35- La necesito

104 4 0
                                    

Su primer encuentro se iba a dar y estaba nerviosa, le había comentado Sonia que es lo que sucedía con las chicas, lo que pedía de ellas y que hacer para mantenerla feliz, incluso le dijo que es lo que tenía que hacer para recibirla y que decir.

Se había puesto lo que le dijeron.

Le dieron 2 de estos 1 negros y otro rojo, en esta ocasion puso el rojo porque pensaron que le encantaría

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Le dieron 2 de estos 1 negros y otro rojo, en esta ocasion puso el rojo porque pensaron que le encantaría.

Se puso en la posición que le dijeron y también que la saludara cuando escuchará que la puerta se abría, saludo al entrar y espero a que le dijeran que hacer.

- Levántate, ya te dijeron como recibir a tu ama, sabes que eres mi esclava y harás todo lo que te ordene, no me discutirlas y solo me respondes cuando te hablé, con respeto, dirás si mi ama o no mi ama, ¿Entendiste?

- Si mi ama- lo dijo mirándola a la cara

- ¿No sabes que no debes de verle a los ojos a tu amo si no te da permiso?  - le dijo con furia en sus ojos - mereces ser castigada, te quiero boca a bajo sobre la cama ¡Ahora!

Apple obedeció, sabía que le tocaría un castigo y ojalá no fuera tan duro, no sabía que esperar pero había visto tantas cosas de tortura en el cuarto que tenía miedo. Lexa tocó su trasero suavemente y luego lo pellizco y manoseo con fuerza, contuvo su grito y dolor. Lexa se alejo y agarro una tabla de madera gruesa se acercó y le golpeó en el trasero, su cuerpo se arqueo de dolor pero no salió nada, sabía que si gritaba podría ser peor y se mantuvo callada, solo le dió 3 pero su trasero estaba rojo de dolor.

Lexa dejo la tabla sobre la cama y acarició dónde le pegó, lo hizo lentamente y se veia muy rojo, se fue al baño y trajo con ella un pañuelo húmedo y se lo puso sobre el área. Lo sintió bien, le estaba refrescando dónde le ardía.

- Sabes callar, eso es bueno... no tengo que golpearte si te portas bien, pero debes saber comportarte, el amo ordena y la esclava obedece.

Acaricio su cabello mientras esperaba un poco para que se recuperará de lo que había hecho. Pasados unos minutos de caricias se sentó en la cama y descanso su espalda en el cabecero y le dijo - Hazme feliz y todo estará bien,- saco su teléfono y puso una canción- baila para mí.

Earned It de The weeknd se escuchó por el parlante en la habitación.

Después de bailarle le pidió que se acostara boca abajo y que pusiera las manos detrás de su espalda, fue por más cosas en el mueble del cuarto y regreso atras de ella, le tapo los ojos y la esposo -  Date la vuelta, - ella obedeció - abre las piernas - lo hizo y espero por ella.

Sintió que la acariciaban las piernas era tratada con delicadeza, nadie la había tocado así, siempre era bruscos al trato e iban a lo que iban, había hecho felaciones y la habían tomado por los dos orificios con fuerza lastimado sus partes. Esto era diferente, no se sentía mal.

Sintió que llegaban a sus caderas las caricias y la sintió subir a la cama, la sentía acostada a su lado y sintió su mano derecha acariciarla otra vez las piernas y subir lentamente, esas caricias la estaban haciendo sentir bien y le estaban creando un calor que no había sentido nunca por ningún cliente.

La sintió pasar por su cintura, eso le hizo costillas, se removió un poco, ocasionando una reacción en su ama, le pellizco con fuerza esa zona, quiso gritar pero se contuvo, solo se arqueo y recibió un manotazo en la cadera. - No te muevas, no te he dado permiso- después recibió una bofetada que le dejo roja la mejia - debes contestar si no quieres que te dé de golpes.

