Mi secreto, mi reto

12- Miedo

Al salir de la oficina de Lexa, Octavia les mando un mensaje a sus amigas en su grupo, pidiendo que le envíen su currículum y referencias de su trabajo o anteriores porque necesitaba entregarlo antes de terminar su jornada laboral, que era súper urgente. Por parte de las chicas no había problema, ya se habían anticipado desde el sábado por la tarde para tenerlo todo listo y estar preparadas, porque con todo lo que ha contado Octavia de la empresa y su jefa que siempre quiere todo a tiempo y perfecto era mejor estar listas para todo.

Igual agendo una reunión con ellas en su departamento para que la acompañen y les cuente todo lo que sucedió. Ellas le debían la cena con todo y tragos gratis, lo necesitaba de verdad. Cuando tuvo toda la información en su bandeja de entrada les dio un pequeño vistazo comprobando la información y reenviando al correo de su jefa.

Salió de la empresa, se dirigió a su auto, subió y suspiro apenas cerró la puerta, postró sus manos sobre el volante y puso su frente sobre este, con los ojos cerrados y pensando que hoy se salvó, y ayudo a sus amigas. Aunque no estaba segura de que pudieran entrar, habia esperanza de que así fuera. Suspiro otra vez y se puso en marcha hacia su departamento. Pensando en lo feliz que estarán sus amigas y que no paso a más su desliz de haber pasado un límite que no debió pasar con su jefa.

Ya en su departamento, paso a la sala, se sento en el sofá de siempre, estiró su cuerpo por completo tensando y relajando al final. El confort que causa este al llegar a casa y sentarse sobre el era lo mejor. Puso los pies sobre la mesa de centro y cerro los ojos solo por unos minutos sintiendo el ambien tan relajante que le invade estar en casa descansando.

Después de unos minutos así, se levantó y fue para el baño, empezó a llenar la tina. Hoy quería relajarse todo lo que podía y celebrar con sus amigas, dejo llenando la tina y salió a su cuarto a buscar la ropa cómoda que se pondría y un poco de sales para su baño. Volvió y empezó a introducir las sales. Se desvistió y sumergió en el agua, sintiendo tan deliciosamente todo por su cuerpo, aceptando tanta relajación que se sintió querer tomar una siesta, pero mejor borro esa idea, no quería ahogarse.

Siguió en la tina por casi 20 minutos, salió, se seco y puso una toalla en la cabeza, se metió a su cuarto y checo la hora ya casi daban las 7 así que sus amigas no tardaban en llegar, al menos Clarke, que Raven siempre llegaba tarde a todos lados y eso tenía que hablarlo muy seriamente con sus amigas.

Lexa era una mujer de costumbres y reglas, siempre tenían que seguirse porque ella era así de demandante. Siempre hablaba en serio sobre romper las reglas, si alguien no cumplía con sus exigencias, ya sabían que esa persona no volverían a verla por la empresa. Ella era la primera en enterarse por supuesto, siempre llegaban a ella los correos solicitando las bajas del personal y siempre era lo mismo, el incumplimiento de sus funciones laborales y no cumpliendo las reglas laborales dentro de lo establecido en el reglamento, simple y conciso,  pero al hablar con el personal ellos mencionan que solo se equivocaron una vez que no es justo un despido y a ella le tocaba lidiar con la gente que se quejaba de sus despido injustificados.

Recuerda la primera vez que hablo con alguien que se quejaba de su despido y que no debería ser legal. El tener que hablar con la jefa, para aclarar el motivo de su justificación de términos laborales con la empresa.

Flash back

- Disculpe señorita Woods las molestias, pero me acaba de llegar el señor Richardson con que su baja era injustificada y que quisiera aclarar el asunto con usted en la oficina de RH, para que todo quede claro, se que es una persona ocupada pero es indispensable esclarecer los puntos de despidos y no hayan problemas jurídicos con respecto a su despido.

- Está bien señorita Blake, voy para haya a aclarar todo esto, y dejar bien claro porque no seguirá trabajando aquí. Estaré ahí en 5 minutos.