Capitulo 8

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Ashley Cooper

Me desperté en la habitación de nuestro alojamiento en Barcelona con una determinación que había estado creciendo en mí desde que Lisa y yo habíamos hablado sobre la necesidad de contarle a Dave la verdad sobre Karla. Había llegado el momento de enfrentar el pasado y abrir la puerta a un futuro incierto pero necesario.

Mientras Karla seguía durmiendo, alcancé mi teléfono y comencé a redactar un mensaje de texto para Dave. Mis manos temblaban ligeramente por la ansiedad mientras escribía las palabras que cambiarían nuestras vidas de manera irrevocable.

Nunca borre ni bloquee el numero de Dave, al contrario, cambie de numero para que no pudiera contactar conmigo de ninguna forma. Capaz no respondía al mensaje que le iba a mandar, pero tenia que intentarlo.

Hola Dave, soy Ashley. Necesito contarte algo que debiste de saber desde el principio. ¿Podríamos quedar en el restaurante donde nos encontremos la ultima vez? Ha las dos y media. Te espero, es importante. 

Una vez que envié el mensaje, la realidad de lo que estaba a punto de hacer comenzó a pesar sobre mí. Había tomado una decisión que no tenía vuelta atrás, y no sabía cómo reaccionaría Dave cuando leyera el mensaje y comprendiera la magnitud de lo que estaba en juego.

El tiempo pasaba lentamente mientras esperaba una respuesta. Mi mente estaba llena de dudas y preguntas, pero sabía que no podía retroceder. Era hora de enfrentar las consecuencias de mis acciones pasadas y darle a Karla la oportunidad de conocer a su padre.

Mire el móvil por decima vez esperando una respuesta, que no venia.

Después de esperar por un largo rato una respuesta, decidí irme a la ducha y vestirme para el encuentro. Aunque Dave no haya respondido a mi mensaje, confió en el y se que vendrá. 

Opte por ponerme un vestido de verano ligero y fresco. Era de color azul marino, con un estampado de flores blancas que le daba un toque de alegría

Al llegar al lugar acordado, busqué a Dave por el restaurante. Y bingo, estaba en una mesa alejado. Vestía una camiseta blanca de manga corta que realzaba su bronceado, acompañada de unos vaqueros oscuros que le daban un aire informal pero elegante.

— Dave — dije con una voz ligeramente temblorosa

— Ashley — hablo el levantándose de la silla.

Escuchar su voz fue algo gratificante para mi. 

— ¿Cómo te ha ido la vida? — pregunte, por que tampoco era plan decirle que tiene una hija de cinco años.

— Se podría decir que bien. ¿Y la tuya? 

— Mmm.. Bien. — Suspire — Dave, iré al grano. 

— Adelante, soy todo oídos. — Apoyo sus codos en la mesa y junto sus manos dejándolas por debajo de la barbilla.

Tomé una respiración profunda antes de comenzar a hablar. 

— Dave, quiero que sepas que esto es difícil para mí, pero es algo que debes saber. No se como vas a reaccionar y capaz me odias, pero necesitas saberlo.

¿Qué putas palabras encuentro para decírselo? 

— Karla, la niña que conociste el otro día, es tu hija. 

Listo, la bomba ha caído, solo falta que explote. 

Sus ojos se abrieron de par en par, y su rostro reflejó una mezcla de sorpresa. 

— ¿Mi hija? ¿Estás diciendo que Karla es mi hija?

— Has escuchado bien. 

Asentí con tristeza, sintiendo el peso de la verdad que finalmente estaba saliendo a la luz. 

— Si, has escuchado bien. Karla es tu hija.

— ¿Por qué no me lo dijiste antes, Ashley? ¿Por qué ocultaste esto durante tanto tiempo?

— Es complicado. Solo quería decirte esto, te guarde el secreto por mas de cinco años. Lo justo es que lo sepas ahora. Se que pedirte perdón no arreglara nada, pero lo siento de verdad.

— No...

****


Jjejejeje, no tenia pensando actualizar hoy mas, pero como hemos llegado a las 300 visitas en menos de un dia, os lo mereceis. ¿Que os ha parecido? 

¿Que os parece Ashley?

¿Que os parece dave?

DestruccionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora