capitulo 23

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Era de mañana en la isla shikoku, habían pasado ya dos noches desde que el alfa había sido secuestrado por ese barco, las búsquedas en barcos policías comenzaron, pero no había una sola respuesta del paradero del alfa katsuki.

El omega izuku quien tiene cuatro meses de embarazo había estado encerrado en casa desde lo sucedido, no salía como antes al menos a dar una vuelta en el parque, pedía comida a domicilio y normalmente era mahoro quien recibía la comida y era el mismo chico beta el que la enviaba, ese era su estilo.

Ese día himiko fue directo al apartamento del chico a informarle algo acerca de lo que haría pronto para encontrar a su hermano mayor por 5 minutos, toco el timbre pues no sabía la clave de la puerta y ni tenía llave/tarjeta, pronto la voz de la niña sonó preguntando quien era.

—soy himiko bakugou —musito un poco preocupada al saber que la niña era quien estaba atendiendo la puerta en vez de su madre, pensó que talvez el omega le había dicho que viera quien tocaba la puerta pues él estaba ocupado.

Pero cuando entro fue todo lo contrario pues el omega estaba encerrado en su cuarto, la niña le indico que si quería hablar con su madre tenía que ser desde fuera de la puerta y si le escuchaba o no ese ya era problema de su madre, la chica se enojó ligeramente por eso pues no sabía cómo es que el omega hacia eso.

—izuku kun! —grito la chica desde detrás de la puerta del cuarto —soy himiko san, tu cuñada —dijo con un poco de enojo hacia el omega —quería informarte que regresare a Tokio para poder hablar con mis padres acerca de katsuki, te quería preguntar ¿Si tú quieres venir para conocer a tus suegros?

—no quiero —dijo la nítida voz del omega, la cual parecía cansada —ni siquiera le digas a tus padres que tu hermano está casado y con hijos. Tu hermano no lo permitiría —murmuro el omega, para la chica.

—en estos momentos no puedo poner el orgullo de mi hermano por encima del problema, izuku entiéndeme por favor.

Espero por un momento la respuesta que le daría el omega, pero pasado unos minutos se dio cuenta de que este no contestaria, iba a decir algo, pero la voz de la niña quien estaba a su lado se escuchó fuerte y claro, llamando toda su atención.

—mamá no quiere que le informes nada a los abuelos porque tiene miedo de que papá se enoje con él —la chica se quedó un momento cayada ante eso, pero hablo con un toque de enojo.

—y eso que, en estos momentos lo más importante es mi hermano, no nadie más —la voz de la chica sonó fuerte pero no lo grito.

—mi hermano también es importante! —grito la pequeña niña con enojo por lo que dijo la chica de cabellos rubios y ojos marrones oscuros.

—tu, tu hermano y tu madre jamás debieron aparecer en la vida de mi hermano! —musito la chica con enojo, se había enterado casi de todo de la familia de su hermano, claro con alguno que otro hueco —gracias a ustedes ahora mi hermano esta quien sabe dónde, secuestrado.

—eso no es verdad, papá es muy importante para nosotros.

—si el fuera importante, me permitieran hablar con mis padres para decirles lo de katsuki —dijo la chica separándose de la puerta del cuarto del chico y su hermano dándole una patada con todas sus fuerzas asustando a mahoro —les informare a mis padres!

La chica dio una patada nuevamente y en cuanto la dio la niña sufrió un daño colateral a la chica desequilibrarse por el golpeo, la niña soltó un ligero llanto, llamando la atención de quien se encontraba encerrado en ese momento intentando no perder la cordura.

Pero al escuchar su único consuelo llorar, le hizo perder la poca que le quedaba, la puerta se abrió de golpe y la chica fue empujada fuertemente a la puerta de su espalda la cual era el cuarto de los niños, por la presión del golpe la puerta se abrió haciendo que la chica callera al suelo del cuarto estaba asustada porque el omega ni siquiera la toco.

—himiko —hablo izuku para llamar la atención de la chica tirada en el piso —no te permito que hables mal de mí y de mis hijos. Te he permitido mucho, pero creo que ya es suficiente -dijo alejándose a la cocina para servirse un vaso de té —si le vas a decir a tus padres, hazlo solo atente a las consecuencias de tus actos.

La chica no pudo soportar más, sus sentidos estaban desactivados y sabía que era mejor irse, por lo que salió rápidamente del departamento pequeño, bajando por el elevador hasta llegar a la recepción para ir directo a su yate, para irse de la isla e informarles a sus padres, sabía que su padre tendría lo suficiente para poder dar con el paradero de su hermano mayor.





Katsuki estaba cansado, solo habían pasado dos noches, tres experimentaciones, estaba cansado, su cuerpo dolía, pero no podía dejar de ser fuerte por su hijo, hacia lo posible para poder quedar bien ante los demás y tener algo para luego, una petición para el futuro. Tenía que ganarse la confianza de todos y cada uno, asta de la beta pelinegra, para poder tener más recursos en el futuro.

Ese día había despertado bastante temprano como los días anteriores y se preparó algo de desayunar, para luego hacer sus entrenamientos del día, luego le dio de comer a su pequeño katsuma para que antes de medio día lo fuera a buscar la chica lo cual lo confundió mucho, estaba cambiando el horario de experimentación, aunque eso no sería mucho problema.

Pero en vez de hacer lo que normalmente hacen, fue llevado junto con su hijo asta fuera del barco donde otro barco mucho más grande los esperaba, como si fuera un tripulante normal lo dejaron subir normal, sin compañía ni nada de eso, y su hijo en brazos, en ese barco fue guiado por una chica alfa la cual lo llevo hasta su nuevo cuarto, el cual era más como una casa.

La casa dentro del barco tenia, la sala principal, cocina, un pequeño pasillo donde había dos puertas una de cada lado, una de las puertas daba a un GIM, del mismo tamaño y con las mismas cosas como el anterior, en la otra puerta estaba el cuarto, el cual era más grande, tenía una cómoda grande, un closet de puertas corredizas el cual no era muy grande, una cama matrimonial, una cuna grande, y encima de la cómoda había varios artefactos de bebé.

En el cuarto habia otra puerta la cual daba al baño, y en este también habia otra puerta que daba al gimnasio, estaban conectados y el baño era realmente muy grande, la chica de cabellos negros entro por la puerta la cual ya no era una gran puerta de metal, sino era una puerta de roble oscuro.

—bueno hice lo prometido, te di una cocina con lo necesario o básico, además podrás salir del aquí, pero debes de ser custodiado por diez o no sales —dijo la chica con la voz un poco cálida pero seria, esta se retiró poco después de lo dicho.

El alfa tomo algunas cosas encima de la cómoda y las guardo en el closet para que no estorbaran, acostó a su pequeño dormilón en la cuna y se dispuso a cocinar algo. Las veces pasadas solo podía cocinar lo básico con una pequeña estufa inalámbrica con la cual era un poco problemático para él, después de eso comería un poco y vería que otra cosa hacer.

doctor and familyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora