Amando a Penélope Featherington

Capítulo 14: Sentimientos

Penélope salió de la habitación y no pudo resistir más las lágrimas, Kate Bridgerton la vio y no dudó en socorrerla.

- Señorita Featherington ¿Qué le ocurre?.

- No me encuentro bien, necesito irme a mi casa. Dijo Penélope.

- Yo la acompañaré. Dijo Kate.

- No debe preocuparse Vizcondesa, estaré bien.

- No se preocupe, yo me encuentro muy cansada y Anthony y yo nos vamos a ir ya.

- No quiero molestarla. Dijo Penélope.

- Señorita Featherington, somos vecinas, no me molesta en absoluto y llámame Kate por favor. 

- Esta bien, Kate, gracias. ¡Ah! Y por favor, llámeme Penélope.

- De nada.

- Tengo que avisar a mi madre que me voy a casa.

- Esta bien. Avísale y te vienes con nosotros en el carruaje.

Penélope  buscó a su madre y aunque no le hizo ninguna gracia que tuviera que marcharse Portia aceptó al ser los Vizcondeses los que la acompañaban. Durante el recorrido Anthony y Kate fueron muy amables con Penélope y hablaron de varios temas. Aunque cada vez que se producía un silencio Penélope era incapaz de pensar en algo que no fuera en Colin. Cuando llegaron a casa Penélope se despidió de los Vizcondeses y por fin pudo desahogarse en su habitación.

Colin podía admirar como amanecía desde su cama, lo que pasó ayer con Penélope lo tiene atontado. No pudo controlarse y la besó, y que beso, no podría olvidarlo aunque quisiera. Después de ese beso pensó que ella sentía algo por él pero si tenía alguna mínima esperanza de que Penélope quisiera estar junto a él, Pen se encargó de machacarla. Y si la cosa no pudiera ser peor ahora el Marqués Harry Dankworth va a desplegar todo un arsenal para conquistar a Penélope. No puede casarse con ella, no podría soportarlo, si ella acabará casándose con el marqués acabaría con una camisa de fuerza.

Colin se levantó y se encontró en el salón a Kate y Anthony que venían de montar. Van casi todas las mañanas, incluso hacen carreras de caballos entre ellos no sabía lo bonito que podía ser vivir toda tu vida con tu alma gemela hasta que Kate y Anthony se casaron, esta claro que son almas gemelas y jamás había visto tan feliz a Anthony como con Kate.

- Hola hermano. Dijo Anthony.

- ¿Qué te ha pasado? Dijo Colin señalando la ropa manchada de barro de Anthony.

- Me he caído al barro, Kate quería probar un sendero nuevo y este es el resultado.

- Eso no quería decir que te cayeras, dijo Kate riéndose.

Colin se unió a su risa y Anthony dijo

- Me voy a dar un baño antes de que algún miembro de la familia se despierte y quiera reírse de mi.
Anthony le dio a Kate un pequeño beso y los dejó a solas. Kate tomó asiento en frente de Colin.

- No os vi ayer en la vuelta a casa. Dijo Colin.

- Ah, si, nos vinimos antes con Penélope en el carruaje.

Cuando Colin escuchó el nombre de Penélope se le erizó el bello y no pudo evitar sobresaltarse.

- ¿Con Penélope? ¿Por qué?

- Pues, me encontraba muy cansada y decidí venirme antes.

- Pero porque Penélope se fue con vosotros. ¿No era un baile en su honor?

- Entre tu y yo Colin la vi muy mal, estaba llorando y quería irse a casa.

A Colin se le encogió el corazón.

- ¿Estaba muy afectada?

- Si Colin, aunque decía que se encontraba mal parecía que le habían roto el corazón.

La angustia de Colin era más que palpable.

- Espera… ¡Es por ti! Dijo Kate cuando vio la cara de Colin.

Colin parpadeó muy rápido.

- ¿Qué?

