VII

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Los rumores en Desembarco del rey siempre han sido los más impactantes, nadie se pierde ninguno, aún sea o no sea de la familia Targaryen.

Cuenta una prostituta que vio a la princesa Rhaenyra acompañada de un joven castaño, supuestamente haciendo cosas que la realeza considera hacer en su lecho, ¿Pero será verdad o una simple mentira?

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La princesa Rhaenyra estaba cepillando su cabello, hoy iba a ir a los aposentos de su prometido, tal y como el había dicho. Ella a decir verdad estaba nerviosa, su mente seguía recordando aquel momento dónde sintió deseo.

Ella nunca lo había experimentado, bueno, alguna vez sintió algo por su tío, a veces sentía un cosquilleo en su vientre cada que su tío hablaba en Valyrio, ¿Pero será amor o solo un simple deseo? Sus pensamientos fueron interrumpidos.

- "Princesa, cómo amaneció" - Preguntó Elinda, su joven criada.

- "Bien, Elinda me podrías ayudar con la trenza" - Respondió Rhaenyra con la cara un poco roja.

- "Claro princesa, para eso estoy, soy su criada y la puedo ayudar cuando lo necesite" - Decía Elinda mientras le hacía una trenza.

- "Claro que no, no solo eres mi criada, eres mi amiga, al menos eso puedo pensar" - Dijo Rhaenyra mientras agachaba la cabeza.

- "Si quiere que sea su amiga lo seré, le seré fiel hasta el final de mis días" - Dijo Elinda mientras sonreía.

- "Pues yo también te seré leal, seremos amigas y nos tendremos las dos" - Respondió Rhaenyra mientras se miraba al espejo.

- "Listo, se ve muy bella princesa, ¿Dónde desea ir, quiere que la acompañe? - Dijo Elinda mientras acomodaba el corset del vestido de la princesa.

- "Iré a los aposentos de Vikren, dijo que tenía algo que decirme, claro que me puedes acompañar" - Respondió Rhaenyra aguantando la respiración.

- "Mucho mejor, quedó listo, la acompañaré, pero me quedaré afuera de los aposentos, creo que necesitaran privacidad" - Decía Elinda con una sonrisita.

- "Pues, que estamos esperando, vamos" - Dijo Rhaenyra mientras iba hacía la puerta.

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- "Abran la puerta" - Dijo Rhaenyra a los guardias de su prometido.

- "Lo lamento mi princesa, el principe todavía descansa y tenemos órdenes de no dejar pasar a nadie" - Respondió un guardia mayor.

- "Cómo te atreves a contradecir a la princesa, quien te crees, ella es la prometida del principe Vikren" - Dijo Elinda mientras miraba al guardia.

- "Está bien Elinda, no pasa nada" - Dijo Rhaenyra mirando a Elinda. - "El principe me dió órdenes de venir a sus aposentos en la mañana, abran la puerta" - Dijo Rhaenyra mirando otra vez a los guardias.

Los guardias de la puerta se miraron entre sí, entonces decidieron abrirla.

- "Quedate aquí Elinda, no me demoro" - Dijo Rhaenyra mientras ingresaba a los aposentos de Vikren.

- "No se preocupe princesa, aquí estaré" - Respondió Elinda a la princesa.

Rhaenyra cerró la puerta, se volteó y fue a buscar a Vikren.

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