ACT TWO "I"

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Los pasillos de la fortaleza roja eran un silencio total, mientras que en una habitación conocida daba a conocer el cuarto hijo de la princesa

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Los pasillos de la fortaleza roja eran un silencio total, mientras que en una habitación conocida daba a conocer el cuarto hijo de la princesa.

Vamos princesa, no se de por vencida, ya hizo esto tres veces, no se deje ganar por la cuarta —

Rhaenyra pujaba, se daba por vencida, ¿donde estaba su esposo? Se suponía que la iba ayudar.

— ¡Ya puedo ver la cabeza, puje, puje! — Gritó la partera al ver la cabeza del mellizo de su hijo.

Rhaenyra dio su último grito cuando escuchó llorar a un bebé.

— Es una princesa, una hermosa princesa — Dio a conocer la partera.

Rhaenyra sonrió, ella era su primera hija.

— Quiero ver a mis hijos, quiero que me los den —Dijo Rhaenyra acostada con una sonrisa.

Una partera que cargaba al niño que había dado a luz de primero se lo pasó.

— ¡Oh, pero si te pareces a tu padre, mi niño! — Sonrió Rhaenyra cargando a su bebé.

— Tu nombre será Jacaerys, serás fuerte y guapo como tu padre — Dijo Rhaenyra tocando la nariz de su hijo.

Mientras las parteras alistaban a la melliza de su hijo, Rhaenyra pensaba en Vikren, ¿donde estaría?

— Princesa, me permite al príncipe, no puede cargar a dos bebés — Sonrió amable su criada.

Rhaenyra le sonrió, mientras su criada le daba a su hija.

— Mi primera niña, tu nombre Daella, eres muy linda, al igual que tu hermano — Rhaenyra le sonreía a su hija.

Mientras la princesa estaba con sus hijos, le preocupaba una cosa, ¿donde estaba su esposo? Se suponía que él la iba ayudar cuando daba a luz a sus hijos.

— Princesa, la reina solicita la presencia y la de sus hijos, inmediatamente — Dijo una criada ingresando a los aposentos de la princesa.

Rhaenyra gruñó, se suponía que habían dejado sus diferencias de un lado.

— Los llevaré yo misma, si hay alguien que sabe donde está mi esposo les agradecería mucho que me lo digieran — Dijo Rhaenyra mientras se ponía de pie.

— Princesa no puede llevarlos, todavía no se recupera del parto — Una criada decía mientras se le acercaba.

— ¡Si, todavía no lo hago!, pero su majestad pidió a los mellizos, así que yo misma los llevaré. Tráeme el vestido — Dijo Rhaenyra mientras caminaba.

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