PAPÁ SÓLO HAY UNO. (2MIN)🔞

11. AMIGOS.

IU fue dada de alta del hospital. El doctor Kim Heechul, ordenó tajantemente reposo absoluto. Solo tendría permitido caminar para ir al baño y para ducharse. Y  aunque no tenía preferencia sentimental con ninguno de los dos papás de los mellizos tomó la decisión de mudarse a casa de Taemin para seguir las indicaciones médicas. Además de que, él fue quien primero se lo ofreció.

Taemin la recibió con gran emoción; sus ojos reflejaban una mezcla de infinita gratitud y preocupación. La habitación que había preparado para IU estaba bañada en una luz suave y decorada con colores calmados, creando un ambiente de tranquilidad para que ella se sintiera lo más cómoda posible.

Sin embargo, la paz se vio interrumpida por la tormenta que se desató nuevamente en la relación entre Taemin y Minho. Este último llegó poco después que IU, entrando en la casa del bailarín con el ceño fruncido. Una vez reunidos en la sala, las miradas tensas y las palabras acaloradas comenzaron a llenar el ambiente. El nudo en el pecho de IU se apretaba al escuchar cómo el desacuerdo entre los dos hombres crecía.

—Pero no entiendo de qué va tu enojo, Choi —dijo Taemin, tratando de mantener la calma.

—No quiero que ese tipo al que llamas prometido esté cerca de mi hijo. No lo conozco y no sé qué mañas pueda tener —escupió Minho, visiblemente molesto. Sus palabras estaban teñidas de celos y desconfianza.

Taemin intentaba apaciguar la situación, aunque su voz tensa revelaba su propia ansiedad. —Kai es un hombre educado, jamás haría daño ni a los bebés ni a IU.

IU se sentía atrapada en medio de un conflicto que no le pertenecía directamente, pero los pequeños en su vientre la impulsaban a querer que todo estuviera en armonía. Con determinación, se levantó, y un silencio momentáneo invadió el salón.

—Chicos, entiendo sus preocupaciones —dijo con firmeza, pero con un tono suave—. Sé que esta situación es complicada para ustedes, pero mi única intención es asegurarme de que estos preciosos bebés crezcan sanos y felices. No quiero interferir en su relación ni en sus decisiones como padres. Solo quiero que estos pequeños lleguen al mundo de la mejor manera posible.

Hizo una pausa para asegurarse de que ambos la escuchaban con atención, luego continuó:

—Si siguen discutiendo por cosas que no tienen importancia, los bebés percibirán esa tensión. Minho, aunque decidas llevarte a Hoshi cuando nazca, no podrás evitar que los dos sean hermanos. No pienses tan egoístamente, porque algún día él podría reclamarte esa separación. Y Taemin, no intentes controlarlo todo. La vida puede ser más sencilla si aprendes a relajarte un poco. No todo debe estar estrictamente planeado. Juliette te lo agradecerá.

Ambos asintieron, comprendiendo que no podían seguir así. Era fundamental comenzar a trabajar juntos por el bien de los mellizos.

—Tienes razón, IU. Nos hemos estado comportando de manera egoísta —admitió Taemin—. Por mi parte, te pido disculpas por los malos ratos que te he hecho pasar. Sé que estar embarazada no es fácil, y encima con mis tonterías... No es justo. Choi, perdona mi necesidad de control. Antes de tomar decisiones sobre los mellizos, consultaré contigo, y lo resolveremos juntos de la mejor manera.

Minho también se sintió avergonzado. —Yo también les pido disculpas a ambos. Trataré de no ser tan individualista.

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UNA SEMANA MÁS TARDE

Taemin y Kai se encontraban atrapados en un momento de tensión silenciosa. Desde que habían acordado retomar su relación, parecía que todo estaba marchando bien. Hacían muchas cosas juntos, e incluso los planes de matrimonio volvieron en algún momento. Sin embargo, Taemin quería tomarse las cosas con más calma esta vez. Quería tomar esa importante decisión cuando naciera Juliette.