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Parecía un sueño hecho realidad. La calidez y comodidad que el me brindaba era inexplicable, genuina. Sonreí al verlo acomodarse entre mis brazos y suspirar. El dolor que sentía era casi insoportable y el cansancio me consumía.

¿Pero hay algo mejor que estar recostada con el amor de tu vida y tu precioso hijo? Mi respuesta ante esa pregunta es no, no hay nada mejor que esto y la increíble sensación que se sentía.

Tras pasar las horas el sol se asomaba y la idea de tener que levantarnos era horrible, me dejaba un mal sabor en la boca y odiaba eso. ¿Se puede odiar y querer algo al mismo tiempo? Sinceramente no tengo idea, pero las sensaciones que recorrían mi cuerpo eran diferentes por un momento cálidas por otro frías a tal punto de congelar tus manos y pies.

En cuanto cerré mis ojos e inhale oxígeno volví a abrir los ojos encontrandome con el sonido de los bolos, a mis hermanos peleando, Jimmy perdido por una pequeña esquina con nuestro bebé y yo junto a mis hermanos. Durante el último día supimos que el novio de vanya es el causante del Apocalipsis y ella el detonador. Nuestra casa ahora solo era unos cuantos escombros, había sido destruida por Vanya y con la academia nuestra madre junto a Poco.

Las lágrimas eran una tontería que quería evitar ahora mismo, todos estabamos hechos mierda, pero aún nos quedaba por luchar y derrotar a Vanya. No queremos matarla y tampoco lo haríamos por nada en el mundo. Sin embargo debemos saber que hacer o donde estará para poder evitar esta catástrofe. La cuestión es que habían pasado tantas cosas que nuestra única forma de soltarlo era pelearnos entre nosotros.

Somos una famila de mierda.

──Hey, ¿estas bien? ─preguntó al sentarse a mi lado─: se que lo de pogo y todo eso pudo ser un tanto... Devastador.

──Luther.

Sonreí levemente en cuanto sentí sus brazos rodearme. Lo había extrañado tanto. Mi mejor amigo y mi hermano. No entiendo porque habíamos sido tan necios. No, no estábamos del todo bien, ni siquiera habíamos cruzado palabra hasta este momento. Pero... Deseaba tanto un abrazo de mi mejor amigo y gran parte de esto es mi culpa, ya que me alejé, permitiendo esto. Ambos la tenemos, en realidad.

──Si, estoy bien. ¿Como esta Allison?

──Ella no puede hablar y esta preocupada por Vanya. También por Claire... hace un momento hablé con ella.

──Pobre Allison. Mmm, que tal estuvo hablar con ella.

Lo pensó un momento y trató de decirlo lo más tranquilo posible. Aunque la realidad es que le afectaba.

──Bien. Estuvo bien.

De un momento a otro unos disparos nos interrumpieron. Luther nos tiró al piso por inercia. Yo solo pensé una cosa.

Mi bebé.

Mire hacia la esquina donde estaba Jimmy y el se había escondido en una columna. Sin importar aquello las balas iban para todos lados. Todos comenzaron a tirar cosas hacía los tipos, derribando a algunos, pero mucho no sirvió. Nuestra unica opcion fue correr. Jimmy corrió lo más rápido que pudo hacía la pista de bolos y se metió por el orifio donde caían estos.

Todos entramos por ahí y salimos por detrás del edificio. Cogimos el auto de papá y nos marchamos hacía el lugar más lejano. O donde pudiéramos ir.

Tras unos minutos de alejarnos tome a mi bebé y pude calmarlo entre mis brazos. La verdad es que un bebé dificultaba las cosas.

──No quiero ser molesto, pero ¿quienes eran esos tipos?

Luther quién iba en el asiento del copiloto se volteó hacía Jimmy con total seriedad.

──Seguramente eran enviados por la Comisión. Para eliminarnos.

A broken promise || Five Hargreeves #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora