Una Vida Diferente | Sirius Black

29. Veela

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James Potter

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El día más caluroso en lo que iba de verano llegaba a su fin. Después de las insistentes peticiones de su hija de poner una piscina en la parte trasera de la casa para soportar el calor de este verano habían dado sus frutos y Fleamont había comprado una piscina bastante grande en una tienda de la ciudad de Londres.

Un chico delgado, con el pelo negro y con gafas y que llevaba unos vaqueros cortos y una camiseta ancha, se encontraba limpiando la piscina, al estilo muggle, ya que al ser menor de edad no podía usar magia fuera de Hogwarts. Según el decreto para la restricción razonable de los menores de edad, todos los magos y las brujas que están bajo la edad de diecisiete años no se les permiten usar magia fuera de la escuela. Sin embargo, el Ministerio reconoce que pueden usar la magia en ciertas situaciones, tales como la defensa propia.

En el caso de James el verano anterior, por ayudar a su mejor amigo a escapar de los ataques de su madre, le llegó una carta unos días después en modo de advertencia del uso indebido de magia.

- ¿Por qué tengo que limpiar yo la piscina? – protestó James – Yo no fui quien la quiso comprar

- Creo que Alina lo hizo aposta – le dijo Sirius Black, el cual le llevaba a su amigo un vaso de agua

- ¿El qué? – preguntó James

- Irse a casa de vuestra tía para así no tener que limpiar la piscina – dijo Sirius con una sonrisa

- Muy gracioso – dijo James fulminándolo con la mirada – No sé qué gracia le hace ir con Marge... ES INSOPORTABLE!!

Este año, los Merodeadores cursaran sexto año. Al principio del sexto año, los estudiantes charlan de forma breve con el jefe de su casa para decidir que materias ver dependiendo de sus notas en los TIMO y sus metas para después de la escuela. Las clases que continúan tomando son, considerablemente, más avanzadas, algo que hizo sudar a Peter Pettigrew.

Dado el hecho de que rechazan varias materias, los estudiantes del sexto y séptimo año tienen más tiempo libre a la semana; pero por la gran suma de deberes y asignaciones que les mandan en las clases que les quedan pasan la mayoría de este tiempo estudiando y realizando tareas.

- ¿Ya tienes pensado que materias coger? – le preguntó Sirius a su amigo sentándose en el borde de la piscina

- Sí – le dijo dejando el vaso de agua cerca del borde de la piscina - Encantamientos, Defensa Contra las Artes Oscuras, Herbología, Transfiguración y Pociones

- ¿Auror? — preguntó Sirius con ironía

- Exacto – dijo con orgullo – ¿Y tú? ¿Qué piensas hacer?

- No tengo ni idea – le dijo pues sinceramente, Sirius no sabía que hacer

- ¿Y por qué no estudias para Auror? Seremos compañeros de trabajo – le dijo guiñándole un ojo

- No me llama ese trabajo... En realidad, no sé qué quiero hacer. – sus pensamientos fueron interrumpidos por el grito de la madre de James el cual indicaba que era la hora de comer.

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Alina Potter

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A varios kilómetros de donde se encontraban Sirius y James, atravesando campos, bosques y montañas, llegamos a un lugar alejado del mundo muggle, un lugar donde viven un sinfín de criaturas mágicas, un lugar conocido como La Ciénaga.