Capítulo 27 Cumpleaños feliz

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-Y yo que pensaba que tendría un día ligero- menciona para sí misma Daniela al llegar a su casa y encontrarse con las luces apagadas, eran cerca de las once y claramente Poché y Valentina estarían dormidas por lo que se fue directo a su habitación, incluso Ramón no estaba lo que le hizo pensar que se había quedado dormido en la habitación de las ojiverdes.

La castaña se desvistió, dio una ducha refrescante y colocó su pijama favorito. Se acostó en su cama, tomó uno de los libros que tenía comenzados sobre la mesa de noche y comenzó a leer un poco en busca de conciliar el sueño, cuando comenzaba a caer rendida un par de toquidos la hicieron despertar algo sorprendida ya que al abrirse la puerta Ramón entró corriendo hacia ella mientras que Valentina sonreía junto a su madre que cargaba con ella un pastel con velitas encendidas.

-🎵Que los cumpla feliz, que los vuelva a cumplir, que los siga cumpliendo, hasta el año tres mil🎵 –María José y Valentina entonaron, claro la más pequeña en su propio idioma, pero con la misma intensidad.

-Shopla lash velash Nany-menciona Valentina emocionada, a pesar de estar desvelándose la pequeña se encontraba muy fresca.

-Y pide un deseo- acota Poché, ambas ojiverdes habían llegado hasta la cama de la castaña quien continuaba sorprendida con el acto.

-Tengo todo lo que deseo- menciona con seguridad soplando la vela- ¿es tarde para una rebanada de pastel de chocolate?

-No- responde Valentina de inmediato.

-Demasiado tarde- menciona María José.

-Pelo mami, esh el cumple de Nany- la pequeña deseaba poder comer un poco de pastel antes de dormir.

-Ándale mami-Daniela bromea con la ojiverde- déjanos comer un poco de pastel.

-Ustedes son imposibles, si comen pastel no se van a dormir y mañana en la mañana ambas van a ser un par de ogritos mañaneros.

-Por fa- Daniela y Valentina ponen sus caritas más tiernas para lograr que Poché accediera.

-Si mañana tu-señala a Daniela- te levantas con el pie izquierdo, y tu- señala a Valentina- te asustas porque Daniela esta de malas no les vuelvo a cocinar nada con chocolate.

-Trato- Daniela intenta quitarle el pastel a María José, pero esta es más rápida y se aleja de la cama- oye, quiero mi pastel.

-Si te doy el pastel entero vas a comerlo completo- camina hacia la salida de la habitación.

- ¿Tan bueno esta o me sabes algo? –observa detenidamente como María José se marcha dándole la espalda y con esta una hermosa imagen de su trasero.

-Todo lo que yo hago es delicioso Daniela, y, según tu madre, eres una golosa así que mejor ahora vuelvo con una rebanada para que compartan, ya mañana podrán desayunar pastel si así lo desean- dice con la voz alzada para que la escucharan en lo que ella iba a la cocina a servirles la rebanada y tomar un par de cubiertos para ellas.

-Vale-llama la atención de la niña que jugaba con Ramón sobre la cama- ¿ya lo probaste?

-Shi- responde la pequeña.

- ¿Qué tal esta?

-Delichiocho- sonríe la pequeña.

-Gracias por mi sorpresa Valentina, este ya es el mejor cumpleaños de todos- la pequeña se lanza a los brazos de la castaña y la abraza deseándole un feliz cumpleaños de nueva cuenta.

- ¿alguien dijo pastel de chocolate? –María José vuelve con la rebanada sobre un plato y un vaso con leche y tres popotes.

- ¡yo! - el par de chicas que se encontraban abrazadas sobre la cama exclamaron sacando una sonrisa a la ojiverde mayor.

Un Novio para NavidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora