viviendo un infierno

capítulo 11 ¿la salida del infierno?

Por Fin Llegó El Día En Que Lincoln salió de la incomunicación sintiéndo se aliviado y triste al mimos tiempo
Triste por el pensamiento de que no vería más a Amanda, y feliz por salir de la celda. Al paso de las semanas resultó evidente que se había operado en el un cambio,aún que cada cual lo interpretaba a su manera. Para los chicos, habían adquirido cierta categoría; lo respetaban por su valentía de pelear con Johnny algo que nadie se hubiera atrevido.

No volvió a ser molestado,ni siquiera por Gabriel o Jack. Sobre todo llamaba la atención el hecho de que aceptasen su mayor aplicación en las clases de María. Si bien Lincoln comprendía la necesidad de ser aceptado por sus iguales no le restaba atención.

Se fijo una fecha para la entrevista personal de Lincoln con el cuadro de tutores, quienes debían determinar la conveniencia y el grado de preparación psicológica para ser autorizado a pasar unos días de prueba bajo la tutela de sus padres. La «reunion» se programo para un viernes por la tarde, inmediatamente después de la comida. Se le ordenó a Lincoln que se presentase a las dos y  puntos. Lincoln se encaminó directamente a su habitacion después de comer se cepillo el cabello.

No había nadie en los dormitorios, a excepción de Javier, que se había encontrado mal aquel día. Lincoln sintió alivio; no tenía ganas de charlar con nadie , por suerte Javier dormía. Con sus largos cabellos negros desparramados alrededor de los hombros. Lincoln se peino el pelo una última vez y consultó el despertador que estaba sobre la mesita. Faltaban 5 minutos pero, Lincoln deseando evitar todo retraso,salió de la habitación andando de puntillas para no despertar a Javier y se encaminó poco a poco hacia la sala de reunión que estaba al final de la galería.

Delante de la puerta lo esperaba Amanda la cual al ver a Lincoln le sonrió luego abrió la puerta y le dijo:

-¡Adelante!- Lincoln pasó a lando de Amanda y en ese momento logro escuchar.

-Suerte Lincoln - dijo Amanda casi susurrado.

Apenas entro vio una mesa larga y aquella mesa presidía:

La directora adjunta Ginny Potter. Asu lado estaba María Santiago y luego Sara asui, la celadora de los dormitorios; al otro extremo de la mesa vio a David Yaoyorozu, el guardia que avía detenido a Johnny de destrozarle la cabeza, y Asu lando se acomodaba Amanda la jefa de las celdas de incomunicación. Frente a María y Sara asui había una silla libre. Ginny exhibió una sonrisa postiza y su expresión de «vamos al grano».indicandole la silla vacía

-Sientate, Lincoln -dijo-. Vamos a empezar en seguida.

Lincoln vaciló un instante y luego ocupo la silla inclinándose hacia delante y apoyo los brazo en su regazo y adopto una postura rígida. Ojeó disimuladamente los rostros de quienes lo rodeaban,con sus miradas fijas en el. Amanda está sería, pero Lincoln noto en seguida una corriente de simpatía. Ginny y David no exteriorizan emoción alguna; en cambio María miraba a Lincoln con evidente agradó a diferencia de la mirada de Sara la cual demostraba una ligera hostilidad.

-Bien-dijo Ginny jovialmente--. ¡Manos a la obra!

Luego,volteado a ver a Sara, dijo:

-Tu eres la celadora,Sara. ¿Quieres ser la primera en darnos tu opinión?

SARA se tocó la cabeza,lo pensó un momento y luego dijo, condescendiente:

-bien. El niño hace su trabajo,me parece,y ha respetando las normas

Ginny se Voltio al otro lado de la mesa:

- ¿David?

El aludido asistió con la cabeza.

- Suele participar en los juegos. En realidad no tiene afán de competir, pero eso le pasa a la mayoría. Al fin y al cabo,hace poco que salió de incomunicación. Al parecer David no era un guardia normal era el hombre de confianza de Ginny el trabajo de David era vigirla que todo lo que informará los demás fuera cierto.