Another love.

Capítulo 9.

Max.

—Es mi imaginación ¿o esta noche hemos venido muy pocos? —Lando se sentó junto a mí.

—¿No crees que estás bebiendo mucho? —Daniel se acercó a nosotros y le quitó el trago a su compañero— deberías parar un poco.

—Déjalo —Charles se sentó del otro lado de Lando— entre Carlos y yo podemos cuidarlo.

—Córrete un poco Max —Carlos me empujo y se sentó a mi lado, dejando en medio de ellos a Lando— y si, esta noche somos menos porque algunos se han ido a celebrar el cumpleaños de Nico.

—¿Nico Rosberg? —Daniel me miró con una risa burlona en los labios— ¿Quiénes fueron con él?

—Lewis, Checo, Seb y Alonso.

—¿Checo? —no, eso era imposible— estás equivocado, él está descansando porque mañana saldrá temprano a España.

—Si, yo regresaré con él —Carlos le lanzó una mirada rápida a Charles antes de seguir hablando— pero iremos en el jet, podemos partir a la hora que sea, así que lo más probable es que si esté con ellos.

—Lo está, mira —Charles se estiró y le pasó su móvil a Carlos, quien lo giró para mostrarme un video de Nico junto a Lewis y Sergio.

Me había mentido, dijo que quería descansar, pero en realidad solo quería estar con su maldito ex.

—¿Dónde están?

—Max —Lando se puso de pie al mismo tiempo que yo— no creo que...

—¡Tú no te metas idiota, nadie te hablo a ti!

Intenté empujar a Lando para apartarlo de mi camino, no quería hacerle daño, solo moverlo, pero Daniel me sujetó la muñeca antes de que pudiera hacer nada.

—Déjalo en paz Max ¿Qué mierda te pasa?

—¿Qué mierda te pasa a ti? —me solté y vi como Lando nos miraba confundido— lo siento, pero no te metas Lando, esto es entre Sergio y yo y como resuelva los problemas con él no es asunto tuyo, ni de nadie.

—Si vas a ir a buscarlo —Carlos también de pie y Charles lo siguió— lo mejor será que nosotros te acompañemos, no quiero que le montes una escena a mi amigo.

Resultó que ellos estaban a solo quince minutos de donde nosotros nos encontrábamos, Charles y Carlos me acompañaron, mientras que Daniel y Lando se quedaron.

—Escucha —Charles me detuvo antes de entrar, Carlos se había adelantado— conozco bien toda esa mierda entre Daniel y tú, pero Max, mírate, estos celos tuyos no son los de una persona que solo está fingiendo, te estas enamorando y si no te has dado cuenta de eso es porque eres un idiota que no quiere ver la realidad

—Amo a Dani, Charles, todo lo que hago es por él, para que estemos juntos.

—¿Por qué sigues aferrándote a eso? Todos, incluido Ricciardo ya se han dado cuenta de tus sentimientos y si sigues con todo esto me temo que lo perderás todo.

—Estás loco, ya te he dicho que yo amo a Daniel.

Era verdad, yo amaba a Daniel, eso lo sabía, pero cuando entramos y vi a Sergio con un brazo por encima de los hombros de Rosberg mientras que este tenía su brazo alrededor de la cintura de Sergio, sentí una clase de celos que nunca había sentido, ni siquiera por Daniel, la clase de celos que no podían ser fingidos o provocados por mi ego dañado, eran reales y estaban matándome.

Carlos se acercó a Sergio y supuse que le dijo que yo estaba ahí porque alejó a Rosberg y se giró hacia donde yo estaba.

—Max ¿Qué...