El refugio Salvando vidas o como las chicas lo llamaban de cariño "el refugio de Abi" se creó como forma de sanar el dolor de la pérdida de una gran amiga y con la ilusión de darle una esperanza de vida a quienes corrían con la suerte de alejarse de su abusador, cosa que Abi no tuvo.
Llevaba años ayudando mayormente a mujeres con o sin hijos a salir de las situaciones de abuso bajo las que vivían. Es un refugio temporal lo que implica que quienes llegan cuentan con la asesoría legal, psicológica y laboral para que una vez sus juicios pasen, puedan rehacer sus vidas lejos de las situaciones que propician ambientes de abuso, por lo que la población del refugio cambia periódicamente.
-Su caso es uno muy complejo María José- menciona Kim con la seriedad que le caracteriza una vez Mariana había explicado a grandes rasgos la situación por la que pasó la joven madre- sobre todo por el empleo de su esposo.
-Lo se señorita y entendería si ustedes no me pueden ayudar- menciona María José resignada a tener que huir lejos de la ciudad y empezar incluso una nueva vida en Canadá o México- de hecho, la señorita Mariana ha hecho mucho por mi esta madrugada y el resto del día, en verdad que yo no podría haber hecho nada sin usted y por ello le estoy agradecida.
-Alto ahí María José- interfiere Kim- yo nunca dije que no la ayudaríamos, yo solo mencioné que su caso es complejo, pero de que lograremos refundir a ese hombre en la cárcel, lo haremos, téngalo por seguro- afirma la rubia mujer.
- ¿entonces se puede quedar aquí?- cuestiona Mariana con la esperanza de que hubiera espacio para la joven madre y su pequeña hija.
-Aunque tuviéramos el espacio para recibirlas no creo que sea lo idóneo, estoy segura que, aunque siguieron todos los protocolos de seguridad, ese hombre va a dar con este lugar y lo último que necesito es tener una fila de abusadores prófugos de la justicia o en proceso de ser llevados a la misma a las afueras del refugio atacándonos por el simple hecho de querer ser de ayuda a quienes ellos perjudican.
- ¿entonces? ¿Cuál es el plan a seguir? –cuestiona Mariana preocupada por futuro inmediato de la chica y su hija.
-En estos casos, al ser de un perfil alto, don Germán nos ha recomendado colocar a la víctima en un hogar que se encuentre fuera del radar del abusador, un hogar en donde la víctima se recupere de sus lesiones y pasado el tiempo se pueda mover a otra ubicación en caso de que su juicio aún no se haya llevado acabo y continúe en peligro.
-Oye Kimmy- entra Daniela sin tocar revisando su teléfono, pero al alzar la vista se topa con la oficina llena- oh, lo siento, no sabía que estaban ocupadas.
-Hola Dany- Mariana se acerca a ella saludándola- ven, te voy a presentar a un par de personitas- la coloca frente a María José y Valentina- ellas son mis amigas María José y Valentina, Majo, Vale ella es Daniela Calle, otra de las fundadoras de este lugar y abogada a medio tiempo porque la señora trabaja en el despacho de su padre.
-Mucho gusto- Daniela sonríe a ambas y extiende su mano para saludar a María José y mirándola con firmeza a los ojos, ya que, si algo tiene Daniela, es que ama ver a los ojos de las personas cuando interactúa con ellos ya que, según ella, puede percibir a través de la mirada la esencia de cada uno, y en ese preciso momento, la mirada verdosa de la chica que Mariana le presentó, le transmite miedo, dolor, incertidumbre- María José ¿cierto? –observa como la chica asiente con timidez- en ese caso- se pone en cuclillas para quedar al nivel de Valentina- esta hermosa princesa debe ser Valentina.
-Shi- responde la pequeña- ¿tu elesh amiga de Maly?
-Sí, nos conocemos desde que éramos unas niñas así como tú- le toca la nariz con su dedo índice observando como la pequeña sonríe- ¿quieres salir conmigo a caminar por ahí? tal vez encontremos a Santa y te podamos tomar una fotografía con él, ¿Qué dices?
-Mejor que Mariana la lleve- menciona Kim- así María José, tu y yo podemos hablar sobre algo.
-Sí, yo llevo a Vale en búsqueda de Santa y las vemos en el comedor cuando acaben de hablar- menciona Mariana dándole la mano a Vale quien al sentirse con la familiaridad de haber estado con la abogada toda la mañana sale junto a ella sin temor alguno dejando a las tres mujeres solas.
-Bueno, supongo que me pondrás al tanto con lujo de detalle sobre la situación de la señorita María José- menciona Daniela tomando su pose seria de abogada.
-De hecho no-las palabras de Kim toman por sorpresa a ambas mujeres- a grandes rasgos Mariana conoció a María José en una fiesta, vio signos de abuso en ella, le dio una tarjeta con la esperanza de que ella la contactara cuando estuviera lista para dejar a su esposo, que para nuestra suerte es policía y justo hoy la llamó de madrugada y escapó de su casa.
- ¿ya hicieron las denuncias correspondientes? –cuestiona Daniela- porque su esposo puede denunciarla por sustracción de menores- acota con seriedad.
-Si- contesta María José con temor-la señorita Mariana me ayudó.
-¿Dónde la vamos a ubicar? Al ser su agresor una persona con cierto poder seguramente tiene contactos que le puedan dar información y es necesario mantener el refugio a salvo.
-Ese es el punto por el cual pedí que te quedaras- comenta Kim con un plan en mente- ¿podrían quedarse contigo? Tienes una habitación que no se usa y ellas cabrían perfectamente en ella.
-Kim, sabes bien que yo nunca estoy en casa ¿Qué no se supone que ella debe estar acompañada? –menciona Daniela, la razón por la que las víctimas eran colocadas bajo supervisión era en primer lugar para evitar que regresaran con el abusador y en segundo para ser ayudadas en su recuperación, aunque, a decir verdad, María José estaba en mejores condiciones que la mayoría de las mujeres que rescataban.
-No necesito una niñera, puedo hacer todo por mí misma, el médico dijo que mis costillas no están rotas y que con un poco de reposo me recuperaré rápidamente- responde María José.
-Ya la escuchaste, ella puede sola, además María José es una mujer determinada que no va a correr de nueva cuenta a los brazos de ese monstruo ¿o me equivoco?
-No, nunca más estaremos cerca de él, no dejaré que me vuelva hacer daño o que incluso intente hacerle algo a mi pequeña- responde con firmeza, cosa que no había hecho en todo el rato que llevaban hablando por lo que Daniela, al notar el cambio en la joven madre, confía en que puede resultar lo que sea que Kim esté pensando, ya hablaría con ella el lunes después del fin de semana largo que se avecinaba.
-En ese caso, vayamos por tu pequeña que mi hogar nos espera- sonríe la castaña logrando infundir en la oven madre una sensación de alivio al saber que al menos por el tiempo que estuviera con Daniela estaría a salvo.
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Un Novio para Navidad
FanfictionDaniela Calle es una abogada reconocida del bufete Calle y Asociados, pero que a su vez toma casos pro bono en una casa refugio para mujeres violentadas que formó junto a sus amigas Kim y Mariana después de un suceso traumático que involucró a una d...