𝐌𝐞𝐥𝐚𝐧𝐢𝐚 y el Prisionero de Azkaban

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 41

Volvió a abrirse la puerta. Era Dumbledore. 

-Profesor Dumbledore, Sirius Black...

-¡Por Dios santo! ¿Es esto una enfermería o qué? Señor director; he de insistir en que...

-Te pido mil perdones, Poppy, pero necesito cambiar unas palabras con el señor Potter y la señorita Addams. He estado hablando con Sirius Black.

-Supongo que le ha contado el mismo cuento de hadas que metió en la cabeza de Potter -espetó Snape-. ¿Algo sobre una rata y sobre que Pettigrew está vivo?

-Eso es efectivamente lo que dice Black -dijo Dumbledore.

-¿Y acaso mi testimonio no cuenta para nada? -gruñó Snape-. Peter Pettigrew no estaba en la Casa de los Gritos ni vi señal alguna de él por allí.

-¡Eso es porque usted estaba inconsciente, profesor! -dijo Melania con seriedad-. No llegó con tiempo para oír...

-¡Señorita Addams! ¡CIERRE LA BOCA!

-¿Me alzo la voz?- pregunto Melania al mismo tiempo que se escucha un trueno.

-¿Eso fue un trueno?- pregunto Fudge viendo confundido la ventana-, no esta nublado- nervioso.

-Me gustaría hablar con Harry y con Melania a solas -dijo Dumbledore bruscamente-. Cornelius, Severus, Poppy Se lo ruego, déjennos.

La señora Pomfrey frunció la boca, se fue con paso firme a su despacho, que estaba al final de la sala, y dio un portazo al cerrar.

-Los dementores deberían de haber llegado ya. Iré a recibirlos. Dumbledore, nos veremos arriba.

Fue hacia la puerta y la mantuvo abierta para que pasara Snape. Pero Snape no se movió.

-No creerá una palabra de lo que dice Black, ¿Verdad? -susurró con los ojos fijos en Dumbledore.

-Quiero hablar a solas con Harry y con Melania -repitió Dumbledore. Snape avanzó un paso hacia Dumbledore.

-Sirius Black demostró ser capaz de matar cuando tenía dieciséis años -dijo Snape en voz baja-. No lo habrá olvidado. No habrá olvidado que intentó matarme.

-¿Por que no lo logro?- susurro Melania molesta. Por suerte nadie la escucho.

-Mi memoria sigue siendo tan buena como siempre, Severus -respondió Dumbledore con tranquilidad-. Pero será mejor que se preocupe por el señor Malfoy y al señor Macnair ¿No cree?

Snape giró sobre los talones y salió con paso militar por la puerta que Fudge mantenía abierta. La puerta se cerró tras ellos y Dumbledore se volvió hacia Harry y Melania. 

Los dos empezaron a hablar al mismo tiempo.

-Señor profesor; Black dice la verdad: nosotros vimos a Pettigrew

-Escapó cuando el profesor Lupin se convirtió en hombre lobo.

-Es una rata.

-La pata delantera de Pettigrew... quiero decir; el dedo: él mismo se lo cortó.

-Pettigrew atacó a Ron y a Hermione. No fue Sirius.

Pero Dumbledore levantó una mano para detener la avalancha de explicaciones.

-Ahora tienen que escuchar y les ruego que no me interrumpan, porque tenemos muy poco tiempo -dijo con tranquilidad-. Black no tiene ninguna prueba de lo que dice, salvo vuestra palabra. Y la palabra de dos brujos de 13 años no convencerá a nadie. Una calle llena de testigos juró haber visto a Sirius matando a Pettigrew. Yo mismo di testimonio al Ministerio de que Sirius era el guardián secreto de los Potter.