CAPÍTULO 20

82 8 0
                                    

El sueño

Astian estaba en un bosque, se veía muy oscuro, estaba rodeado de árboles y las hojas crujían bajo sus pasos descalzos, no sabía a dónde iba, sus pies lo guiaban, apenas entraban algunos rayos de luna, llegó a un pequeño lago, la luna llena se reflejaba en el agua... ¿Luna llena? «Oh no... Papá» pensó y quiso correr de
regreso pero apareció un dementor frente a él, comenzó a buscar su varita en sus bolsillos.

–¡Expecto Patronum!– el gran lobo se lanzó a el dementor pero... En realidad era un Boggart, ahora era Tonks.

–Te odio, si estoy contigo es por qué tu padre me paga por ser tu niñera, sólo eres un niño tonto al cuál su madre abandonó y que su padre es un asesino psicópata.–

–¡Riddikulo!– ahora era Lia.

–Yo jamás quise ser tu amiga, Dumbledore me dijo que si te hablaba aprobaria todas mis materias, nadie quisiera juntarse con un bicho raro como tú.–

–¡Riddikulo!– gritó de nuevo con un nudo en el estómago, ahora era Cho.

–Eres un inutil que sólo se quedó en Slytherin por qué no cabía en otro lugar, si tienes amigos es solo por qué te tienen miedo, ¡Eres un asesino igual que tú padre!– Astian cerró fuerte los ojos, sentía un líquido tibio en las manos y cuando los abrió de nuevo vió que era sangre...

–¡No!...– de pronto había gente alrededor, la Profesora McGonagall, Flitwick, Hagrid, Snape, Sprout, la Profesora
Trelawney diciendo que ya había visto esto en su futuro, todos sus compañeros, Hermione y Ron estaban llorando en el suelo sobre algo... era Harry.

–Pobre Potter... Le advertí que no confiara en Black, fue la misma historia...– hablaba la Profesora McGonagall.

–¿Enserio crees que yo estaría interesado en alguien como tú? Me das asco.– Malfoy lo veía con odio, vió como el brazalete que tenía se rompía, sólo escuchó por última vez como sonaba el cascabel en un ruido muy tenue y lejano.

–Tu jamás serás mi hijo, no eres nada para mí– era Lupin que estaba cargando el cuerpo de Harry y lo abrazaba.

–¡Monstruo! ¡Asesino! ¡Es igual a su padre! ¡Traidor!– miles de voces le gritaban, quería taparse los oídos pero sus manos estaban atadas, había dos víboras alrededor de ellas.
«Traición, sangre, muerte, dolor, penumbra, desgracia..»
susurraban las serpientes.

–Tendrá el mismo destino que su padre...– Cornelius Fudge estaba frente a él, de la nada se sintió un enorme frío horrible, sentía que el hielo lo cortaba por dentro, miró hacia arriba, había miles de dementores a su alrededor.

–Hi..jo..– uno de los dementores se acercaba a él y apenas podía formular una palabra, su viscosa mano tomaba el brazo de Astian. –Hijo... Ven... Con...migo...– ahora sabía... Era su papá.

–¡NOOOOOOOO!–

–¡ASTIAN! ¡DESPIERTA!– abrió los ojos, estaba llorando muchísimo, Draco estaba frente a él tomándolo de los brazos, miró hacia su muñeca, ahí seguía el brazalete, Malfoy lo veía muy asustado.

–La... La sangre...– susurró Astian mirando sus manos
temblorosas que hace un segundo estaban cubiertas del líquido espeso de olor metálico.

–¿De... De que hablas, Black?, Solo fue una pesadilla.– le dijó Draco, gruesas lágrimas caían por las mejillas de Astian aunque tenía los ojos muy abiertos y rojos, no dejaba de temblar y estaba muy pálido.

–Tranquilo...– cómo si Draco no supiera que más hacer lo
abrazo, nunca lo había visto así.

–Te... Tengo que llevarte a la enfermería o con el profesor Lupin...– Astian seguía temblando.

El hijo de Canuto (Harry Potter y el prisionero de Azkaban versión oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora