Capítulo 28.

6.3K 588 547
                                    

GP de México.

Checo.

El gran premio de México era de los más importantes, por lo menos para mí, era la carrera en casa y no solo quería el podio, quería la victoria, esperaba que pudiéramos hacer uno-dos con Max para el equipo y  celebrarlo juntos.

Hasta ese momento Daniel había mantenido su palabra de no decir que fui yo quien lo envió al hospital. Horner, como era de esperar, terminó enterándose, Dios sabe cómo, de lo que pasó, fue él quien nos informo que le fracture la nariz y la mandíbula a Daniel, pense que Christian estaria muy enojado por aquello, yo había estado con las manos lastimadas por unos dias y por poco me pierdo la carrera en Austin a causa de esto y se suponía que si estaba molesto, al menos eso dijo, pero su actitud indicaba todo lo contrario, se había pasado el fin de semana complaciendome hasta en el más mínimo detalle y felicitandome por todo. Secretamente Horner estaba orgulloso de lo que había hecho, lo sabía, todos habíamos disfrutado de ver a Daniel en el piso cubierto de sangre, era lo mínimo que se merecía después de lo que había hecho. Estaba seguro de que lo habría matado si Nico no me hubiera detenido y alejado de él.

—Mi padre nos está esperando abajo.

—¿Y Sid? Mierda —Max estaba sumamente nervioso, mi padre no sabía toda la historia y no quería que lo supiera, todo lo que sabía era que Max y yo habíamos tenido una gran discusión que llevó a que rompieramos y que ahora estábamos tratando de ir un poco más lento— Mierda, olvide a Sid ¿Quien lo cuidara?

—Oscar lo cuidara, no hay necesidad de pasar a recogerlo después de la cena, se quedara a dormir con él.

Max detuvo su caminata nerviosa y me dedicó una mirada inquisitiva.

—¿Oscar Piastri, el mismo Oscar Piastri del que has estado celoso las últimas semanas?

—No estaba celoso de nadie, solo que soy un poco exclusivo con las personas que dejó entrar a mi círculo íntimo, Lando y tú lo invitaban a todas partes sin preguntarnos al resto si estábamos de acuerdo, pero no eran celos.

Max volvió a verme de aquella forma que dejaba claro que no me creía nada.

—En Austin estuvo en mi grupo para las ruedas de prensa y al terminar habló conmigo, aclaramos unas cosas y ahora que no tenemos inconvenientes, me he dado cuenta que me agrada.

Lo que habia pasado en realidad era que él se habia acercado para invitarme un cafe y hablar, se disculpo varias veces por si habia hecho o dicho algo que me hubiera incomodado, tal vez recordando su comentario sobre Daniel, ya estaba comenzando a sentirme mal por como me habia comportado con él, pero lo que termino de hacerme sentir como un idiota fue cuando me dijo que él aun no estaba listo para estar en ese lugar, que no se sentia tan buen piloto y que tenia mucho miedo de terminar arruinando las cosas, que se sentia solo al estar rodeado de tantas personas desconocidas, para ese punto sus ojos estaban llenos de lagrimas y pasaba saliva entre cada palabra, en un intento por no llorar, me senti terriblemente culpable, solo era un chico asustado por el cambio tan grande y repentino que habia dado su vida, recorde la primera carrera de Max, lo nervioso que estaba, tambien habia sido solo un niño asustado, recuerdo haberme sentado con él para intentar tranquilizarlo y darle apoyo, así era yo, una persona que le tendia la mano a quien lo necesitaba, mis padres me habian educado para ser así, no para ser la persona celosa y mezquina que había tratado mal a este pobre chico.

—Bueno —Max por fin parecía un poco más tranquilo— si Oscar se quedará con Sid creo que podremos disfrutar de toda la noche para nosotros, tal vez podamos ir a algún sitio después de la cena con tus padres, puedes enseñarme la ciudad de noche.

Another love.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora