- ¿Qué tal te sientes hoy? -pregunta Mariah caminando a mi lado en el parque de Sagesh.
- Estoy bien. Ya no estoy conmocionada.
- Ayer estabas aterrada -menciona-. Y no era para menos. Eso que sucedió en la feria fué demasiado extraño.
- Alastair y yo podríamos haber muerto allí anoche -señalo sin ánimos.
- Tal vez no habrían muerto. Pero si hubiese sido un accidente muy feo. Es un alivio que nadie se encontrase cerca cuando la cabina cayó al suelo.
- Sí.
- Aún no entiendo lo que sucedió. Hablé con los encargados del lugar. Y me han asegurado que cada año las atracciones de la feria de Sagesh son correcta y minuciosamente evaluadas para cerciorarse de que son completamente seguras. Y me consta, yo pasé várias veces cuando estaban en revisiones antes de abrir oficialmente la feria; en cada ocasión estaban asegurándose de que cada atracción fuese segura y estuviese lista para ser utilizada.
- Estoy segura de que la atracción estaba bien, Mariah -digo con inquietud-. No me cabe duda. El problema fué algo distinto.
- ¿A qué te refieres? -cuestiona mi amiga con seriedad e interés.
- La cabina en la que estaba con Alastair fué golpeada salvajemente tres veces seguidas al estar en la cima de la rueda. Eso fué lo que sucedió. No fué un movimiento extraño de la atracción, o el hecho de que hubiese algo mal en ella. Ni siquiera una corriente muy fuerte de aire. No. Algo la golpeó con demasiada fuerza.
Mi amiga me mira con los ojos muy abiertos.
- Pero... Eso no tiene sentido alguno. ¿Qué la habría golpeado tan fuerte? Es imposible. Y no parece que haya sido un gran pájaro que se haya golpeado o algo así.
- Es que no fué un accidente -los vellos de mi piel se erizan al decirlo en voz alta. Toda la noche lo pensé, pero en ningún momento me atreví a decirlo. Supongo que eso lo volvería más serio y real-. No he dejado de pensar en el hecho de que la cabina fué golpeada a propósito por algo, o... Alguien. Un pájaro jamás podría haber golpeado la cabina tan fuerte y la habría movido así. Y si eso fuese posible, probablemente al primer golpe por equivocación, el pájaro habría caído muerto o aturdido.
- Vaya eso es... Es una locura. Pero parece que tiene más sentido que cualquier otra cosa que haya escuchado al respecto. El detalle radica en el hecho de que... Sigue pareciendo imposible que alguien pudiese golpear la cabina a esa altura. Además, lo único que todos vimos fué el movimiento anormal de la cabina, no había nada más -dice. Pero luego hace una expresión de sorpresa. Abre sus ojos grandemente y luego me mira con algo de miedo.
- ¿Qué? ¿Qué sucede?
- Bueno. En realidad, a mí si me parece haber visto algo. Pero pensé que había sido mi imaginación.
- ¿Qué viste? - pregunto rápidamente.
- Una sombra. Algo oscuro fué lo que ví. Estaba sobre la cabina al principio. Pero luego se movió. Fué tan rápido, que me pareció que mi vista estaba fallando y mi imaginación estaba jugando conmigo.
En éste momento siento que me paralizo.
- ¿Una sombra?... ¿Viste una sombra? -pregunto nerviosa y asustada.
- Sí. No estoy completamente segura. Pero eso fué lo que me pareció.
Mi corazón está acelerado y siento un leve temblor en el cuerpo, pero intento mantenerme controlada.
- Mariah, vamos a la feria. Ahora -propongo decidida.
- ¿Qué? ¿A ésta hora? -pregunta con el ceño fruncido-. Además, pensé que no querrías volver allí más nunca.
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Sombras Oscuras: ¿Quién es Safwan?
RomanceSaga Their Dark Side: Libro 4. Existe una pequeña línea entre lo que creemos que es cierto y lo que no. Lo que está bien y lo que está mal. Sin embargo, nada te asegura que lo que pienses sea lo correcto y lo que los demás digan sea falso; exact...