- Si mi ama

Siguieron las caricias hasta llegar a sus senos, sus toques hicieron que sus pezones se pusieran duros. Los pellizco y jalo con suavidad y luego con mayor fuerza solo para ver su reacción. Se puso roja de dolor y gusto. Por su mente paso que esto era diferente, le gustó que la toque,  le estaba creando sensaciones en sus partes bajas, algo que no había sentido, se estaba humedeciendo. Sintió unos labios y dientes jugar con ellos, primero suave y luego duró quería gritar pero solo salió un gemido que ni ella creyó. Sintió la mano bajar por su sexo, sintió que le quitaban la prenda que casi no cubría nada, quedó suelto de un lado dando acceso a sus partes íntimas, la mano que le habia desabrochado una parte, se deslizó suavemente y gemio más al sentir esos dedos jugar en su lugar húmedo, el que nunca había estado húmedo por ningun cliente, no sabía si sentía más por privar la vista, pero se estaba excitando, la tenían amarrada y había sido golpeada e humillada pero estaba exitada por esa mujer, la que la había comprado el día anterior, no pareciera que esto sería un tormento si se sentía así con ella, si así sería año y medio, podría con ello.

Sintió que se subía sobre ella, sintió ese cuerpo caliente, ese perfume caro y ese cabello sobre su pecho, sintió las lamidas, succiones y mordidas en su senos, esas manos trabajando sobre su sexo. Lo estaba gozando y su ama lo estaba disfrutando también, estaba gozando lo que le estaban haciendo.

Su ama le quitó el antifaz y le ordenó que la mire a los ojos, la observo bien y vio esos ojos verdes oscurecidos llenos de lujuria descubriendo que le estaba fascinando todo lo que le hacían. Estaba leyendo su interior con una mirada, se estaba dejando llevar y se había entregando a su ama, a su dueña, a la que le pertenecía sus noches en ese club. Sintió que la penetraban y gimió fuerte cerro los ojos por todo lo que sintió, fue duro pero no la lastimo, estaba dan dilatada que sus dedos entraron sin ninguna resistencia. La siguió penetrando con fuerza,  sintiendo las mordidas y succiones en los senos. Estaba llegando a experimentar algo único con su ama y lo sintió venir - Mírame - abrió los ojos y ahí estaba ella otra vez pero con un brillo en sus ojos, que sabía que había obtenido lo que quería de ella. Llegó al orgasmo, al primero desde que había estado ahí, nadie le había dado placer, ella lo daba y había llegado su ama a darle lo que nadie le dió. Su primer orgasmo.

Lexa se quitó de encima de ella y se fue a dónde tenía más herramientas, de una cajita saco un arnés, se bajó los pantalones y se la puso sobre la ropa interior, se sentó otra vez dónde estaba cuando le bailo y le dijo -  Quiero que te folles tu misma y cuando llegues que me agradezcas como debe ser.

Siguió sus órdenes y volvió a llegar a otro orgasmo más esa noche. Al final de llegar le dijo - Gracias ama y se quedó sobre su ama quien la jalo para que se quedara sobre la cama no sobre ella como había quedado.

- Quiero que me hagas llegar también, y espero sepas usar esa boquita porque lo harás con esos labios y esa lengua.

Fue su primer oral a una mujer y no le disgusto para nada, fue delicioso para ella también, era la primera vez que tenía una noche donde había disfrutado tanto como su cliente y se sentía bien.

Cada que solicitaba una noche con ella, se sentía feliz de que alguien le haga sentir lo que nadie pudo y pensó haber descubierto su sexualidad, que ella era lesbiana al disfrutar con su ama y no otro cliente.

Ahora en la actualidad, estaba ahí sin saber que había pasado, su ama ya no la quería y se sentía fatal, quería volver a ver a su ama, quería que le hiciera todo lo que quisiera, quería sentirse amada como ella lo hacía, pero no sabía cómo tenerlo. La había abandonado y ahora tenía que cumplir con sus cuotas que le dijo Roan o sino no comería ni tendría donde vivir. No sabía que pasaría ahora con ella, pero seguro volvería a ser usada como antes de su ama, antes de que la salvarán y le enseñaran a ser amada como esclava.

Termino su noche cumpliendo con su cuota, tuvo 4 clientes, todos unos viejos, que solo querían felaciones y penetrarla, se sentía sucia, y con ella nunca se sintió así.

Se puso a llorar en silencio y con voz baja dijo: - La necesito, ama la necesito.

Mi secreto, mi retoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora