Capítulo 29

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Pov Madelaine
Despierto sobresaltada. He tenido un sueño húmedo con Theo, me siento muy mojada. Cubro mi rostro con mis manos y bufo.

Madelaine.- mierda.

¿Por qué me tiene que pasar esto a mí? Desde la primera vez que Theo y yo tuvimos sexo, lo hacíamos todos los malditos días. Él me lo advirtió que me volvería una adicta con su sexo y no le hice caso. Al final llevaba razón.

Permanezco unos minutos más recostada en mi cama hasta que la puerta de la habitación se abre y veo a mi padre entrando a paso lento.

Timothy.- buenos días, cielo.

Madelaine.- buenos días, papá.

Se sienta en el borde de la cama y besa mi frente, acariciando mi cabello.

Timothy.- ¿cómo has dormido?

Madelaine.- más o menos bien.

Timothy.- ¿y eso?

Madelaine.- me he despertado varias veces de madrugada y no conciliaba el sueño.

Timothy.- deberías calmarte y relajarte. Te sientes estresada y eso es malo para ti.

Madelaine.- lo sé, papá.

Timothy.- y yo creía que podría conocer más profundamente a Matheo.

Madelaine.- no hables de eso, por favor.

Timothy.- perdóname.

Madelaine.- tranquilo, no importa... ¿y mamá?

Timothy.- preparando un rico desayuno, por eso he venido por si estabas durmiendo para despertarte para cenar los tres juntos.

No digo nada. Él se levanta y salgo de la cama.

Timothy.- ¿y esa camiseta?

Madelaine.- es de Theo.

Timothy.- ¿huele a él?

Madelaine.- a Versace Eros.

Timothy.- ¿ese es su perfume?

Madelaine.- sí.

Me abraza y pasa su mano por mi espalda. Nos separamos e iríamos a la cocina a desayunar.

Nada más llegar, voy hasta mi madre para abrazarla y besar su mejilla. Me siento en una silla y hay un café humeante frente a mí.

Michele.- ¿y esa camiseta?

Timothy.- es de Theo.

Michele.- ¿cómo lo sabes?

Timothy.- porque ya le pregunté antes.

Michele.- tiene una mancha de labial rojo, cerca del cuello de la camiseta.

La camiseta es blanca, de un equipo parisino, solo que no recuerdo el nombre del equipo.

Madelaine.- pues no sé por qué está manchada.

Era obvio que lo sabía, solo que no iba a decirle nada a mis padres. Intento ocultar mi sonrisa y mi madre se da cuenta de mi expresión, sin embargo, mi padre está pendiente en prepararse una tostada con mermelada.

Desayuno, mientras mis padres me recuerdan anécdotas de cuando yo era pequeña. Ha sido agradable recordar esos buenos momentos. Quise darme una ducha y salir a pasear un poco con Olive para despejar mi mente.

Quise recoger la mesa, pero mis padres no me dejaron, así que subí a mi habitación a elegir la ropa que me pondría cuando me duchase. Estoy sentada en el borde de mi cama, mirando el móvil antes de ir al baño. Actualizo el feed de Instagram y me aparece una foto de Theo.

Terreno de juego || Madelaine Petsch Donde viven las historias. Descúbrelo ahora