Alas rotas (Broken Wings traducion)

CALIDEZ DEL HOGAR

Fue surrealista cuando me despierte después de una de las noches de sueño más reparadora que he tenido en años. Casi olvido dónde estabamos mientras miro alrededor de mi antigua habitación, el shock desaparece cuando la realidad vuelve a asentarse. Realmente estoy de vuelta en casa, ¿no? Bueno, no permanentemente... No puedo simplemente volver a mudarme. Todavía tenemos un apartamento. Durante la noche terminamos teniendo que quedarnos en ropa interior porque la calefacción en mi antigua casa no era mala y estábamos sofocados. Afortunadamente, nadie vino a controlarnos; eso habría sido jodidamente incómodo. Anon todavía está inconsciente roncando con la cara enterrada en mi ala mientras lucho por liberarla. Después de aflojarlo un poco, se da vuelta sobre la almohada dejando una mancha de baba en mis plumas... ¡Puaf!.

Lo limpio con un pañuelo de papel mientras me levanto de la cama, recojo del suelo la ropa que deseché y me la vuelvo a poner. No es que hubiera planeado un cambio de ropa; Ni siquiera sabía que nos quedaríamos. De todos los escenarios que habían pasado por mi cabeza, el mejor fue una agradable reunión con la familia y un viaje a casa... No esperaba que me recibieran como si nunca me hubiera ido. Paso mi mano por el lugar vacío que alguna vez estuvo la guitarra que traje a Skin Row conmigo. Los otros dos todavía estaban en la pared, como si yo hubiera estado aquí ayer. Se siente como si estuviera de regreso en la escuela secundaria, el último año que pasé aquí antes de la noche en la playa fue uno de los mejores.

Los recuerdos se repiten en mi cabeza mientras miro a mi alrededor. El día que traje a Anon, después de haberle pedido ayuda para estudiar, aunque nunca estudiamos de ninguna manera. Si soy honesto conmigo mismo, simplemente estaba cansado de estar sola aquí y todavía estaba averiguando lo que realmente sentía por él en ese entonces. Esa pregunta obtuvo respuesta rápidamente cuando, después de tocarle una canción que yo nunca había tocado para nadie más, murmuró esas palabras que todavía se me quedaron grabadas: "todo lo que importa es ella". Esas palabras me brindan mucho consuelo cada vez que pienso en ellas. Es una de las pocas razones por las que estaba dispuesto a darle otra oportunidad. Ese era un pensamiento en su cabeza, nada que hubiera dicho en voz alta cuando aún no me había dicho que le gustaba, pero era tan puro. Algo que nadie más había hecho jamás. Nunca nadie ha mostrado tanto amor por lo que hago...o por mí.

Lo miro en silencio mientras duerme, una sonrisa crece lentamente en mis labios mientras una lágrima corre por mi mejilla. Hizo muchas cosas durante el último semestre cuando nos conocimos. Defenderme frente a Trish para que me dejara tocar la guitarra, escucharme en el techo y consolarme cuando no era necesario, y lograr que realmente empezara a valerme por mi misma en vez que mirara a los demas. todos los demás en busca de significado. Realmente desearía que las cosas no hubieran salido como salieron al final; Quiero que regresen esos años que podríamos haber tenido. Pero sé que todo lo que puedo hacer ahora es apreciar el tiempo que tenemos, hasta el último segundo.

Aparto la mirada de él mientras reviso mis viejas pertenencias. Un viejo cuaderno donde escribía mis canciones y poesía. Vaya, muchas de estas cosas son jodidamente angustiantes, pero aún así, son parte de mí. Trazo las letras y las notas en las paredes con mi garra: hay tantas canciones que no se cantan. Mis viejos carteles todavía cubren las paredes de bandas a las que rara vez les presto mucha atención estos días. Los discos y las cajas de CD están apilados en el suelo y en los estantes de mi cama; Sólo traje un par conmigo. Mi piano con teclado está en un rincón, cada tecla aún impecable y sin polvo. Mi vieja bandera no binaria todavía está pegada encima de mi cama, un recordatorio de la persona que ya no soy. Agarro una silla y la bajo, la doblo suavemente y la coloco sobre mi cómoda. No necesito destruirlo... es parte de mi historia incluso si ya no soy yo.

Suspiro mientras me giro hacia la ventana y noto algunas fotografías antiguas que tomé colgadas debajo de ella. Me arrodillo para mirarlos y gruño, frunciendo el ceño ante lo que veo. Varias fotos son mías y Trish pasando el rato. Dios, la dejé gobernar mi vida durante demasiado tiempo. Siempre siguiendo sus planes, creyendo que ella sabía lo mejor para mí, confiándole incluso mis malditos sueños. Si Anon no hubiera venido y me hubiera mostrado lo perra que era, no quiero pensar en dónde habría terminado. Arranco la foto del cuadro y estoy a punto de romperla en pedazos cuando de repente me detengo, el borde apenas comienza a romperse. ¿Por qué no puedo simplemente hacerlo? Casi arruinó mi vida con sus malditas ideas.