Yo crié a un hombre no un niño...

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En la mansión Kocho estaba sin una luz, al ser tan grande, una mansión victoriana, era tenebroso sin luz y más de noche, pero esto tenía una razón, el padre de los hermanos Kocho cumplía años, quería ver a sus hijos, todos eran sus hijos y sus nietos, los amigos de sus hijos eran como sus hijos, quería verlos a todos.

Shiro- William, ¿sabes por qué todas las luces estan apagadas? ¿William?  — Este volteo a ver a su chofer o mejor dicho: Mejor amigo, este estaba callado, estático y nervioso. — ¿qué están tramando?

William- Shiro, creo que mejor debes pasar y no preguntar tanto, anda, yo voy a estacionar. — Dijo a su amigo, se tenían cariño, eran como hermanos, aunque este fuera su jefe, la confianza de ambos era infinita, nada de señor, don, jefe, patrón, nada de eso.

Shiro- Algo traman, ustedes están raros. — Este camino hacia la gran puerta y la abrió con cuidado y encendió la luz a lo que lo recibieron con sonrisas, confeti, un feliz cumpleaños y toda su familia.

Nana- Feliz cumpleaños querido. — Dijo esta abrazando a su esposo para darle un cálido beso.

Todos sus hijos fueron a abrazarlo junto a sus nietos y así comenzó su fiesta sorpresa.

William- Ya traje el pastel de vainilla. — Dijo entrando a la mansión con el pastel en mano a lo que Shinobu agarro el pastel y lo puso en la mesa de bocadillos junto a los demás pasteles.

Hiroaki- Abuelo, abuelo, mira, ¡estoy hablando con mi papá!  . — Dijo sentándose junto a su abuelo y con el teléfono de su madre en el cual se podía ver a un par de hermanos.

Shiro- .... Los Tomioka, hola niños, tantos años sin verlos, y Tsutako,¿te encuentras bien? — Dijo saludando a los hermanos y preocupado por la chica que el no veía hacer años, desde que murieron sus padres.

Tsutako- Hola señor Shiro, un gusto verlo de nuevo, y tuve un accidente, pero estoy bien, ¿y usted? Por cierto feliz cumpleaños. — Dijo con una sonrisa a aquel hombre que apreciaba tanto, por algo siempre quiso a Shinobu, ella casi que fue criada por los Kocho, pero después de la muerte de sus padres, ellos se fueron a otro sitió y nunca los volvió a ver.

Giichi- Un gusto señor Kocho, ojalá pudiera saludarlo y conocerlo personalmente, pero por la situación con mi hermana no pude acompañar a Shinobu y Hiroaki para su cumpleaños. — Este no recordaba para nada al señor Shiro Kocho, pero le sorprendió ver que este lo conocía.

Shiro- Tsutako, hija, ojalá te recuperes pronto, se que te mejoraras, siempre has sido una niña fuerte y Giichi, estas muy grande y no te preocupes, en otra ocasión podré verlos en persona a ambos. — Dijo con una sonrisa.

Tsutako- Gracias señor Shiro, le deseo una excelente salud. — Dijo con una sonrisa cálida y de gratitud.

Giichi- Yo deseo que ese día llegue y poder conocerlo en persona.

Shiro- Al final eres ya de la familia, eres el padre de Hiroaki y el bebé que viene en camino, aunque eres demasiado joven, pero tienen mi apoyo tú y Shinobu. — Dijo recordando las dos palabras de su hija: "estoy embarazada", esa palabra nunca la olvido y su esposa menos, nadie lo hizo pero Tsutako no estaba enterada.

Hirai que pasaba por ahí, vio a Tsutako en la pantalla y quedó paralizado.

Tsutako- Giichi, vamos a hablar tu y yo, oh, hola Hirai. — Esta saludo a su amigo con una sonrisa que deslumbró al chico.

Shiro- Hirai, hijo, ¿se conocen?

Hirai- Soy su cuñado después de todo, la conocí en una salida junto a todo el grupo y desde ahi hablamos.

Inmaduro☆| Giyushino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora