Narrado
Habían salido de la habitación y caminaron hacía el pasillo de nuevo."Ya tengo que irme, es muy tarde", susurró la rubia caminado despacio a la par de la pelinegra.
"No seas tonta, es muy tarde, no te van a dejar pasar al hotel", respondió mirándola.
La pelinegra tenía razón y la rubia lo sabía.
"¿Me estás diciendo que me puedo quedar?", sonrío rápidamente.
"Claro que sí...", sonrío dulcemente.
Lo penso bien por un rato. “¿Era una buena idea? Por supuesto que lo era”
"Bueno, esta bien voy a dormir en el sillón es muy cómodo... Se ve muy cómodo", reiteró sonriendo, aunque era una mentira.
"No seas tonta", rió con suavidad. "Vamos a mi habitación", invitó.
"Me, me encantaría, pero no quiero molestar...", Ella respondió nerviosamente mientras se peinaba.
"Oh, Jeongie a mí no me molestas", aseguró con una sonrisa tranquila.
"Eso sería muy tonto y lo sabes", susurró y lamió sus labios.
Sus corazones latían rápido.
"Bueno, no tiene que pasar nada entre nosotras, tonta rubia", dijo entendiendo a qué se refería y se rió nerviosa.
La rubia también se rió y sacudió su cabeza nerviosamente.
"Tienes razón, pero contigo mi lado... no lo sé", suspiró.
"Ay, cállate y vamos", pidió.
La hagarro de su mano con suavidad y la llevo hasta su habitación.
...
Las dos entraron, Nayeon camino hacía su baño para cepillarse los dientes y la rubia tímidamente parecía no saber qué hacer.
"Tenía otro aguardardo", dijo entregándole un nuevo cepillo de dientes a la rubia.
"Gracias", respondió nerviosa.
"Nayeon se ve tan hermosa, tan perfecta para mis ojos que no pueden dejar de verla", susurró Jeon, para sus adentros, quién la miraba con ilusión.
Juntas en silencio, cepillaron sus dientes y al terminar se sonrieron. La pelinegra apagó las luces, caminó hasta su cama, quito sus pantuflas y se acostó dejando a la rubia parada allí.
"¿Piensas quedarte allí parada o vendrás acá conmigo?", preguntó agarrando las sábanas para cobijarse.
"Sí, lo haré", susurró.
Finalmente hizo lo mismo y miró nerviosamente a Nayeon que levantó la vista al techo, aunque la oscuridad no la dejaba ver, sabía que se veía aún más hermosa.
Jeongyeon, estaba nerviosa, obviamente, pasaban muchas cosas en su cabeza, pero se tranquilizó y volteó su cuerpo ligeramente hacía el otro lado, para darle el espacio suficiente a su querida pelinegra, para que ella no sentirá incómoda, eso era lo menos que quería.
Esto le traía muchos recuerdos y no lo iba a negarlo, sentir que Nayeon estaba muy cerca de ella la mataba, quería abrazarla y dormir pegadita hacia ella, mientras besaba sus mejillas, sus labios y su cuello.
“Suficiente, no pienses en eso todavía”, se pidió así misma, tenía que respetar a su conejita y sus pensamientos fallaban.
La pelinegra por otro lado también moría porque su rubia tonta, la abrazara con cuidado, que la besara.
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𝐄𝐋𝐋𝐀 𝐄𝐒 𝐓𝐔 𝐇𝐈𝐉𝐀 ➯ ᒾʏᴇᴏɴ
FanfictionAdaptación a "Ella es tu hija" que es una historia completamente de mi autoría. ... ¿Por qué tenía que suceder esto cuando estaban pensando en casarse y formar una familia? ¿Había sido todo destruido para ellas? ¿Ganaría su amor al final? ...