Un pequeño amor. (Sonadow/Shadonic)

11

Pasó una semana más para que Maria lo llevara a la universidad.

Su colita no paraba de agitarse. El campus había sido su hogar un tiempo, le emocionaba poder ver lo que podía encontrar ahora con un poco más de frio.

Quería ver de nuevo a los amigos de Shadow, se había divertido con Knuckles y parecía que el también se divertía, Tails era el cachorro más adorable, quería ver como volaba con sus colas.

Ahora que lo pensaba, casi no jugaba con Shadow. Giró hacia el mayor, quien se colocaba un brazalete.

—Shadow, no olvides la laptop.— Maria hechaba una manta a la mochila y un traste con algo, Sonic se preguntaba que clase de magia había en las bolsas y mochilas.

Vio como el azabache se acercaba con la laptop en una mano y con la otra le tendía el otro anillo dorado. Lo tomó y vio como se alejaba. Remango la sudadera y lo coloco encima del guante, como la vez pasada.

Pero no sabia como configurarlo...

—Eh...

—Ya esta preparado, no te preocupes.— Shadow sonrió ligeramente, el llevaba puesta una sudadera negra, se parecía a la suya, pero había visto un pequeño bordado en la manga izquierda.

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Las clases lo mareaban, hablaban de tanta cosa que no entendía nada. Cuando hecho una mirada, casi se cae por ver la pizarra llena de números y palabras que no comprendia.

Miro hacia Shadow, arriba, en el escritorio. Parecía colorear porque cargaba con un color azul. Se pregunto que estaría dibujando, casi nunca lo hacía en casa, más bien se la pasaba leyendo.

Se acurruco en la manta de la mochila, las clases no eran para él, sólo se estaba agobiando. Intento distraerse sin pensar en comida, le daría hambre y todavía no quería comer de aquellas galletitas qué había preparado Maria.

—¿Crees que deba despertarlo?—

—No lo molesten, debió de agobiarse...—

Sonic abrio los ojos de golpe y miro a su alrededor. Seguía dentro de la mochila, en la manta, pero ahora veía el cielo nublado. Asomo la cabeza, Knuckles y Silver lo veían curioso, por un momento se puso nervioso, no veía a Shadow.

—¿Hace cuanto estamos afuera?— Pregunto a nadie en concreto.

—Desde hace unos minutos.

—¡Apenas llegue!— Ahora respondió Silver, emocionado por volver a ver al erizo azul.

Sonic asintió y salió de la mochila. Miro un poco más al rededor. Rouge le saludaba con la mano, imitó el gesto.

—¡Hola! Creí que dormirías más, Sonic— Maria veía entre él y su laptop, sus dedos se movian de forma muy rápida.

—¿Sonic?— La cabeza de Tails se asomo entre los brazos de la chica—. ¡Sonic!

El pequeño zorro voló hasta el erizo para chocar sus puños, Sonic lo veía impresionado.

—Shadow, no te muevas— Sonic casi se rompió el cuello en dirección a la voz. Shadow estaba frente a Amy.

Estaba envuelto en una bufanda, una muy peluda y sin su sudadera.

—Eh... ¿Qué están haciendo?

Tails miro ligeramente hacia la dirección que miraba el erizo.

—Son sus vitaminas.— El zorro se encogió de hombros, dejando de volar—. Amy es quien lo inyecta, también la ayuda a mejorar para cuando haga sus practicas