Por la frías calles de Japón dentro de un sombrio callejón en una caja se encontraba un hermoso gato negro, estaba temblando por el frío es lo más lógico pues es época de invierno, por más que intentará hacerse bolita y esconderse en el fondo de una caja no podía evitar el frío tan intenso que sentia en ese momento, segia temblando como una gelatina trato de acomodarse de manera que pudiera lamer su patita que por cierto sangraba gracias a que un hombre lo golpeó por tratar de jalar un poco de comida es lógico que se moleste, pero era necesario golpearlo tan duro hasta hacerlo sangra?
El lindo gatito arto de esto decidió salir y buscar algo más calentito,como pudo se dirigió dando pequeños brincos por la ciudad, viendo que podía encontrar hasta que se topó con una mantita algo desgastada pero que le serviría demasiado para poder dormir bien , el algo emocionado fue directo al lugar y con su boca tomo la manta, llevándola al lugar donde estaba su pequeña caja, dio un pequeños brincos y como pudo acomodó la manta, sólo así pudo mantenerse cálido.
T/n miraba la lista de cafés que se encontraban disponibles, algo dudosa decidió probar algo nuevo, optó por la tercera opción y una gran porción de su pastel favorito. Quería disfrutar de su momento sola, eso era lo que siempre hacia desde que se independizó y no le molestaba, le agradaba la idea de darse todos los lujos que de niña no tuvo. Justo cuando salió de la cafetería hizo una mueca, el frío sin duda era mucho,tenía que avanzar rápido si no quería que su café se enfriará, camino a paso medio rápido y se puso sus audífonos, la hermosa melodía quedaba perfecto con el clima que estaba ahora, la noche estaba solitaria y algo silenciosa, al aproximarse al callejón escuchó un pequeño maullido, se detuvo en seco y observó atenta al callejón, otro gemido se escuchó por lo que t/n se acercó emocionada.
T/n: gatito? ─ busco en todo el pequeño lugar con la miraba ─ bisho bisho ─ hizo sonidos tratando de llamar la atención del gato, quien al escucharla abrió los ojos y salió del pequeño rincón soltando un maullido ronco.
T/n: mira ¡que hermoso eres! ─ se acercó a el acariciando su cabecita ─ quien te pudo dejar aquí he? ─ los ronroneos del gato se hicieron presentes ─ que cosa tan más linda ─ volto a ambos lados, comprobando que no hubiera nadie y lo cargo ─ ¡michi que veo michi que robo!
Lo acomodo en su pecho, ventajas de tener un abrigo holgado, el gato negro se acomodo emocionado y roroneandó, al fin tendrá un lugar y mucho amor. T/n recordó que tenía que llevarlo a revisar se dio cuenta demasiado tarde al ver la herida del gato, así que sin más lo llevo al veterinario que por suerte estaba abierto.
T/n al abrir la puerta de su departamento soltó un suspiro de satisfacción, el ambiente cambio por completo volviéndose más cálido de lo normal, colocó la caja para gatos que le había dado el doctor veterinario en el piso y abrió la pequeña reja de la misma, ella miro con ternura al gato azabache quien al escuchar el ruido se despertó.
T/n: Bienvenido pequeño, este será tu nuevo hogar ─ se levantó. Se dirigió a la cocina para preparar algo para el gato ─ verás, soy nueva en esto así que no tengo comida de gato ─ miro su refrigerador ─ sólo tengo carne, te gustaría?
Se sintió tonta hablando con un gato hasta que escuchó un maullido de el el gato la veía profundamente
T/n: ese es un si, esta bien ─ tomó un plato pequeño colocó la carne y se la dio al pequeño gato ─ como te llamaré, que te parece...gato
El gato alzó su mirada, t/n juraba que la miraba burlona y se acercó a ella frotando su cuerpo, marcando su territorio. T/n al verlo sonrio enternecida y acaricio su cabeza sus manos fueron directo a la barriga del gato quien al sentir las caricias de su dueña se puso boca arriba maullando en el proceso.
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Dulces De Media Noche { One Shot De Aizawa X Lectora }
РазноеEste libro es para todas las chicas que les encantaría pasar tiempo con este bello hombre, después de todo...no tiene nada de malo imaginar un poco