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Al día siguiente, Bill seguía abrazado a mí, pero Tom no estaba en la cama, me levanté y comencé a buscar a Tom, estaba abajo, viendo la tele. Me acerqué a él y me senté a su lado.

— ¿Cómo amaneciste?— le pregunté, mirándolo.

— Bien... tu sabes...— me dijo encogiéndose de hombros.

— ¿Estás bien con Bill, mi amor...?

— No... le hice sentir mal... y no merece eso... ayer estaba enfadado y lo pagué con él...— me explicó.

— Seguro que Bill te perdona, mi amor... Discúlpate cuando baje... te perdonará...— le dije, conocía a Bill, incluso cuando me lo dijo anoche sabía que lo perdonaría. Tom asintió.— ¿Desayunaste?— Negó.— Bueno... voy a preparar el desayuno.— me fuí y comencé a prepararlo, sin prisa.

Minutos después, sentí como alguien me abrazaba por detrás, haciendo que me asustará feísimo.

— ¡Bill! ¡Me asustaste!— exclamé al verlo aún abrazo a mí. Él sonrió.

— Lo siento...— dijo sin dejar de sonreír.

— No te preocupes, pero me matarás algún día...— añadí y él comenzó a reírse. Yo le acaricié el pelo y se fue.

— Buenos días, Bill...— le dijo Tom, tímidamente...

— Buenos días...— le respondió Bill.

— Bill... siento lo de ayer.... Es que... estaba enfadado... y... lo siento.— acabó por decir.

— Bueno... yo... yo no estaba enfadado contigo, Tom... Pensé que tú lo estabas conmigo...

— Bueno, ayer sí... pero no contigo... estaba estresado ayer, Bill, discúlpame... lo que te dije ayer... no es cierto... ¿vale? Simplemente estaba enfadado...

— Normalmente cuando alguien se enfada dice todo lo que realmente piensa, pero no te preocupes, no estoy enfadado contigo, disculpas aceptadas.— dijo para darle un poco de humor al ambiente.

— Bill... lo siento...— dijo Tom.

— ¡No estoy enfadado contigo, Tom! No te sigas preocupando... está todo bien...— le aseguró Bill.

Ni Tom ni Bill dijeron nada más, por lo que decidí ir con ellos.

— ¿Quién tiene hambre?— pregunté tratando de fingir que no oí nada.

— ¡Yo!— exclamó Bill.

— Yo también.— Dijo Tom.

— ¡Vamos!— les dije felizmente.

Ambos me siguieron y desayunamos tranquilamente, cuando acabamos, mis gemelos fueron a la habitación para seguir trabajando en no sé qué de "schrei" si no me equivoco, realmente se tomaban enserio fuera lo que fuera que hacían...

Varios años después...

Bill.

Tom.

Georg.

Gustav.

Un escenario.

Tokio Hotel.

Yo los observaba desde abajo del escenario...

Ellos pudieron lograr su sueño...

Muchísima gente estaba ahí parada, viéndolos, gritando sus canciones... yo solo podía mirarlos, orgullosa... después de tantísima mierda... ahí estaban... más felices que nunca... miles de personas lloraban al tenerlos tan cerca... ellos ya tenían 16 años... y yo los vi por primera vez con 9...

Ellos al fin lograron ser felices... ellos ya no vivían conmigo... estaban los cuatro en un estudio, siempre... a veces venían a verme... o yo a veces iba a verles... simplemente ellos eran felices... todo lo que algún día soñé... se cumplió...

Bill cantaba más feliz que nunca... aun que la letra de la canción no fuera tan alegre... Tom tocaba la guitarra eléctrica... no sabría decir con que sentimiento... pero el sonido de su guitarra llegaba hasta adentro...

Georg, aunque no lo pude conocer muy bien... también estaba feliz de verlo ahí... él hizo que la escuela para mis gemelos no fuera tan mala... él tocaba el bajo eléctrico... y el sonido que hacía la guitarra de Tom junto al bajo de Georg... era precioso...

Gustav, prácticamente lo mismo que Georg... pero el tocaba la batería, demasiado bien para mí gusto.

El concierto finalizó y corrí detrás del escenario... esperé a que todos ellos salieran... Bill salió primero, en cuanto me vio, sonrió abiertamente y se acercó a mí para abrazarme...

— No esperaba verte aquí, mami...— me dijo todo orgulloso.

— ¿crees que me perdería esto? ¡Vamos, Bill!

Bill río un poco y pude notar como el maquillaje que llevaba en los ojos se le corría hacia abajo...

— ¡No...! ¡Mi amor no puedes llorar...!— le dije mientras le limpiaba las lágrimas con mis pulgares...— ¡Tienes que estar impecable para las miles de fotos que te pedirán!

Bill sonrió y volvió a abrazarme, se fue y vi como Tom nos observaba.

— ¿Qué haces aquí, mami...?— preguntó Tom, avergonzado.

— ¡Tendría que estar bajo tierra para perderme esto, Tom Kaulitz!

Él río y se acercó para abrazarme...

— Estoy muy orgullosa de ustedes...— le dije con el corazón en la mano.

— Todo esto es gracias a tí... Uhm... Tú... sacaste a Bill de aquella casa... y... me recogiste de la calle...— me explicó.

— Está bien... ¡pero yo no os monté en ese escenario! ¡Reconoce tus logros, Tommy!— él río y me abrazó más fuerte.— Anda, ve a abrazar a tus fans, seguro que hay alguna la cual será la primera y última vez que te vea...

— ¿abrazar...?— dijo sonriendo pícaramente.

— Tom, guárdate esa información, gracias....

Él río y se fue tras Bill.

Luego salieron Gustav y Georg, juntos, sonreí ante eso.

— ¡Chicos...!— les dije mientras me acercaba a abrazarlos— ¡No saben lo bien que lo hicieron!— ellos sonrieron y se fueron...

Yo volví a casa... viendo dónde antes estaban todos los días... y ahora... estaban aquí por pura suerte... me senté en él sofá y comencé a ver mi móvil...

Autora

TENGO MUCHÍSIMAS COSAS QUE CONTARLES!!! la primera: LO SIENTO 😭 Chicos estuve liada con el instituto, empecé hace poco, pero quería empezar bien, discúlpeme, espero que lo entiendan. La segunda: A este fic le falta MUY poquito para acabarlo... (💔💔💔💔💔💔💔💔) PEROOOOOOO tengo pensado hacer uno nuevo... Sería de Bill :) díganme si les gustaría que lo empezara... en los ratos libre que tuve, no escribí este cap pensando ideas para el nuevo fic, realmente me haría ilusión escribirlo, pero ahí les dejo elegir. La tercera: MUCHÍSIMAS GRACIAS POR LAS 100K DE LECTURAS 😭💕🫶 ESTOY MUY FELIZ!!! MUCHÍSIMAS GRACIAS GENTE!

(Mucho texto, lo siento, esque literalmente desaparecí)

La niñera | Bill y Tom Kaulitz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora