El hijo de Canuto (Harry Potter y el prisionero de Azkaban versión oc)

CAPÍTULO 17

El regalo

Cho y Lia hicieron todo lo que pudieron para hacer sentir mejor a su amigo, incluso Lia pensó en que otro golpe de bludger le acomodaría las emociones, pero Cho le recordó que querían hacer que se sintiera mejor no intentar matarlo, después de todo, terminaron de hacer sus compras, aparte de los dulces, Astian le llevaba a Ginny un gorro tejido a juego con unos guantes de color gris con listones negros y rosas, a su padre le había comprado una túnica nueva color azul marino y un libro que le ayudaría cada que se acercara la luna llena, a Hermione también le llevaba algo, era un estuche para plumas con varias nuevas brillantes para cada ocasión junto a un tintero nuevo Anti derrames, a Will le había comprado un suéter color azul cielo y un gorro navideño para gatos, también queria cambiar su listón, planeaba cambiarlo
por uno con un patrón rojo con blanco de acuerdo a la época, a Draco también le llevaba algo: era una caja musical con reloj como la que le había dado a Harry, pero está era un poco más grande de color plata con muchos detalles que la hacían ver elegante, cuando la abrías una pequeña serpiente se iba enroscando en una escoba y dejaba salir de su boca una linda melodía, tenía un espejo en la parte debajo de la tapa y en la parte superior había un pequeño letrero que parecía de madera que te daba el día y la hora, Lia decia que era muy exagerado, quien más le costó trabajo fue Harry pero tuvo una idea, aunque tendría que pedirle ayuda a
su amiga Tonks, aunque no sabía si Harry querría volver a verlo después de enterarse de todo eso... Aún para él era difícil, no se imaginaba para Harry, si supiera que él no era al único que elseñor tenebroso quería matar ese día...

Llegando al colegio Astian se negaba a cenar en el gran comedor, no quería ver a Harry, Ron y Hermione que ahora tenían esa información, se fue al despacho de su papá con el pretexto de envolver regalos... De cierta manera era verdad, también aprovechó para escribirle a Tonks y contarle todo, fácilmente había escrito un pergamino de más de veinte centímetros, sabía que lo primero que haría su amiga al verla sería quejarse por la
extensión pero también preocuparse, tomó el colgante de la luna en sus manos y lo apretó con mucha fuerza.

Había decidido envolver algunos regalos sin magia así que estaba buscando entre los cajones de su papá algo de cinta y unas tijeras o una navaja, mínimamente.

-Es imposible que no tenga al menos pegamento aquí- siguió rebuscando.

-¡Ajá!- encontró cinta adhesiva y una navaja pequeña como la que usaban en clase de pociones para pelar algunas cosas, cuando accidentalmente tiró lo que parecía un libro pero cuando lo recogió se dió cuenta que era un álbum de fotos, se le hacía raro que su papá lo llevará con él, se sentó en lasilla frente al escritorio y lo abrió, en la primera hoja había una gran foto de cuatro chicos con el uniforme de Hogwarts, todos de Gryffindor... Reconoció el cabello negro bien acomodado que llevaba un chico muy guapo de ojos oscuros, era Sirius, por el
contrario otro chico con el cabello despeinado y usaba lentes, era la viva imagen de Harry pero con los ojos
marrones, otro chico de cabello castaño un poco ojeroso que le sonreía, era Remulus, Y al final... Un chico bajito que se veía algo despistado de ojos pequeños, ese... Era Peter Pettigrew, abajo de cada uno había una pequeña cinta con sus apodos y sus firmas «Canuto, Cornamenta, Lunático y colagusano»

Cambió la hoja y pudo ver a sus dos padres con los Potter, Lupin al lado de Lily y Sirius al lado de James, se veían tan felices y llenos de alegría, así era como él recordaba a los tres y como siempre lo haría... En la siguiente hoja estaban sus padres cargando un pequeño bulto junto a James... Era él de bebé, cambió de página, estaba Sirius con un pequeño de cabello negro y ojos azules riéndose sobre sus hombros, los dos se veían tan felices
parecía que acababan de jugar en la tierra o algo así.

-Me preocupaba dejarlo en casa y que Kreacher lo quemara.- Astian se limpió una pequeña lágrima y miro a su padre con una sonrisa mientras cerraba el álbum de color negro que llevaba en
tonos plateados «B.L.P»