Capítulo 18: Abrazos interrumpidos

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Un día nuevo por la mañana, Gun bebía un asqueroso y apestoso té de hierbas; su doctor se lo había recomendado como el mejor método para evitar embarazos después de haber estado encerrado con Off por dos días. Dos días en los que tuvo las mejores experiencias sexuales que había tenido en la vida.

Ahora debo tomar esta porquería. Pero valió la pena.

Había sido anudado más de cinco veces, claramente corría peligro de engendrar a un humano en su interior.

—Amor mío, estás muy sonrojado —bebió el último trago de la taza en sus manos antes de poner atención al alfa, que se sentaba cómodamente en la silla frente a su escritorio.

—Deja de llamarme así.

—Solo te quejas de mis apodos, pero no me da idea —le reclama con diversión.

—Sí, llámame Gun.

Tomó una pluma de su escritorio, continuando con su trabajo diario, escuchando un quejido de su esposo y luego pasos en el suelo acercándose a él.

—¿Qué haces?

Su cuerpo fue levantado de la silla, fue sentado y abrazado sobre las piernas de su esposo.

—Continúa —Off le palmeó el abdomen, sonrió un poco al sentir la frente golpear su espalda.

—No puedo trabajar si estoy sentado sobre ti.

—Si puedes, esfuérzate un poco.

—No.

Gun trató de separarse del afectuoso abrazo, no obstante, las fuerzas que ejercía en él no se lo permitieran. Suspiró cansado, no había forma de alejar al alfa de él, se aferraría hasta que sus piernas se cansaran y tuviera la obligación de volver a trabajar, eso había pasado en los últimos cuatro días.

Podía sentir el azúcar aumentar en su relación, Off había estado más pegajoso de lo habitual, queriendo tomarlo de la mano todo el tiempo, deseando ir a dormir para abrazarlo.

—Has sido muy cariñoso, ¿hay algo que no sé?

—Nada en realidad —Off respondió de inmediato a la pregunta de Gun.

Off era sincero, no había algo en especial que lo forzara a buscar, solo estaba deseoso de estar cerca de su esposo; probablemente había sido causado por su intimidad sexual. Sentía más confianza de tocarle, por lo que sacaba todo el deseo acumulado desde el día en que se casaron.

—Solo te quiero tanto, que deseo estar a tu lado todo el tiempo.

—Sí, pero no puedes estar aquí todo el tiempo, debes trabajar.

—Lo sé, lo sé, lo sé —suspiró desanimado, aligerando la fuerza del abrazo —, me iré ahora y nos veremos para la cena. Tengo que continuar recolectando información del Clan In.

—Odio a tu tío.

—También yo —bufó desesperado. Sentía que el problema aumentaba con cada día—. Han estado copiando nuestros planes, de alguna manera la información se está filtrando.

—Dejaste tu despacho solo, el señor Ming debería estar ahí cuando tú no estás.

—No creo que se atreva a hacerlo.

—Lo viste en la cena —replicó con un ceño fruncido y evidente. —. Únicamente nosotros sabíamos, no fui yo, no fui tú, por lo que solo queda él.

Finalmente, Gun dejó escapar un suspiro y se colocó frente a él, esperando una respuesta a su afirmación. Off sabía que su esposo tenía razón, el único sospechoso era el señor Ming; sin embargo, el tiempo que había conocido al alfa le impedía aceptar lo que estaba saliendo a la luz.

El Omega Del Líder •||OFFGUN||•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora