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—Joo, y a mi que ya me empezaban a gustar tus trenzas.
Dije con tristeza quitandole la última trenza del cabello todo desordenado de mi novio.
—Ya, pero todo esto se acabo— dijo tranquilo, luego hizo una mueca y se refrego la cabeza —joder Fiona, casi me arrancas la cabeza tía.
Ella lo miró desde el marco de la puerta y se fue sin decir nada.
—¿Seguirá cabreada conmigo por mucho tiempo?— me pregunto con el ceño fruncido.
Me encogí de hombros —no lo se, el hijo de su novio tomó una de tus armas y ahora Sean no la quiere ni ver por culpa de ello, dime tu.
El rodó los ojos y bajamos a la cocina.
Empeze a preparar el desayuno, mientras Carl comía, veía a Fiona escribir un carta.
—¿Y esa carta?— pregunte viéndola —no me digas que es para Sean.
Ella negó —es para su ex, aquí le aclaro que todo ha sido culpa mía y que el es un gran padre.
Frunci el ceño.
—Si sabes que eso no va a funcionar ¿no Fi?
—Prefiero creer que si hará la diferencia.
Dejamos de lado el tema, en ese momento Ian se hizo presente y se notaba confundido por lo que pasaba.
Me miro buscando algo de información.
—Es una Gallagher ¿necesitas más explicación?— le dije obvia —tiene problemas con pareja.
Espere a que Carl terminará su desayuno y nos fuimos al insti.
Entre al aula y me quede en el final de la clase, encendí un cigarro para pasar la clase, la profesora paro de hablar y se quedo mirándome.
—Señorita Rodrigo, este no es un ambiente adecuado para que usted esté asi— dijo mirándome.
Yo alce la ceja —¿estar como?
—Como si estuviera en su casa.
—Por supuesto que no estoy en mi casa— negué dando otra calada —si no no estaría escuchando a una octogenario con arrugas y vello en todo su cuerpo hablando de algo que paso a-l.
—¿A-L?— pregunto confundida.
—Antes de Linda, hechos históricos que hayan pasado antes de mi, no son de mi interés— me encogí de hombros.
—Si no esta interesada en mi clase, puede retirarse si así lo desea.
Deje el cigarro en mi boca asintiendo, me levante de la silla y salí del aula dando un portazo.
Busque por el patio a Carl, habíamos quedado con que lo acompañaría a su trabajo luego de clases, pero esperaba pasar un rato con el antes.
Cuando por fin lo encontré, me quedé en mi lugar mirándolo hablar con Don.
