿Quieres saber de qué se trata?

Eso se escuchó interesante, así que asentí. —Sí. Quiero saber.

—Tienes que hacerte pasar por el hijo y un señor.

—Claro que no. Yo no hare tal cosa. —Dije mirándola. —Eso es engañar a la gente. Y no lo haré. Así que váyase por dónde vino.

— ¿Así que prefieres andar en la calle, en vez de ayudarme y quedarte en una casa grande, muy bonita, lujosa y con muchas cosas que te esperan?

—No, no quiero. Sí tengo que engañar a alguien para yo estar bien, prefiero no hacerlo. Ahora váyase.

—Bueno, no quisiste por las buenas, lo harás por las malas. Entren y llévenselo.

Entraron unos señores alto de traje y me tomaron la fuerza. Me sacaron de ahí y subieron a un auto. Yo solo grité que me soltaran.

— ¡Suéltenme! No quiero hacerlo.

— ¡Ya cállate! —me grito esa señora.

Me llevaron a un hotel, luego me bajaron, entramos y me tiraron a la cama. Los señores salieron y me dejaron con la señora.

—Te lo voy a repetir. Te vas a hacer pasar por su hijo perdido. ¿No te gusta la idea? Ya no tendrás que pasar hambres, fríos y calores. Y tendrás un hermano, tu hermano más que nadie te está esperando con los brazos abiertos.

— ¿Y sí no quiero que?

—Te voy a llevar a ese maldito orfanatorio. Escúchame bien. Tienes que comportarte muy mal con los Heo. En especial con ese mocoso Young Saeng, no puedes tratarlo bien. ¿Entendiste? Hazle la vida imposible.

—Claro que no. ¿Por qué tengo que hacer lo que tú me pides?

—Porque yo te estoy salvando de ir a la calle, de morirte de hambre y frío. Además, ya conseguí todo para que crean que en verdad eres tú, su hijo.

— ¿Y usted que gana con eso? —pregunté molesto.

—Quiero casarme con él. Asher es un hombre muy guapo y con mucho dinero. Y tú y yo podemos tener la vida que queremos Hyun Joong.

—Sí tiene mucho y todo, pero no. Yo no quiero vivir así con engaños. Y menos por hacerme pasar por su hijo.

—No te queda de otra. —Me levanto la voz. —Vas a hacer lo que yo te digo. Si no quieres que te encierren en ese orfanato o peor volver a vivir en la calle.

—No me importa vivir en la calle, pero yo no lo voy a engañar así. No lo merecen.

—Muy bien. Entonces ¿quieres seguir de delincuente? Bueno. Tendrá que ser por las malas. —Me tomó del cabello y se puso a mi altura.

—Mira maldito mocoso. Sé que no eres huérfano, que huiste de tu casa porque tu padre fue a prisión porque le robaba a la empresa de su jefe. Que le dieron muchos años de prisión, que te largaste porque todos en la escuela se rían de ti. Si no haces lo que yo te digo también te voy a encerrar por delincuente. Al final de cuentas tu les robas todo lo que tienen.

—Pero lo hago por hambre. —Dije molesto.

—Al final de cuentas, son robos. Es un delito. —Me jalo en cabello más fuerza.

— ¡Au! ¡Me duele! ¡Me duele! ¡Suélteme! —Lo hizo.

— ¿Vas a hacer lo que te digo o no? —pregunto enfadada.

—Está bien. Voy a hacer lo que dices.

Me miro sonriendo con maldad. —Y cuidado con que cometas un error, porque a la primera te largas al orfanato.

Me quedé callado mirándola.

Bueno este es el primer capítulo que les subo, mañana subo otro. La historia va agarrando forma, espero que les vaya a gustar y gracias por esperarme con una nueva historia más. Gracia de nuevo y nos leemos mañana.