Danza entre la vida y la muerte

Responsabilidades

La música empezó sonando alto, rugiendo como leones peleando entre ellos, los vidrios se sacudían de forma violenta hasta parecer estar al borde de quebrarse, los pies en el suelo danzando, un baile intenso casi imposible de seguir, haciendo estruendo con cada impacto en el suelo, totalmente de quicio mientras trataba de dormir.

- ¡Mei! ¡Dormir! - pateó la puerta entrando a la fuerza a nuestra habitación y empezó a bailar sobre la cama hasta caer de golpe sobre ella.

- ¡ flojo! Tenemos tiempo sin estar en casa - siguió aun sobre .

- ¡Quiero dormir!

- ¡No vas a dormir ! ¡Levántate y vamos a comer! - la eché hacia un lado para darme la vuelta.

- Voy a comer sola entonces – se levantó.

- No te cuesta nada esperarme.

- ¿Te acuerdas cuando te lo pedí y no quisiste?

- No empieces, ese día rato sin comer.

- Siempre tienes hambre.

- Bueno, eso sí.

- ¿Te vas a levantar?

- Bueno, ya voy - procedí a levantarme para acicalarme.

- Hoy vamos a desayunar bolas de arroz rellenas de carne y vegetales.

- Rico – iba saliendo del baño.

Empezamos a comer tranquilamente mientras revisamos nuestros celulares, ella viendo series y yo jugando mientras pasaba la hora del desayuno.

- ¿ diste comida a los gatos?

- ¿Crees que nuestros hijos van a estar sin comer pasadas las 10:00Am?

- Vaya, me levanté tarde.

- Y querías seguir durmiendo.

- Bueno, estar en cama es mucho mejor que dormir donde .

- Me levanté temprano porque Kobu hizo un desastre.

- ¿Qué hizo el pechocho ?

- Algo que debes limpiar porque la vez lo hice yo.

- ¿Lo vaciaste?

- Si, ya lo hice.

- Que mal que tuvo ese accidente que lo dejó sin usar las patitas de atrás.

bueno fue que lo salvamos.

- Es muy cruel lo que le querían hacer.

- Horrible, por cierto, creo que me estaban llamando esta mañana.

- Si, Daniel quiere hablar contigo y Frank te dejó un mensaje con el de Dan.

- En un rato les escribo.

- Creo que te llenaron el celular de mensajes.

- ¿Quién?

- Daniel, con conversaciones con una chica.

Dios, no otra vez.

- Y se pusieron , empezando por ella.

- ¿Qué se dijeron? En resumen.

- Yo me aguanté a primera parte de ese chisme y no quise seguir, fue horrible.

- Pero dime.