Capítulo 27

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Pov Madelaine
Theo deja de besarme y se separa de mí, yo lo miro con la respiración agitada.

Madelaine.- no quiero que te vayas.

Matheo.- Mads...

Madelaine.- Matheo, por favor. Habla las cosas con Nessa y que te pida perdón.

Matheo.- no es tan fácil como piensas. Lo que te ha dicho de mí me ha dolido.

Madelaine.- tiene cambios de humor.

Matheo.- pues que no lo pague con nosotros.

Madelaine.- ¿te quedarás?

Matheo.- no lo sé... pero quiero pedirte perdón sí te he hablado mal en algún momento.

Madelaine.- tranquilo.

Matheo.- me iré a Manchester. Lo siento, Madelaine, pero creo que es lo mejor.

Madelaine.- dame un día. Sólo un día.

Chasquea su lengua y baja su cabeza.

Madelaine.- Matheo, no seas terco.

Matheo.- es que siento que ya desconfiarás de mí por lo que te ha dicho Vanessa.

Me quedo callada. Alza su cabeza y suspira.

Matheo.- por esta razón no suelo presentarle a mis novias a Vanessa.

Madelaine.- solo se preocupaba por mí.

Matheo.- y tú prefieres sacar tus propias conclusiones antes de escuchar mi versión.

Intento responder, pero niega.

Matheo.- déjalo. Buscaré un billete de avión para regresar cuanto antes a Manchester. Iba a quedarme en Los Ángeles contigo, pero veo que no es la mejor opción.

Madelaine.- Theo, por favor...

Matheo.- no lo hagas más difícil. Deberías agradecerle a Vanessa por lo que ha conseguido. Se merece el premio a la mejor amiga del año.

Madelaine.- entonces... ¿se acabó?

Matheo.- parece que sí.

Madelaine.- bien, lo entiendo.

Besa mi frente y acaricia mi cabello.

Madelaine.- ¿puedo ayudarte con tu equipaje?

Matheo.- sí.

Intento no derrumbarme ante él. Yo lo ayudaría con su equipaje, porque se irá a Manchester.

Estuvimos alrededor de una hora guardando todo. Vi un par de chaquetas, sudaderas y camisetas que dejó en mi armario.

Madelaine.- en mi armario tienes ropa.

Matheo.- para ti.

Madelaine.- pero es tu ropa.

Matheo.- no me importa, quiero que la tengas tú, si no te molesta. Claro.

Madelaine.- no, no.

Se sienta exhausto en el borde de la cama. Yo me quedo de pie, mirándolo y juego con un mechón de mi cabello para calmar mis nervios.

Madelaine.- ¿te duele?

Matheo.- solo un poco.

Madelaine.- una pregunta.

Matheo.- dime.

Madelaine.- ¿podría acompañarte al aeropuerto? Si no quieres, no pasa nada.

Matheo.- claro. No tengo problema.

Terreno de juego || Madelaine Petsch Donde viven las historias. Descúbrelo ahora