Un pequeño amor. (Sonadow/Shadonic)

6

Se había despertado con un intenso antojo a té.

Él quería café...

Su almohada había estado oliendo a manzanilla y ni hablar de aquellas dos flores que aparecían en su jarrón.

Sus orejas se hicieron hacia atrás, le había preguntado a su compañera sobre las flores, a señas, claro... Pero ella sólo sonrió y un "Tal vez" salio de sus labios. Le enseño los colmillos con el ceño fruncido y ella sólo rió.

Bajo otro escalón. Ahora estaba impregnado de manzanilla y lavanda. No es que odiara la manzanilla, pero nunca cruzó por su pequeña cabeza que podría usarla para calmarlo en vez de comer sus pétalos.

Bajo otro escalón y estornudo, un pequeño estornudo que no logro cubrir, otro chillido para él, por eso los cubría. Escucho un jadeo detrás suyo y giro la mirada, el erizo azul de tres escalones atras estaba mirando hacia otro lado y una mano cubría su hocico, sus ojos miraban fijamente el papel tapiz que decoraba la única pared.

Iba a hablar, pero unos pasos y unas zapatilla azules bajaron hasta detenerse un par de escalones más atrás.

—Crei qué ya estarían en la cocina, ¿Sucede algo?— Ambos negaron, eso hizo fruncir el ceño a Shadow—. ¡Los llevare!

Rápidamente tomó a Sonic en una mano, sólo se escucho un chillido emocionado, pero Shadow escucho claramente un "Yepiii". A Shadow lo tomaron de la misma forma con la otra mano, pero cuando menos lo pensó, ya estaba sentado junto a Sonic.

—¡Buenos días!— Su alegría casi hacia que se cegara por lo deslumbrante que llegaba a ser en algunas ocasiones.

—Buenos días...— Respondió el saludo por primera vez sin un "Uhm" mientras veía la dirección en la que caminaba la joven.

Casi podía sentir los destellos en los ojos de Sonic sobre su cabeza, miro hacia otro lado, intentando no sentirse abrumado

Maria los dejo en la barra. Shadow intento volver a estornudar, pero logro detenerlo con sus manitas enguantadas, sus orejas volvieron a hacerse hacia atrás, enojado. Comenzó a quitarse los guantes, los dejaría a un lado y lavaria sus manitas en el grifo del lavaplatos, pero el no sabia que estaba siendo observado.

—Haré panckackes— Informo la rubia sacando los utensilios que necesitaría para la mezcla. Ambos erizos la miraron, esperando poder ayudar—. Díganme con que los quieres acompañar, sólo eso.

Acerco un lápiz pequeño y unos post it para ir del otro lado y buscar la harina. Sonic miro con detenimiento las pequeñas hojas, nunca había comido panckackes... No sabia realmente con que se podían mezclar.

En cambio, el erizo azabache llego anotando rápidamente y se hizo a un lado. Shadow había visto la duda, pero no tenia en claro a que se debía, eso hasta que con cautela vio como el erizo azul se acercaba.

—¿A que se refiere con acompañar?— Su tono era avergonzado. María había estado haciendo el desayuno para los tres (y en ocasiones para cuatro) pero hasta ahora, Sonic no había tenido que decidir por que ingrediente agregar a su comida.

Aunque tal vez era una de esas ocasiones especiales en las que no había tenido oportunidad de degustar.

Y Shadow, un erizo muy ansioso, buscaba las palabras para explicarle correctamente las mermeladas, jarabes y frutas con las que podría acompañar que fueran deliciosas y no le diera un "coma diabetico"

Aunque termino pidiendo una sugerencia...

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Shadow tenia sueño y frío.