♣︎ 4 ★

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♠︎Risitas amargas●

Cerca del mural, donde estaban pintadas todas las mascotas que tiene y a tenido el jardín, se encontraban dos idiotas, el sapo se encontraba sentado arriba de la espalda del bufón, mientras le trataba de doblar la pierna.

-¡Oh! Si supiera cuanto me duele- exclamó entre risas Bittergiggle, realmente no sentía nada, podía doblarse y hacer poses imposibles para el ser humano o cualquier otro tipo de vida.

-Vamos, ¿como un golpe en el torso si te duele?- pregunto, rindiendose.

-Una cosa es ser flexible y otra completamente diferente es resistir el dolor- respondió, como si se tratara de algo sencillo y obvio.

Se quedaron así por unos segundos, el bicolor empezó a ponerse nervioso al no sentir ningún movimiento por parte del sapo, ni siquiera se levantaba o hablaba, cosa que le empezaba a extrañar.

-¿Y por qué no te muev- sus palabras fueron interrumpidas repentinamente, debido a que el sheriff se acostó ensima de él, dejándolo ahí tirado en el piso, y para terminar se encontraba boca abajo, evitando le el siquiera poder empujar al sapo. Esto hizo que el rostro del bufón volviera a tener reacciones diferentes.

"¡Carajo! ¿¡Y ahora como nos quitamos a este?!"- pensó Giggle.

Trato de sacudir su cabeza como pudo, pero al final ambos se rindieron y dejaron caer su cara contra el piso, demostrando derrota. El sapo al notar que Bittergiggle ya no tuvo ninguna reacción, sonrió y se recargo aun más en este, haciendo que un escalofrío recorriera todo el cuerpo del bufón por el nuevo movimiento.

-¡Ya, me rindo, me rindo!- exclamó Bittergiggle.

Toadster tardo unos segundos en levantarse, pero cuando lo hizo, el bufón soltó un suspiro y rápidamente se levantó, antes de que el sapo volviera a hacer lo mismo.

-¿Te dolió?- exclamó entre risas el sheriff.

-¿Y cómo no me va a doler? Si pesas un chingo- respondió con burla el bicolor.

-Atrévete a decirme eso otra vez, y en tu existencia vuelves a contar un chiste- apretó uno de sus puños.

-Estas gordo- deletreo Bittergiggle.

-¡Sacaste boleto!- Y se lanzó nuevamente arriba del bufón.

-¡No, no otra vez!- grito -¡Ayuda, esto es un abuso!

★- ¿Sabes? Tu espalda es muy cómoda.
♣︎- Que genial y todo, ¡pero no soy una puta almohada!

Este pequeño capítulo lo aprovecharé para decir tres cosas.

Primero, habrán más actualizaciones los viernes, sábados y domingos.

Segundos, nunca pensé que esta historia tendría más de 9 votos.

Y tercera, ¿quién debería ser el más alto de los dos? ¿el sheriff o el bufón?

Eso es todo, ya se la saben, dejen sus preguntas si tienen ➡️.

「El sapo y el bufón」Un reino, dos idiotas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora