Mientras nadie ve

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•Sábado en la noche•

Luz se encontraba en su loft con vista a la ciudad, tomando una copa de vino mientras leía Matar un ruiseñor de Haper Lee. Vibra su celular, siempre en silencio para no perturbar su mood. -¿Padre?- pregunta -¿a qué debo tu llamada?- escucha lo que dice su padre - Llegó el momento- afirma y solo se escucha el silencio del otro lado - entiendo- dice con voz apagada.

Termina la llamada y procede a buscar el número de Willow. Presiona su contacto y escucha el tono mientras le contesta.

-Hola cariño- dice Willow sin preocupaciones
-Llegó el momento- la voz seca de. Luz la saca de lugar
- ¿quién es la afortunada?- pregunta la azabache con voz irónica
- la menor de la familia- responde Luz inmediatamente
-¿Quién diría que Amity Blight tendría la suerte de tener como esposa a Luz Noceda?-
-Sabes bien que no elegí esto- le explica a su amante.
-Y tú sabes muy bien que sólo yo te puedo dar lo que necesitas-
-ven-
Sólo puede oírse el silencio hasta que Willow responde
-Sí, ama-

•Mansión Blight•
-¡Me niego a casarme con alguien a quien no amo!- grita Amity a sus padres, luego busca la mirada de su padre quien evita el contacto visual.

-Debes cumplir con tu deber como una Blight- dice Odalia sin chistar -Luz Noceda es la segunda al mando de las industrias Noceda, con esta unión podremos controlar el mercado de la tecnología y la seguridad- ni siquiera mira a su propia hija a los ojos, para la matriarca Blight su hija menor es sólo un objeto más.

-¡Papá! - grita la menor desesperada.

Intimidado por la mirada de su esposa responde -Date la oportunidad de conocerla- sigue sin poder mirar a su hija a los ojos.

Amity sale corriendo para subir las escaleras y llegar a su cuarto a llorar sin consuelo alguno.

Unos minutos después se escuchan unos suaves golpes en la puerta.
-Mittens...- Susurra su padre en la puerta -déjame entrar- ruega acariciando la madera.

-¡Vete!... me vendiste...- dice sollozando la peli verde.
Su padre abre la puerta lentamente para luego acostarse junto a su hija. -entiendo muy bien tu frustración, y créeme que me opuse totalmente a este trato con los Noceda, pero tú madre...- dijo con un hilo de voz.

El silencio entre ambos se sintió eterno.

-Cásate con ella- dijo su padre rompiendo el sielencio -dame un año para arreglar esto, no tienes que amarla, ni siquiera besarla después de que haya pasado la ceremonia-  susurraba su padre mientras miraba al techo y Amity lo escuchaba atentamente - usa tu talento en los negocios, haz un trato con Luz, estoy seguro que se opone a esto tanto como tú- la miró fijamente -En un año resolveré todo, confía en mi-

Amity no confiaba en nadie más que en su padre -Está bien- se derrama una última lagrima por su rostro. -un año-

-intenta conocerla, sé bien que no es Boscha, pero inténtalo...- la menor lo mira desconcertada - ¿qué?- ahora está él quien la mira riendo -¿Pensabas que no lo sabía? Por el titán hija, es bastante obvio- ésta vez frunce el ceño y le retira la mirada -Boscha se ha ganado un puesto en esta familia... pero aún no la considero digna de ti-

-No la consideras digna porque la fusión de la compañía de su familia y la nuestra se hizo hace años y ahora no representa utilidad- ahora es la peliverde la que frunce el ceño.

-Quien opina así es tu madre- se sienta en la cama -No la considero digna porque nadie lo es de mi pequeña Mittens- su tono de voz es dulce mientras acaricia el rostro de su hija.

-¿Cuándo se anunciará? - dice resignada

-Primero se presentarán en una pequeña fiesta que organizarán tu madre y la suya- le da la información que apenas conoce -acudirán ambas familias y algunos conocidos- escucha el suspiro de su hija- No serán más de 30 asistentes...- voltea a mirarla -una de ellas será Boscha-

Los ojos dorados de Amity revelan que aún no había considerado la posibilidad de que su Crush asistiera a la fiesta donde conocerá a su futura esposa -¿cómo voy a explicarle que es sólo por un año?- empieza a temblar de los nervios.

-No puedes decirle a nadie, toda deben creer que son una pareja enamorada- sentencia su padre sin titubear -sólo así podremos actuar sin que sospechen nada-

-¿sin que sospechen quiénes, papá? - le pregunta preocupada.

Alador cae en cuenta de lo que dijo e intenta alivianar el ambiente besando a su hija en la frente. -No te preocupes por nada... sólo... confía en mi- se levanta de la cama dejando confundida a la peliverde y sale de su habitación.
-Descansa hija-