~La Historia del Halcón y el Pez Koi~

~Sentimientos Encontrados~

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En el camino Fuyumi dejó la bandeja en alguna mesa para que la encontrara algún sirviente después y como sus padres no estaban, podía deambular por la casa sin que la molestaran, sobre todo con un extraño. "Hawks... según sé la palabra significa halcón, ¿le gustarán las aves?" Se decía de camino al baño; pero prefirió dejar el interrogatorio para después.

Pero tras unos segundos de caminata por los pasillos de la gran residencia Todoroki, Hawks comenzó a ponerse nervioso, aunque ya tenía la información de que la familia de la dama no estaba, el deambular como quien no quiere la cosa no era seguro, después de todo cualquier sirviente podía verlo y dar la alarma a las autoridades y +el ya podía imaginar la casa llena de guardias en medio instante. 

- Mi señora, ¿a dónde vamos? - Preguntó con cautela.

- Ya le he dicho, al baño. - 

- ¿Pero por qué? - Quiso saber si ella dijo que no era por su olor.

- Porque quiero ver una cosa. -

- ¿Quiere verme en el baño? - Preguntó alterándose y de inmediato las mejillas se le tintaron y ambos se detuvieron.

- ¡Oh Dios mío no! - Fuyumi se tapó la cara con las manos pues la tenía más roja que él. - ¿Cómo puede pensar eso de mi? -

- Usted dijo. -

- No me refería a eso... a-además la gente no se mira en los baños. - Por cultura y modestia más que nada, pero nunca falta el morbo.

- Nunca ha ido a un baño público, ¿Verdad? -

- Por supuesto que no, yo no tengo la necesidad como los... am... bueno... -

- Si dígalo, no me ofende. - Dijo el rubio notoriamente divertido con la vergüenza de la dama.

- Las... personas de bajos recursos. - Dijo al fin. Y es que en ese entonces no todas las casas tenían baño completo, solo las más lujosas y por ende muchos iban a los baños públicos, ni se diga las personas que como Hawks, no tenía siquiera una casa.

- Evidentemente. - Dijo mirando alrededor. - Pero aún no se explica. - Ella fue bajando sus manos y la voz también mientras se sinceraba.

- Bueno yo... s-solo quería verlo presentable. - Hawks enarcó las cejas con sorpresa y luego bajo el rostro, por supuesto que Fuyumi Todoroki estaba acostumbrada a señores ataviados con exquisitas prendas y bien arreglados, y él se vio el contorno negro alrededor de las uñas así como el polvo en la hakama. "Ella quiere verme..." Pensó mientras el corazón le saltaba en el pecho. 

- Si ese es su deseo, no me puedo negar. - Respondió y ella le miró sorprendida, aún tenía un rubor en las mejillas y él del mismo modo.

Dos pasillos mas y llegaron a la zona del baño, el mismo Hawks lo notó porque la temperatura de pronto fue más cálida, estaban hasta el fondo de la residencia y de camino pasaron por varias salas que al halcón lo pusieron nervioso; por sus acabados, eran las salas de juntas de guerra en donde Enji se reunía con sus tropas... para matar a gente como él. Sólo tragó saliva y siguió su camino, pero ahora la dama volvió a hablarle. 

- Aquí es, por favor pase. -

- ¿Está... está segura de esto? - Dijo antes de entrar.

- Si, nadie vendrá. -

- Es que tampoco quiero ser una molestia. -

- No lo es; ahora volveré con ropas limpias. -

- ¿Ropa? -