- Tu eres el que la tiene así . Tu y Penélope….. ¿Tenéis algo?. Preguntó Kate con curiosidad.

Colin se pensó en sí contarle a su cuñada la verdad pero no podía ocultarlo más, necesitaba desahogarse.

- Por favor Kate, no juzgues a Penélope con lo que te voy a contar.

Puede permitir que ella le diga de todo por hacer algo indebido con una señorita de buena cuna, pero que la critique a ella y manche su honor no lo puede permitir.

- Nunca se me ocurriría. No soy la más indicada para hacerlo. Anthony y yo hicimos muchas cosas indebidas antes de casarnos.

Colin le abrió su corazón y le dijo lo que había pasado con Penélope desde que dijo que nunca la cortejaría hasta el beso en el baile de máscaras.

- Dios mío Colin, sabía que había algo entre tu y Penélope pero jamás pensé que había llegado tan lejos.

- ¿Cómo lo has sabido?

- A ver, Colin, todos vimos tu reacción cuando llegó la invitación al baile de máscaras. Pensé que te gustaba pero esto es más, mucho más.

- Y eso es todo lo que habrá , no le gusto a Penélope.

- ¿Estas seguro?

- Me rechazó. Prefiere a cualquier pretendiente antes que a mi.

- Que sea lo que te quiera hacer ver no significa que sea asi. Según me has contado, Penélope cree que tu sentimientos no son de verdad.

- Si, ¿Y que?

- Pues que Penélope habla de tus sentimientos hacia ella, no de los que tiene ella hacia ti. Creo que ella tiene claro sus sentimientos pero no tiene claro los tuyos.

- Entonces, ¿Penélope siente lo mismo que yo? Dice Colin ilusionado.

- No te lo puedo asegurar, no la conozco tanto como me gustaría pero si no te ha dicho que no le gustas y te ha correspondido a los besos de la misma manera que tu a ella yo diría que sí. Puedes coger a una mujer desprevenida y besarla una vez, pero que se repita una segunda y no te aparte me hace pensar que si le gustas.

- ¿ Y entonces porque me rechaza?

- No lo sé Colin, el ser humano es complejo por naturaleza, tiene que tener miedo de que tus sentimientos no sean sinceros. Mírame a mí, estaba locamente enamorada de tu hermano e iba a permitir que se casara con mi propia hermana. Los humanos hacemos muchas cosas que van en contra de nuestro corazón.

- ¿Cómo supiste que estabas enamorada de mi hermano? Preguntó Colin.

- Pues no es algo que te pueda confirmar nadie, es algo que en el momento lo sabes. Claro que no tienes que saberlo al principio, son pequeñas cosas que vas notando en esa persona, descubres cosas que te gustan de ella, cada vez los sentimientos son más fuertes hasta que llegas a enloquecer por esa persona.

¿Enloquecer por esa persona? El ya está perdiendo la cabeza por Penélope Featherington, la tiene metida en su cabeza y sobre todo en su corazón y desde que volvió de Chipre no ha podido pensar en otra cosa que no sea Penélope Featherigton. Lo tiene trastornado.

- ¿Y que me recomiendas que haga?

- Dejarlo estar, si estáis destinados a estar juntos lo estaréis pase lo que pase.

- Entonces ¿me debo quedar quieto y esperar a que Harry Dankworth me la quite?

- No digo eso Colin, le tienes que dar unos días para procesarlo todo. Tu ya le has dicho tus sentimientos, quizás cuando lo piense en frío ella se atreva a hablar contigo pero debes de concederle esos días.

- Esta bien Kate, muchas gracias por escucharme y por tus consejos. Dijo Colin levantándose de la silla y dirigiéndose a la puerta.

- Colin. Lo llamó Kate

- Dime. Dijo Colin volviéndose

- Si ya te estas planteando la idea de que puedes estar enamorado de ella es porque quizás ya estás enloquecido por ella.