Capítulo 7: Sí, fue una mala idea.

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Maratón (4/5)

(Os recuerdo que los separadores usados no son míos, son sacados de Pinterest. Al menos por ahora usaré esos, hasta que pueda crear unos propios)

Podría decirse que la cosa no terminó bien, lo cual podría decirse que incluso peor de lo esperado.

Después de todo, no le había enseñado el destino que todo podría salir mal?
Y por supuesto, quién tenía la culpa?

Él estúpido de su novio, no podía mantener la boca cerrada?

Gritarle a un dios, que por supuesto, son todos unos dramáticos que adoran castigar mortales (Anoten ese dato) Es decir, se aburren tanto que no saben hacer otra cosa que joder a los mortales.

Quiero decir, obviamente el chico no fue un santo, pero lo que sucedió después...
Me estoy adelantando, para que os cuento todo esto si no siquiera saben que sucedió? Que narrador tan estúpido soy.

Voy por donde nos quedamos, está bien? Ok, nuestra protagonista se encontraba viendo a su familia ya que tendrá que ser la sirvienta de la Shogun. Seguramente su amante (Obviamente contra su voluntad) y quizás muera en el proceso, ok?
Hasta allí llegamos todos, verdad?

Me alegra saber que estamos en la misma onda, queridos lectores.
Continuaré con la explicación.

Nuestro precioso Lyney, le dijo que era hora de irse, pero la pareja de la rayis no estaba contenta de que todo termine sin que nada dramático pase.
El dramas gente, el dramas. Quién no puede vivir sin uno?
Consejo, tengan cuidado con pelear con extraños, puede que sea un dios y no lo sepan.

Lyney, que había estado supuestamente intentando evitar escándalos, se contradice a si mismo revelando su verdadera identidad.
Y como todos sabemos, incluso la rayis sabe (Está es información de conocimiento público) La cosa se va a poner muy fea.

Dicho esto, como narrador espero que mi recordatorio haya sido de vuestro agrado.
Sigamos con la historia, como debe de ser.

- Qué dijiste, pequeño mortal? - Preguntó Lyney, mirando al chico completamente asustado

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- Qué dijiste, pequeño mortal? - Preguntó Lyney, mirando al chico completamente asustado.
- Señor Lyney, no te habíamos reconocido! - Se disculpó la madre de la rayis por la pareja - Si lo hubiéramos hecho, hubiéramos tenido mucho más respeto por usted.
- Igualmente, me he sentido bastante insultado. - Se quejó Lyney - Y como dios, mi deber es castigar a los humanos que nos faltan el respeto.
- Lyney, la Shogun nos espe-

Lyney interrumpió a (T/N), que solo intentaba meter prisa al dios.

- Ya sé que nos espera, pero si le digo que tuve que ejecutar a un humano que me faltó el respeto...Creo que lo entenderá.
- Que vas a hacer qué?!

En ese momento (T/N) recordó las propias advertencias que su cerebro le daba.
Cuando se preguntaba a si misma..."Es una mala idea?" E ignoraba esos pensamientos. Otra señal de quel q debería fijarse más en sus instintos, pero que ella ignoró en su momento.

- Mortales! He aquí una muerta de lo que no deben hacer nunca - Exclamó Lyney mientras miraba a la multitud y señalaba a la pareja de la rayis. - Estos dos mortales se atrevieron a molestar a un dios, y eso no está permitido.
- Dos? - Preguntó (T/N) confusa.
- El mortal que me faltó el respeto y la mujer que lo justificó, por supuesto.

Espera espera, con esa mujer se refiere a...Su madre?

- Ella no justificó nada!
- Puede que tú mente mortal no lo entienda, pero creeme, si fueras un dios.... - explicó Lyney - Lo entenderías tanto como yo.

(T/N) quería insultarlo, pero sabía perfectamente que eso la condenaría a ser ejecutada también.

Por ello no le quedó más remedio que callarse la boca y llorar en silencio.
Sin poder hacer nada para poder salvar a su madre.

La ejecución fue allí mismo, y (T/N) se aseguró de cerrar los ojos y tratar de taparse los oídos. A veces...sin querer, no era capaz de taparlos bien por los nervios...Y pudo ser capaz de escuchar los gritos de dolor de aquellos morrales siendo ejecutados horriblemente.

Eso le hacía pensar...En algún momento seré yo la siguiente?
Irá a vivir por el resto de su vida a un lugar lleno de dioses, con esos aires de grandeza y con ese fanatismo a ejecutar mortales.

Y sobre todo...

En acostarse con chicas como ella.

Gentee, este capítulo tiene algo especial

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Gentee, este capítulo tiene algo especial. Y es que no está ni el consejo del día ni las clases de mitología.

Espero que puedan sobrevivir sin ello, pero también quería disculparme por otra cosa.

Estuve unos días inactiva en esta historia, no recuerdo cuántos, pero más de los que debería.

Sé que en otras historias ponen los capítulos cada más tiempo (que tardan mucho), pero como diría nuestra madre cuando le decimos que toda la clase suspendió...Esas no son mis historias.
(Mis hijos) Cada quien tiene sus planificaciones de cuando pública o no, y por ello yo en esas cosas prefiero no meterme. Sobre todo porque muchos de ellos quizás simplemente no tengan tiempo o estén en un periodo de falta de imaginación, no lo sé en verdad.

La cosa es, que espero que no me ejecuten a mi también por tardar.
(Y creo que no puse el capítulo del viernes en mi historia de one-shots. No me acuerdo) El caso es, no me tengan mucha fé.

Tomen agua, rezar a Rex Lapis (Nuestro viejo sabroso de confianza)
Y tengan cuidado con pelirrojos que vengan de rusia, o marionetas con problemas maternos.

Y sobre todo con magos acusados de homosexualidad.

Me despido gente (hasta que reviva otra vez)

El destino (T/N)XGenshin BoysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora