Desde mi sombra

Capítulo 23 - Amor compartido - Parte 2

Royal Woods Michigan - Residencia Loud - 2:00 p.m.

Podemos ver a nuestro protagonista, el cual se encontraba en la cocina. Preparándose un emparedado, para almorzar. Hasta que de pronto, este comenzó a escuchar unos cuantos ruidos, en la sala. Y al asomarse un poco, observa a las hermanas gemelas, peleando por el control de la televisión.

Lana: Lola, ya te dije que es mi turno. Quiero ver a los camiones monstruo en acción. Pelearán en el lodo, tu ya viste tu basura de princesitas - dice la rubia bastante molestia, mientras peleaba por el control.

Lola: No es verdad. Además, hoy habrá un maratón de belleza y maquillaje y no me lo pienso perder. Así que dame el control, o te haré sufrir como nunca - dice la rubia bastante enojada, mientras peleaba por el control.

Cyfnos - Mjm, antes yo peleaba a muerte, por cualquier cosa. Con cualquier dragón. Aunque eso sí, no nos la pasamos gritando tanto, solo rugíamos y peleábamos de una forma salvaje. - dice el dragón en los pensamientos del peliblanco, el cual se acerca algo molesto a dónde estaban sus hermanas.

Lincoln: Muy bien, suficiente. Basta ya - les quita el control. - Ustedes 2 ya son muy maduras, para pelearse por cosas estúpidas. Ya tienen 13 años más 2. Dejen de actuar como niñas pequeñas por favor - dice el peliblanco con seriedad, mientras miraba a ambas chicas. Las cuales observan la marca, en la mano del peliblanco.

Lola: Desde cuánto tienes ese tatuaje. ¡Mamá, Lincoln se tatuó el brazo y va a robar un banco!. - dice la rubia bastante molesta, pero nadie viene. - ¡Mamaaaaaá, en dónde estás!.

Lana: Mamá está trabajando, tonta. Y tú Lincoln, devuélvenos el control, quiero ver mi programa de camiones monstruo - dice la rubia en un tono serio, mientras alzaba sus manos. A lo que Lincoln solo suspira y aprieta sus puños con fuerza.

Lincoln: Hmm... escuchen. En primer lugar, esto no les incumbe a ambas entendido - señala su brazo. - En segundo, no soporto sus peleas y sus gritos sin sentido. Y en tercero... ninguna verá nada. Así que váyanse de aquí o de lo contrario, me voy a enojar peor - dice el peliblanco mientras mostraba un brillo rojo en sus ojos, haciendo que ambas hermanas salgan corriendo bastante asustadas. Al mismo tiempo que Lincoln, entraba a la cocina.

Cyfnos: Nada mal, me gusta. Sobre todo, la parte de los ojos, estuvo genial. Se ve que sabes aprovechar tu tamaño y poder, para poner de rodillas a los insectos. Sin duda tienes buenas cualidades Lincoln - dice el dragón con una sonrisa, mientras veía como Lincoln terminaba su emparedado. - Verás la televisión verdad.

Lincoln - Por supuesto que sí. Solo quiero ver el noticiero y luego me iré a hacer mi tarea. Tengo varios pendientes atrasados y necesito entregarlos mañana - dice el peliblanco en sus pensamientos mientras caminaba hacia la sala, para luego sentarse en el sofá. - Ahora, si me disculpas tengo que comer.

Cyfnos: Como quieras amigo. Pero te diré algo, esas pastillas que llevas en el bolsillo, son algo adictivas. Así que no las consumas de más. No quiero tener de portador, a un sujeto que es un adicto. - dice el dragón en un tono serio, al mismo tiempo que la marca del peliblanco, deja de brillar. Por lo que esté no le presta mucha atención, y cambia el canal.

Un rato después. En la habitación de Luna, esta se encontraba sentada en su cama, mientras miraba su celular, hasta que de pronto, le entra una llamada. La cual era de Robert, por lo que está se levanta de su cama, y contesta.

Luna: Robert... ¿En serio eres tú?. ¿Cómo conseguiste mi número, no recuerdo habértelo dado?. - dice la castaña en un tono serio, mientras miraba hacia su ventana. Observando el cielo soleado y los pájaros cantar.