Abrazo

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El atardecer toco la ciudad en un pesado silencio después de tanto bullicio, el astro se fundía lentamente en el horizonte púrpura como un poema lloroso. Mientras el sonido de las gaitas acompaña la solemne despedida para evaporarse con la incertidumbre.

La policía comenzó su investigación interrogado minuciosamente a cada uno de los miembros de la familia Ardlay, Pues según el testimonio del señor McLeod, era yo el principal sospechoso de la repentina muerte de su hija, al no lograrse completar el matrimonio ni el convenio entre ambas partes.

Yo no ganaba ningún beneficio con ese casamiento, como tampoco lo tenía con la muerte de Sofía. Además los McLeod, habían cometido varios delitos; como el de secuestro y extorsión, perjudicado la salud y la libertad de algunos miembros cercanos a mi como los de mi familia. A causa de sus amenazas pusieron en peligro a mucha gente, además de menoscabar mi imagen pública al igual que el de las empresas Ardlay.

No había absolutamente ninguna prueba o sugerencia en mi contra. Los Lagan por otro lado tendrían que pagar por sus propios crímenes, pues el testimonio del transeúnte que dio aviso del accidente como el del velador de la villa, era evidencias contundentes para ligar la relación entre Sofía y Neal.

Al final a la policía no le llevó mucho tiempo revelar los delitos cometidos por Gerard Gordon y su hija Sofía, también se descubrió que Sara Lagan había sido cómplice junto con su hijo Neal, en atentar contra Sofía McLeod.

La desagradable pesadilla llegaba a su fin, llevándose acabo los procesos penales de ambos acusados, obteniendo distintos veredictos de acuerdo al grado y nivel de acusación y daño.

Desafortunadamente la codicia de estas dos personas cobró la vida de sus correspondientes hijos, sobreviviendo con graves consecuencias gracias a sus acciones egoístas, en una larga y amarga culpabilidad.

El convenio internacional continuó desarrollándose con gran éxito, mientras que la expansión y remodelación del hogar de Pony llegó a su resolución justo antes del día de acción de gracias.

Candy había estado un tanto distante de mi, será porque no habíamos tenido oportunidad de tratar este desagradable y engorroso evento, que resultó en tan infortunada situación.

En el proceso de continuar, me dedique a la tarea de reunir y contactar a personal con excelentes referencias, para que pudieran trabajar en conjunto con Candy. Contrate no solo a docentes, sino que me permití agregar personal médico, para mejorar la atención y colaboración.

Mientras daba un último vistazo a los documentos que requerían de mi apremiante firma, la puerta de mi oficina se abrió lentamente. No era propio de George que después de haberse despedido regresara tan sigiloso.

Mi corazón comenzó a exaltarse cuando la corriente del aire me trajo el aroma a jazmines y rosas. Después la hermosa silueta femenina se impuso atrapando por completo toda mi atención.

Por alguna absurda razón me puse nervioso, ella comenzó a caminar hacia mí, me quedé paralizado y sin aliento, no podía apartar la vista del contoneo de sus caderas, el vaivén de sus rizos y la luz que irradia esa mirada que me prende totalmente.

Justo cuando la tenia tan cerca de mi, logre torpemente ponerme de pie, no pude articular ni una sola palabra. Candy tampoco habló, sólo me impregné de su aroma y calidez cuando súbitamente me dio un abrazo que fue ajustado con demasiada intensidad.

Continuará

"Una chica cuando sonríe" Edición OctoBert 2023, FanFic de Candy y Albert Donde viven las historias. Descúbrelo ahora