Capítulo 3 - Retos

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Marzo de 2023, Las Vegas, Nevada, USA

Mia's POV

¿Alguien podría recordarme la próxima vez que ir de fiesta cuando hay que madrugar al día siguiente es la peor idea existente? Es que yo también pienso con los pies a veces.

Pero es que a ver, tenía la oportunidad perfecta de pasármelo bien en la ciudad que nunca duerme, lo que acabó en una presentación de pilotos que esos pilotos acabaran presentándome a nuevos pilotos y por lo tanto conseguiré mi maravilloso novio piloto. Todo era un esfuerzo para una inversión a futuro, obviamente.

Pero bueno dejándome de excusas el maldito dolor de cabeza no me lo quitaría nadie.

—Lexie quita tu maldita música y llévate tu felicidad a otra parte.—resoplé dignandome a levantarme de la cama, maldita resaca.

Después de separar al español de mi chica nos fuimos al hotel donde íbamos a quedarnos hasta el domingo, que era el mismo en el que la mayoría de pilotos y trabajadores se quedaban, cortesía de Daniel grano en el culo Domenech. La cuestión es que esperaba que la felicidad que llevaba mi amiga no fuese gracias al piloto de turno, porque me negaba a que se ilusionase otra vez.

—Venga vístete que ya estan todos abajo desayunando—me tiró una sudadera y unos parachoute pants y me miró amenazante, era una de esas miradas que decían "Mia Brown como no te vistas en cinco minutos vamos a tener problemas."

Para mi suerte vestirme, maquillarme y peinarme me costó un total de quince minutos. Lo sé, soy rápida, la práctica hace al maestro, fueron muchas mañanas de resaca en España con prácticas obligatorias, esa gente sí que sabe hacer una fiesta.

—Tía no me habías dicho que el desayuno iba a ser con tantos pilotos buenorros. —acomodé las gafas de sol en mi cabeza analizando detalladamente a cada uno de los chicos que había en esa mesa.

Para mí desgracia no estaba Max Verstappen, así que nuestro maravilloso encuentro iba a tardar un poco más en darse.

—Lex te he guardado un sitio en la mesa.—puse los ojos en blanco al escuchar ese acento español. Quita las manos de mi chica Carlitos.

Claro está que mi maravillosa amiga se sentó al lado suyo con una sonrisa y lo saludó con un abrazo. Iugh, demasiado contacto matutino.

Aproveché que había un sitio libre al lado de mi nuevo y maravilloso amigo Lando Norris y me senté, observando al chico que quedaba en mi otro lado, si mal no recuerdo y las charlas de Lexie estaban en mi memoria de forma correcta, ese chico debía ser Daniel Ricciardo. Esa sonrisa era inconfundible la verdad.

—Buenos días British boy. —le choqué los cinco en forma de saludo y reí al ver que tenía la misma cara de resaca que yo, almenos no sería la única.—vaya si al parecer aquí no todos son inmunes al alcohol.

Lando escondió su cara en sus brazos los cuales estaban cruzados sobre la mesa. Pobrecito, el si que tenía que hacer cosas importantes hoy. 

—Callate no vuelvo a beber tanto a menos que sea domingo— gruñó— la vida de piloto es demasiado dura.—lloriqueó, quejándose como un niño pequeño. 

Sí, definitivamente lo iba a adoptar esta temporada.

—Bueno menos llorar y más presentarme a tu amigo, no seas mal educado Norris.

La risa de Ricciardo me hizo girar la cabeza para verle, mira tu por donde que a él más que adoptarlo querría llevármelo a la cama.

—Soy Daniel Ricciardo, pero me puedes llamar Danny o Ric si lo prefieres, aunque bueno, mientras me llames me doy por satisfecho. —me guiñó el ojo y sonreí de inmediato.

Marea Baja || Carlos SainzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora