NARRADOR
Desde que el señor manoban decidió meter al pelinegro a rehabilitación habían pasado dos semanas completas y desde eso el pelinegro llevaba casi las mismas en rehabilitación, los señores Manoban ya habían resuelto todo muy rápido, el pelinegro dejó la universidad y casi de inmediato lo metieron allí.
No lo habían podido visitar aún pues la primera semana no se les permite visita para que pueda familiarizarse y conocer el lugar y en la segunda pues el pelinegro había rechazado las visitas, el día en que lo habían llevado había sido todo un reto, incluso había tratado de escapar de la casa un día antes pero fue atrapado con las manos por su padre.
Flashback
El pelinegro se encontraba sentado en su antigua habitación de la casa que compartía con su hermana, estaba sentado sobre la cama moviendo sus pies con impaciencia mordiéndose las uñas, esperaba a que todos en el lugar estuvieran dormidos para así poder escapar, no estaba dispuesto a que lo trataran como un perro y lo encarcelan en una estúpida y absurda rehabilitación.
En eso de las dos de la noche ya no se escuchaba absolutamente nada en todo la casa, en realidad no lo hacía desde las once pero quería estar seguro de que todos estarían dormidos por lo que había esperado mucho.
Agarrando una mochila que ya había preparado y escondido desde el día anterior se acercó a la puerta y la abrió lenta y silenciosamente luego asomó un poco la cabeza mirando a los lados sintiendo alivio al no ver a nadie en los pasillos, salió y jaló la puerta detrás de el dejándola semi abierta para no arriesgarse a hacer ningún ruido al cerrarla.
Caminando de puntillas se dirigió hasta las escaleras bajándolas de la misma manera hasta llegar al primer piso, allí miro a todos lados y camino hacia la puerta y creyó que lo había logrado pero en cuanto agarro sus zapatos en la entrada todas las luces se encendieron, se detuvo en seco y volteó lentamente encontrándose con el rostro serio de su padre a unos metros con los brazos cruzados.
Sr m: ¿a donde crees que vas?- retrocedió lentamente- ni te molestes, esto es algo que no podrás evitar, aunque logres salir de esta casa ahí dos guardias vigilando fuera ¿crees que eres el primer adicto con el trato? Soy un hombre de negocios he visto muchas cosas y te advierto que será mejor que vuelvas a tu habitación
Lc: no puedes enviarme a ese lugar, soy tu hijo, voy a heredar la empresa, cuando todos se enteren de eso van a...
Sr m: oh, si eso es lo que te preocupa no te preocupes, al lugar al que vas son muy discretos, además tengo dos hijos y al menos uno de ellos es responsable, sabe lo que hace, así que o te arreglas o pierdes todo, no estoy jugando, intento darte una oportunidad porque eres mi hijo y lo mejor será que la tomes- le dijo seriamente- vuelve a tu habitación ahora- ordenó y el pelinegro apretó la mandíbula sin más opción y regresó por donde había venido encontrándose a su hermana y su madre en las escaleras pero ni siquiera las miro y llegó furioso a su habitación tirando la mochila
Fin del flashback
El cómo entró a rehabilitación fue otra cosa, si discutió con todos intentando convencerlos de no hacerlo y de que estaba bien pero al final tras algunas rudas advertencias de su padre no tuvo mas opción que resignarse y aceptarlo.
El lugar para los demás no parecía tan malo, cuando el director les había dado un recorrido les pareció un lugar adecuado y tranquilo a diferencia de lo que veía el pelinegro, para el no era nada más que la cárcel donde estaría prisionero indefinidamente.
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𝒰𝓃𝒶 𝓃𝓊ℯ𝓋𝒶 𝓋𝒾𝒹𝒶 [𝒥ℯ𝓃𝓁𝒾𝓈𝒶]
أدب الهواةDᴏɴᴅᴇ ʟᴀʟɪsᴀ ᴍᴀɴᴏʙᴀɴ ᴜɴᴀ ᴄʜɪᴄᴀ ɪɴᴛᴇʀsᴇxᴜᴀʟ ᴅᴇ ʙᴜᴇɴᴀ ꜰᴀᴍɪʟɪᴀ ᴇʀᴀ ʙᴜʟɪᴀᴅᴀ ᴇɴ sᴜ ᴘᴀɪs ᴘᴏʀ sᴜ ᴄᴏɴᴅɪᴄɪᴏɴ, ɢʀᴀᴄɪᴀs ᴀ ʟᴏ ǫᴜᴇ ᴛᴇɴɪᴀ ᴇɴᴛʀᴇ ʟᴀs ᴘɪᴇʀɴᴀs ᴅᴇsᴅᴇ ᴊᴏᴠᴇɴ ᴛᴜᴠᴏ ᴄʟᴀʀᴏ sᴜ sᴇxᴜᴀʟᴜᴅᴀᴅ ᴘᴏʀ ʟᴏ ǫᴜᴇ ᴀʟ ᴄᴜᴍᴘʟɪʀ ʟᴏs ǫᴜɪɴᴄᴇ sᴇ ʜᴀᴄᴇ ᴜɴ ᴄᴀᴍʙɪᴏ ʀᴀᴅɪᴄᴀʟ ʜᴇ ɪɴɪᴄɪᴀ ᴜ...