Cicatrices dolorosas

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Kat
Hace algunos años ..

Aquellos pasos hacían que la madera del piso chillara, se escuchaban cerca, muy cerca.

Toc toc
Me cubrí con mis cobijas, abrazando mi pequeño cuerpo.

—Pequeña, estoy aquí—susurró una voz masculina, esa voz que tanto me aterraba. Mientras sentía como la sábana que cubría mi cuerpo, de deslizaba suavemente y caía a un lado de la cama.

Las lágrimas inundaron mis ojos.

—Shhh, será divertido, vamos a jugar—susurró mientras se colocaba en la cama a horcajadas sobre mi.

Estaba inmóvil.

—No quiero..no me gusta—sollocé.

Él sacó una foto de su bolsillo, era una foto que mi mente bloqueaba, estaba borrosa. Tampoco podía ver su rostro.

—Él, él tiene la culpa—posó una de sus manos en mi mejilla, acariciándola, lo que hizo que mi cuerpo se congelara del miedo. Sentía asco.

—¿Papá?

—Hija—respondió.

Una fuerte punzada en mi pecho me hizo volver a la realidad.

Caí de vuelta a la realidad. Mi madre estaba frente a mi, sentada en la mesa, completamente dormida.
Me levanté, mis mejillas estaban mojadas, estaba llorando.

Ese recuerdo..no lo entendía.

Mi padre..él..

¿Él había..?

Sacudí mi cabeza y me aseguré de que mi madre estuviese dormida, para luego subirla a su habitación y acostarla en la cama.

Fui a mi habitación y cerré la puerta, necesitaba recordar esa foto, la de esos recuerdos que tanto me atormentaban.
Me senté en mi cama y hundí mi cabeza entre mis piernas, y empecé a llorar.
Sentía como si mi cabeza estuviese jugando conmigo.
Empezaba a entender esos sueños y recuerdos.
Era como si yo hubiese sido abusada.

No, Kat, eso no pasó, estas volviéndote loca, no hay nadie que pudiera hacerte eso jamás.

"Él es malo, muy malo, Kat, recuérdalo"
Esa voz masculina interrumpió de nuevo, esa maldita voz, ya me tenía harta.
Estaba frustrada y sentí como si tuviese una barrera en el pecho, algo presionándome.
En esa posición, lloré, lloré de frustración, de confusión.

—¿¡Qué me pasó!?—me decía a mi misma. Mis labios temblaban y sollozaba en silencio— ¿Por qué no puedo recordar bien?

Me levanté de la cama y sequé mis lágrimas.
Caminé hacia el espejo de cuerpo completo que había en una esquina, junto al bote de ropa sucia.

Me quité mi pantalón, este cayó al suelo. Mirándome frente al espejo vi aquella cicatriz, una cicatriz que tenía en el muslo.
No era la única que tenía, pero si que era la única que no sabía cómo había llegado a estar ahí.
La toqué con mi dedo, deslizando con lentitud, estaba totalmente curada y parecía haber sido de hace años.

"Fue un accidente, cariño, ¿recuerdas que me contaste que fue cuando jugaste la otra vez?"
Decía mi madre.

Cerré mis ojos y seguí acariciandola, trazando lineas sobre esta.

—No me importa si tengo que perder la cabeza, pero necesito recordar—me susurré.

Poco a poco los recuerdos empezaron a hacerse claros en mi cabeza.

A Través Del Espejo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora