Mientras nadie ve

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Mientras miraba por la ventana de la limosina, sin prestar mucha atención a lo que veía, ve una chica de pelo verde menta saliendo de un café, su piel de un blanco marfil y una cara que no pudo distinguir muy bien. Vibra su celular en el bolsillo de su saco con varios mensajes

W Park: 
- ¿Dónde diablos estás Noceda?
- ¿Acaso lo volviste a hacer?
- Dime que no estás atada de pies y manos en una cama de un hotelucho de mala muerte
- ¡Contesta, maldita sea!
Ríe mientras lee los mensajes de la ojiverde malhumorada y procede a llamarla.

-¡Noceda! Llevo más de una hora intentando contactarte ¿dónde carajos estás?-
Se aguanta la risa para no ser asesinada cuando se vean.
- Voy camino a casa, tuve que hacer una parada para resolver un "pequeño inconveniente" -

- ¿Otra vez Lucía?-

- Mhmmm-

El chofer baja la ventanilla que los separa para indicarle que están por llegar a su destino.
- Bueno - decía Willow al otro lado de la llamada con una voz juguetona - al parecer yo también tendré que salir a divertirme hoy ¿vienes?-

- Cuenta con eso cariño -
Un silencio entre ambas confirma sus planes -Te veo en una hora - dicen al unísono y cuelgan.

Luz desciende del auto y se dirige corriendo a la habitación para darse una ducha y alistarse.

•Más tarde en la casa de Willow•

-Willy bebé, déjame entrar- Lucía golpeaba la puerta de la habitación mientras rogaba -Bebé por favor abre, no es como si hubiese faltado a la junta por ver a otra mujer- en ese momento se abre la puerta de la habitación revelando a una chica de cabello azabache, de ojos verdes, y un semblante como el de una diosa.

-no te atrevas a inventar excusas- dice Willow mientras sale de la habitación con sus tacones en la mano - sé muy bien qué estabas haciendo, cuando llegaste al hotel yo estaba en el lobby despidiendo al senador Jenkins- eso era una completa falacia, pero conocía muy bien a Lucía y sabe muy bien lo descuidada que puede llegar a ser. - pero no te preocupes bebé- giró sobre sus talones para ver a la mayor de frente y acariciar su rostro -haré de cuenta que nada pasó y saldré con mis amigas- se apoyó en su pecho mientras se ponía los tacones, cuando enderezó su cuerpo nuevamente, le dio un pequeño beso en los labios a Lucía.

-¿Estás segura de lo que dices?- pregunta la mayor incrédula.
- Claro que sí, no es como si te supieras el nombre de esa mujer, sé muy bien cuáles son tus necesidades y qué tipo de mujer puede saciarlas- toca su nariz ligeramente con su dedo índice y se voltea para dirigirse a la salida -si te vas a quedar, no me esperes despierta, no sé si vuelva pronto- es lo último que dice antes de cerrar la puerta y dejar a una morena cansada y algo confundida.

•The Owl Club•
Luz detiene su vehículo frente al establecimiento y le arroja las llaves al chico de ballet parking, mientras entra apresurada al lugar.

- Bienvenida señorita Noceda ¿le ofrezco la mesa de siempre? Le pregunta la host de bienvenida a quién Luz mira con incredulidad para después fruncir su ceño con disgusto.

-Claro que no Emili, hoy es jueves y la señorita Noceda requiere de un espacio más privado- aclara Eda mientras saluda de beso en cada mejilla a Luz -debes disculpar a Emili, es nuestra nueva host y aún no ha tratado con nuestros clientes VIP- Luz más calmada le dirige la mirada, una curiosa que la recorre de pies a cabeza y sonríe volviendo a mirar a Eda.

-Está bien, no hay nada que no solucione una buena "charla"- dijo con cara picarona y Eda empieza a reír mientras la abraza.

-No tienes  remedio niña, veré si le interesa ir a "charlar" contigo más tarde, por ahora ve al salón rojo que te están esperando- le da unas palmadas en la espalda para que empezara a dirigirse al dichoso salón.

-¿No pensarás empezar la fiesta sin mi? - preguntó Willow mientras se acercaba a Luz por la espalda y empieza a acariciar su cuello hasta quedar frente a ella. Toma las solapas de su traje y la lleva a su altura para quedarse viendo a los ojos fijamente -¿o sí, Noceda?

-Oh cariño ¿aún no has entendido que la fiesta nunca empieza sin ti?- La más alta cierra el espacio entre ambas con un pequeño beso que deja a la de ojos verdes deseando más.

- Eres bienvenida a nuestra fiesta si quieres, Emili - le dice Willow mientras se dirige con Luz al salón tomada de su brazo.

• Entrada de The Owl Club•
Lucía baja de la limosina buscando a Willow desesperadamente cuando se encuentra con Emili y Eda en la entrada quienes le impiden paso -¿Dónde está Willow? No trates de negarlo Eda, la acabo de ver entrar-

- Claro que si Lucía, Willow acaba de entrar con Luz, se fueron al salón rojo, sabes muy bien dónde es- Lucía sale corriendo hacia el lugar indicado, mientras la mujer de pelo grisáceo sonríe
- Pe pero Dama Búho ¿acaso esa no es la prometida de la señorita Park?- pregunta Emili atemorizada por lo que la mayor de las Noceda pueda encontrar.

-Así es Emili, también es la hermana mayor de Luz, pero no te preocupes, este no es mi primer rodeo, ni el de Luz- tomó su sangre de manzana y se sentó a disfrutar del show en vivo.

• En el salón rojo•

-¡¿Con que salir con tus amigas?! ¡Ya sospechaba yo que Luz y tú tenían algo¡- gritaba Lucía mientras entraba desesperada a la habitación -¿pero qué caraj...?- No terminó la frase cuando encontró a Willow y a Luz jugando poker con otras tres chicas, que suponía eran las amigas que su prometida mencionó.

- El salón rojo es multi propósito Lucía- se levanta Luz con tranquilidad de su silla y se dirige lentamente a su hermana -¿No crees que ya fue suficiente de tus escenas por hoy?-

Lucía solo era unos cuantos centímetros más alta que Luz, sin embargo, la superioridad física de la menor era evidente, así que intentó subir el mentón para no sentirse intimidada -N no es ninguna escena-

-Lucía, cariño ¿acaso estoy haciendo algo diferente a lo que te dije que haría? Le preguntó Willow desde su puesto en la mesa, Lucía negó con la cabeza -entonces deja de molestar a Luz con tus acusaciones y toma un lugar en la mesa- Luz la mira con rabia por invitar a Lucía a quedarse, pero instantáneamente le sigue el juego y la guía a una de las sillas vacías.

-No Willy, está bien.- dice algo apenada  y luego mira a Luz - lo siento tanto... no quise ofenderte- Luz la mira a los ojos con cariño.

-No hay lío, Noceda- le da dos palmadas fuertes en la espalda - ahora aprovecha la noche libre de Will, la tendré ocupada toda la noche- le dijo en voz baja mientras la acompaña a la puerta.

-Gracias Noceda, esto si que es trabajo en equipo.- le dice abrazando a la menor para salir del salón rojo.