15 | Los Secretos De Matías.
- Mañana te traigo la ropa. - le dije a Matías y él asintió
Abrió la puerta y justo ahí estaba Mariana.
- Hola, Mati. - dijo viendo a Matías por arriba de mi cabeza. Ella bajo a mí y en su rostro se hizo una sonrisa falsa -. Hola, Dani. No esperaba verte aquí.
- Sí, bueno, yo tampoco. Creí que llegarías antes de que yo me fuera. - confesé
- Ah, Mariana. ¿Por qué no pasas?. Solo déjame despedirme de Daniela y empezamos con la tarea. - dijo Matías y ella asintió
Matías y yo dejamos pasar a Mariana y después escuchamos que la mamá de Matías empezó a hablar:
- Oh, Hola. Soy Carla Walker. La madre de Matías.
- Mierda. - susurró Matías
- Hola. Soy Mariana, compañera de Matías. Vine a hacer una tarea que nos encargaron.
- Oh, bueno. Él no me dijo nada. - ví que su mamá lo estaba viendo, pero Matías solo se lamentaba de no haberle avisado
- Te veo mañana. Ya sabes. - me dijo Matías y yo asentí
Él se acercó a mí y me dió dos besos en cada una de mis mejillas.
- Adiós. ¡La veo luego, señora Walker!. - me despedí
- Hasta mañana, Dani. - dijo ella
- Chao, Daniel. - Matías sonrió dulcemente y yo hice lo mismo
[...]
Era Miércoles y ya estaba en la casa de Matías. El día paso de lo más normal en la escuela. Ni siquiera había ido Sebastián y eso me hacía sentí feliz.
Ahora estaba en la sala haciendo tarea con Matías. Su madre había hecho una tarta de limón francesa, así que nos llevó unos pedazos hasta la sala.
- No me agrado Mariana. - soltó la mamá de Matías
- ¿Por qué?. - preguntó él y ella se sentó junto a él en el sofá mientras Matías la miraba con atención
- Es muy molesta. Me da malas vibras. Además, note que se te acercaba demasiado. Y luego, cuando me hablaba sonaba la más falsa. Solo quería tener mi aprobación para ser tu novia.
- Mamá, ¿Hay alguna chica de la que no te hayas quejado porque "solo quiere ser mi novia"?. - preguntó él con una sonrisa
- Sí. Daniela es la única chica de todas las que haz traído a la casa que en verdad me agrada. Ni siquiera tus amigas Meg y Marena me agradaron al principio. Ellas si me tuvieron que ganar, no como mi Dani querida. Es que, por Dios, Matías. Ella es un amor. - dijo y yo no pude evitar sonreír por sus comentarios -. Es tu tipo de chica perfecta.
- Mamá... - dijo Matías algo avergonzado, pero su mamá lo interrumpió
- No, nada de "Mamá". - ella lo imitó -. Ven aquí. - ella extendió sus brazos, pero Matías se negaba -. ¿Te da vergüenza que tu mamá te de cariño cuándo la chica que te gusta te esté viendo?. - preguntó ella y Matías no dijo nada. Él se recostó en sus piernas viéndola a los ojos y ella le acarició el pelo -. Sabes que te amo, ¿No?.
- Sí. Y demasiado. A veces me empalagas. - admitió Matías
- Exacto. Pero porque eres mi bebé y cuidó con quién te juntas. Sabes que no confío de cualquier muchachita calenturienta con la que te topas. A excepción de los chicos, que ellos muy rara vez me caen mal. - Matías rió al igual que yo -. Pero, eso no justifica que no quiera que encuentres a tu pareja ideal.
- Eres muy celosa.
- No, soy precavida. Recuerda que también soy una Walker, y los Walkers son...
- Demasiado precavidos, egocéntrico, creídos...
- ¿Y sobre todo?.
- Siempre son ganadores.
- Tanto en la guerra, como en el amor. - dijeron al mismo tiempo
- Exacto. - dijo ella y después me miró -. Tendrás que aprender a ser una Walker de verdad cuándo te cases con mi Mati bebé.
Yo asentí con la cabeza mientas reía por como lo llamo.
- Seré la esposa perfecta para su hijo. No se preocupe. - dije y ella me sonrió
Matías se cubrió la cara con ambas manos y después se volvió a sentar en su antíguo lugar.
- ¿Casarnos?. ¿En verdad?. - preguntó él y ví que su mejillas estaban rojas
- Obviamente. Quiero muchos nietos. Todos los que Roger aún no me a podido dar.
- ¡Mamá!.
- Bueno, ya. - ella acarició la pierna de Matías -. ¿Le contarás la historia de tu abuelo, el Walker británico?. - preguntó ella y yo los miré curiosa
Matías me miró y después miró a su mamá.
- Tendré que hacerlo tarde o temprano, ahora que lo mencionaste.
- Bien. Iré a buscar ya sabe que, para estar prevenidos. - su mamá le dió un beso en la frente y después subió las escaleras
- ¿De qué trata la historia?. - pregunté
- Aún no estás lista para esa historia. - dijo él y volvió a ver mi cuaderno -. "Iba" no lleva H, y se escribe con B, no V. - dijo
Tomé el cuaderno y debajo escribí bien la palabra. Matías me estaba ayudando dictando me algunas frases para que las escribiera correctamente, pero había algunas que no les atinaba. Era pésima para el dictado.
- ¿Por qué agarras el lápiz así?. - preguntó al ver que tomaba el lápiz desde más arriba, en lugar de desde la punta
- No lo sé. Así siempre he escrito. - admití
- No. Es porque eres única. - lo miré y él me sonrió -. Cada vez que te pregunten eso, diles lo que te dije.
- ¿Por qué?.
- Porque lo eres. Y que nadie te diga lo contrario. ¿Okay?. - yo asentí -. Oui. Escribe: "La niña se cayó por subir al árbol". - lo escribí y después se lo enseñé -. "Cayó" es con Y, no doble L y lleva acento en la O. "Árbol" está bien escrita, excepto porque le faltó el acento en la A.
Volví a escribir la frase de bajo de la que me dicto.
[...]
Estaba en la habitación de Matías. Él le estaba ayudando a su hermano en algo, así que estaba sola.
Miré de cerca cada una de las plantas que Matías tenía en su habitación. Eran muy lindas. También ví las portadas de sus libros, hasta que pare en uno que era un cuaderno.
Cuándo lo abrí, leí que en la primera hoja decía "Diario secreto, versión 5.0 en español".
Tenía curiosidad por leer lo que decía, pero no debería de hacerlo. Sería algo malo.
No pude resistirme y leí la última hoja...
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Miss You
Novela Juvenil- No quiero que te vayas. - ¿Cuántas Lunas hay jodiendo a la Tierra cada noche?. - Solo una. ¿Pero, y eso qué tiene qué...?. - me interrumpió - Que si vemos la misma Luna al anochecer, significa que no estamos tan lejos como crees.