Capitulo 5

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Ashley Cooper

El aeropuerto de Barcelona estaba lleno de emociones y expectativas mientras esperaba la llegada de Lisa y Karla, que fueron a por algo de beber. Habíamos aterrizado en la ciudad con la promesa de un emocionante viaje por delante, y Barcelona parecía dispuesta a recibirnos con los brazos abiertos. Mientras observaba las pantallas de llegadas, sentí que el corazón me latía con anticipación.

Finalmente, vi a Lisa y Karla caminando hacia mí. Lisa, con su cabello rubio y su sonrisa cálida, se veía radiante como siempre. Karla, mi pequeña niña, caminaba a su lado, su cabello oscuro cayendo sobre sus hombros y sus ojos curiosos observando a su alrededor.

— ¡Ashley! — exclamó Lisa mientras me abrazaba con entusiasmo. — ¡Estoy tan emocionada de estar aquí contigo!"

Karla se unió al abrazo, y mis brazos rodearon a ambas con cariño. 

— ¡Yo también estoy emocionada, chicas! Este viaje va a ser increíble.

Pasamos un momento precioso en el aeropuerto, riendo y compartiendo historias mientras esperábamos nuestro equipaje. Karla estaba emocionada por explorar Barcelona, y su entusiasmo era contagioso.

Una vez que recogimos nuestras maletas, nos dirigimos hacia la puerta de salida del aeropuerto. La emoción se palpaba en el aire mientras nos acercábamos, pero lo que vi al salir por la puerta me dejó atónita.

Un grupo de músicos locales estaba tocando música tradicional española, llenando el lugar con sus melodías alegres. Me sentí atraída por la música y me acerqué al grupo, Karla y Lisa siguiéndome.

Fue entonces cuando lo vi.

Dave Lombardi, mi exnovio y el padre de Karla, estaba parado junto al grupo de músicos. Mi corazón dio un vuelco al verlo. Había cambiado desde la última vez que lo vi. Su cabello estaba más corto, y su cuerpo musculoso estaba en excelente forma. Sus ojos verde intenso, que solían mirarme con tanto amor, se posaron en mí por un breve momento antes de que su expresión se volviera un enigma.

Era como si el tiempo se hubiera detenido por un instante mientras nuestros ojos se encontraban. Mi mente estaba llena de preguntas sin respuesta, de recuerdos y emociones que habían quedado en el pasado.

No supe cómo reaccionar, así que, instintivamente, me volví y corrí hacia el interior del aeropuerto. El corazón me latía con fuerza, y la confusión se apoderó de mí. Sabía que no estaba lista para enfrentar a Dave, no después de todo lo que había sucedido entre nosotros.

Mientras me alejaba, sentí la mirada de Victoria, la representante de Dave, quemándome. Sus ojos me siguieron con un brillo de reconocimiento, y su expresión se endureció. Victoria me odiaba y no sabia el motivo, siempre lo hizo.

Finalmente, llegué a un rincón tranquilo del aeropuerto y respiré profundamente, tratando de recuperar la compostura. 

Lisa y Karla me alcanzaron poco después de que me alejara del encuentro sorpresa con Dave. Lisa, con su instinto maternal, notó de inmediato mi expresión preocupada y confundida.

— Ashley, ¿qué pasa? — preguntó Lisa, preocupada — ¿Algo te está molestando?

Karla, mi niña curiosa, miró hacia arriba, sus ojos verdosos brillando con curiosidad. 

— Sí, mamá. ¿Qué pasa?

Me senté en un banco cercano, tratando de ordenar mis pensamientos antes de hablar. Sabía que tenía que explicar lo que había sucedido en el aeropuerto, pero no sabía cómo hacerlo sin asustar a Karla.

Nunca le oculte a Karla la identidad de su padre, al contrario, le dije que era una buena persona y muy bondadoso, también le enseñe varias fotografías que teníamos juntos. Mi hija tiene cinco años, y sabia perfectamente que en algún momento de su vida querría saber de su padre, así que quise hacerlo lo antes posible. Omití el simple echo de que su representante me amenazaba contestemente y por eso mismo lo abandone.

DestruccionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora