VEINTIDOS - No nos separarán

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Academia Umbrella,
Alaska

--Prometí ser gentil contigo, pero me temo que no podré cumplir con mi palabra --la pobrecita estaba un tanto arerrada y su mirada temblorosa no coincidía con sus palabras

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--Prometí ser gentil contigo, pero me temo que no podré cumplir con mi palabra --la pobrecita estaba un tanto arerrada y su mirada temblorosa no coincidía con sus palabras. --Dejame secarte el cabello antes de que ganes un resfriado.

--Pero... tu --no quería que se sintiera en la obligación de satisfacerme sin estar del todo segura de querer hacerlo.

--Yo estoy aquí para protegerte --tomé su rostro entre mis manos --no lo olvides.

Busqué un par de pijamas en mi antiguo placard, uno para mi y otro para Alondra. Luego conecté el secador y me senté detrás de ella en la cama para hacer mi trabajo; se veía somnolienta. No dudé en recostarla en mi cama y aferrarme a ella para darle calor, era una noche fría y la calefacción no funcionaba adecuadamente.

Tenía menos de ocho horas para idear un plan antes de que alguien encontrara el cuerpo del Sr. Hargreeves y comenzara el interrogarorio, seguido de las investigaciones. Mi mayor preocupación era Pogo, ese maldito seguro sospecharía de mi y tal vez intentaría tomar el teléfono del viejo para apagar mis sistemas y revisar todo lo que he almacenado.

No podía permitirlo asique no me quedó más remedio que recurrir a medidas desesperadas, no importa quien se interponga entre nosotros...

¡Jamás me alejarán de ti!

Pese a mis esfuerzos no logré pensar en nada más que en una masacre, enfrentaría y aniquilaría a todo el que intente separarme de ella sin importar quién sea. Me sentía cansado, los párpados me pesaban, el alcohol aun tenía efectos sobre mi y el calor del cuerpo de mi acompañante solo facilitó las cosas y poco a poco me quedé dormido.

La voz de uno de mis hermanos me despertó a la mañana siguiente y supe que era momento de actuar, tomé ropa abrigadora en una mano y a Alondra en la otra y desaparecí. La llevé a una cabaña cercana a la Academia y regresé.

--Ya lo se todo Número Cinco, no tiene caso que la escondas --ese maldito chimpancé me estaba desafiando. --La señorita Alondra no permanecerá a tu lado, no importa que hayas matado a su padre... --lo sabía, Pogo ya lo sabía.

--¡Mi unica misión es protegerla! --grité con todas mis fuerzas. --¡¿Por qué nadie parece entenderlo?! Fue para eso que me programaron, fue para eso que soporté tanto dolor y fue por eso que hice lo que hice.

Antes de que pudiera pronunciar alaguna otra palabra lo tomé del cuello y lo lance por los aires, desaparecí y reaparecí justo delante de él a más de dos metros del suelo y lo empuje contra el alce decorativo que estaba en la sala. Los cuernos le traspasaron el pecho y su mediocre sangre comenzó a caer en el suelo.

--Tu no eres rival para mi, ni siquiera Sir Reginald lo fue, ya te lo dije pero lo repetiré una vez más: ¡Nadie va a separarme de ella!
¡¿Lo entiendes?!

--¡Hermano! --era la voz de Klaus bajando por las escaleras. --¿Qué está pasando aquí?

--¡Vete! Esto no te incumbe.

--Diego me despertó esta mañana abriendo la puerta de mi habitación y diciendome que evacuara la casa. Rapidamente sali con el resto y alli fue cuando me contaron lo de papá ¿ Tu lo sabias?

--¡Joven... Klaus! Busque el telefono de su padre y apague a Numero 5... --esas fueron sus ultimas palabras, ahora podras seguir sirviendo a tu señor en el otro mundo.

--¿De qué habla?

--Lo siento hermano, te juro que esto no tiene nada que ver contigo.

Salté sobre él pero esquivó el golpe y huyó más rapido de lo que pude reaccionar. El pobre intentó persuadirme de abandonar la idea de matarlo pero fue en vano, usé mi poder tantas veces como pude, regresaba 10 segundos para esquivar sus golpes una y otra vez... ¿En qué momento este imbecil se volvió tan fuerte?

Aun asi logré dar el golpe final, incrusté el delgado cuerpo de mi hermano sobre el cuerno del bufalo blanco que estaba en el primer piso y luego sali en busca del otro telefono de mi padre. El que tenia la noche anterior ya no existia pues lo destruí antes de regresar a la fiesta. Pero por lo que dijo Pogo hace un momento esta claro que aun hay otro y debo hallarlo antes de que alguien mas pueda hacerlo.

Revise su habitacion de arriba a abajo pero solo encontre papeles, documentos, dinero, pasaportes y un monton de otras cosas inservibles...

¡¿Dónde mierda está?!

¡Ya se!

En el estudio, sin dudas alli tiene que estar. Me aparecí en dicha habitacion y revolvi todo pero sin importar cuantas veces buscara, no pude hallarlo... De pronto sentí ruidos y subí a investigar. Al parecer provenian de la habitación de Hargreeves. A caso es...

--Alondra... ¿Qué haces aquí?

La encontré en el baño de la habitación de su padre junto a su cuerpo, se veía aterrada, jamás había visto esa expresión en su rostro... se veía tan vulnerable.

--Ven, te sacaré de aquí de inmediato.

Le extendí una mano, la cual estaba totalmente ensangrentada... no lo había notado. Dudosa la tomó y se puso de pie.

--¿Qué... qué pasó a...quí? --su voz temblaba al igual que su cuerpo.

--Salgamos de aquí, protegerte es lo único que importa ahora.

La tomé entre mis brazos y desaparecimos.

__________🌷__________Falta muy poquito para el final

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Falta muy poquito para el final.

Perdón por tardar tanto en actualizar 😳

F1V3 Proyecto Número 5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora