12. Celos

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˗ˏˋ CHAPTER TWELVE ˎˊ˗
(JEALOUSY)

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A la mañana siguiente, Raquel fue a desayunar con Hermione ya que Harry y Ron habían decidido saltarselo por qué tenían que acabar los deberes de adivinaciones que se habían dejado sin hacer

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A la mañana siguiente, Raquel fue a desayunar con Hermione ya que Harry y Ron habían decidido saltarselo por qué tenían que acabar los deberes de adivinaciones que se habían dejado sin hacer.

La castaña le estaba contando a Raquel sobre los gorritos que había tejido la noche anterior para los elfos domésticos que venían a limpiar la sala común, pretendía liberarlos a todos.

-Bueno, creo que cada vez los hago mejor, se me va dando mejor tejer -acabó diciendo Hermione. -igualmente, ¿Cómo ha estado el castigo con Umbridge? ¿Qué te hizo hacer?

La pelirroja se pensó si enseñarle la mano a su amiga, la llevaba tapada con la túnica, por lo que no se veía.

-Esa vieja arpía, es una persona horrible -dijo Raquel con enfado -Y no me pienso presentar al castigo de hoy.

-Pero si no vas al castigo te van a ampliar los días.

-Ya me da igual Her...

La pelirroja se lo volvió a pensar y acabó enseñandole la mano a su mejor amiga, podía confiar plenamente en ella. La herida estaba completamente cerrada pero tenía la frase muy marcada, se veía perfectamente la cicatriz, cada letra.

-¿Cómo puede hacer eso? ¡No puedes dejar que continúe con esto!

-Se que no, quería decírselo a McGonagall pero no sé cuánto poder tiene sobre Umbridge.

-¡Dumbledore entonces, dile a Dumbledore!

-No -respondió tajantemente Harry que acababa de aparecer junto a la pelirroja, venían a recogerla para irse a Adivinación.

-¡Harry, a ti también te lo ha hecho verdad! ¿Pero por qué no?

-El tiene demasiado en que ocuparse -dijo Harry

Ron les miraba extrañado hasta que vió la mano de su hermana.

-¡Raquel qué! -exclamó el pelirrojo agarrando su mano.

-¡Ah Ron, no me aprietes, duele! -se quejó la chica. -No es cosa mía, claramente, es por el castigo de Umbridge.

-¿Qué? ¡Harry, pensé que habías dicho que sólo te hacía copiar renglones!

-Sabía que no les dirias nada -le dijo Raquel con seriedad a Harry -¿Vas al castigo de hoy?

-Sí.

-¿Pero por qué? Podemos tratar de decírselo a alguien, o simplemente no presentarnos.

-No le voy a dar esa alegría a Umbridge.

Raquel rodó los ojos y se levantó de la mesa para ir a la primera clase.

Raquel y la orden del fénixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora