El hurón y la Serpiente

CAPÍTULO 3

Dia de compras

–¿Nos vamos o vas a seguir analizando que acaba de pasar, todo el día?– Astian iba caminando hacia la acera.

–Es que... Tú.. sólo... Mi tío..– iba caminando detrás de él, Astian solo se rió.
–Bueno, dijiste que querías que te sacará de aquí, deberías estar feliz Cornamenta, ya estas afuera y ahora iremos al caldero Chorreante, así que camina, iremos en metro, no quiero ir en el Autobús Noctámbulo– dijó lo último algo fastidiado.

–¿También has viajado en el autobús Noctámbulo?– al parecer Harry ya había regresado a la realidad.
–Si, es horrible, lo usé el año pasado, ¿Tu también?
–S..si, planeaba huir de casa pero no sabía a dónde ir, así que el autobús llegó de la nada.– Astian analizaba cada palabra.
–Bueno... Ahora ya tienes un lugar.– ya habían salido de aquella cuadra para tomar un taxi.
–No te preocupes, se manejar dinero muggle.– se adelantó Astian  antes de que Harry hablara.
–¿Cómo llegaste hasta aquí?
–Aero lechuza.– Astian se rió por la cara de Harry, un taxi se detuvo y subieron.
–Tal vez sea una sorpresa para papá cuando te vea en casa, pero...
–¡Lo había olvidado, el profesor Lupin!– el conductor sólo vió a Harry algo extrañado y Astian soltó una risa.
–Si... Ex Profesor, pero estoy seguro que que estará muy feliz de verte, creo que Sirius y Remus te quieren más que a mí, también les he contado sobre los mundiales de Quidditch, le hablé de mi plan a Ron sobre que te secuestraría y te llevaría a mi casa, dijo que unos días antes podríamos ir con él a la madriguera, le dije que al menos me dejara comprar nuestros boletos, pero al parecer el señor Weasley ha conseguido unos muy buenos en el trabajo para todos.– parecia que a Astian le encantaba explicar cada cosa.

–Sigo sin poder creerlo..– ya iban en el metro sentados.
–¿Quieres que te golpee para que veas que no estás soñando?– Astian se rió al ver la cara de susto de Harry mientras negaba con las manos, al parecer recordaba cuando As lo despertaba en sus clases antidementores cuando se desmayaba.

–Supongo que ha sido fácil al decirle a tu tío que mi papá se preocupaba mucho por ti y tu felicidad, pocas ventajas de ser hijo de un asesino.– algunas personas alrededor miraron a Astian con miedo pero a él no le importó.

–¿Qué quieres hacer primero? Yo planeaba que fuéramos a comer algo, podemos ir a visitar las tiendas, comprar cosas e ir a Florean Fortescue por helado, ¿Te parece?– ya estaban frente al caldero Chorreante, Astian penso por un segundo en que Remus y Tonks lo matarían por estar ahí sólo y por la enorme locura que había hecho, pero cuando llegara con Harry su regaño pasaría a segundo plano.

–¡Claro!, Pero me gustaría ir a Gringotts primero, yo...– antes de que dijera algo más, Astian lo jaló del brazo hacia el caldero Chorreante.
–Si, después, por ahora déjame invitarte está comida yo.-

Ambos ya estaban sentados en una mesa, como de costumbre se veía todo tipo de clientes en aquel lugar, mientras comían comenzaron a platicar, Harry le había hablado sobre como sus tíos se habían asustado por saber que su padrino era un asesino, obviamente nunca les dijo que en realidad era inocente y eso le había beneficiado mucho, también le contó sobre la dieta a la que la familia se habia tenido que someter gracias a Dudley.
–Realmente la necesita... No me gusta juzgar a la gente pero... Conozco ya un poco a tu familia así que.. no me sienta culpable.– en momentos de confianza Harry le había platicado como eran los Dursley con él, Astian realmente se habia contenido mucho cuando los visito para que no se le saliera el lado Black y comenzará a insultar a diestra y siniestra a aquella familia, entrado en la conversación Harry le contó sobre como le había llegado a doler la cicatriz.

–No es la primera vez, ¿Cierto?– Harry negó, ya le había contado sobre como las otras veces que le había dolido no era nada bueno.
–Hum... Bueno, por lo que me dices, es muy difícil que él hubiera estado cerca en ese momento pero...– Astian se quedó pensativo.
–Pero ¿Qué?– preguntó Harry preocupado.
–Tal vez... Bueno..– Harry se desesperaba
–Tal vez... Significa que está tomando fuerza, la última vez dijiste que casi estaba reducido a nada, pero... Eso no significa que haya desaparecido por completo y el que te haya dolido la cicatriz... no creo que signifique algo muy bueno.– Astian hablaba en voz baja.
–Pero...– en eso momento su pequeño brazalete zumbo.
–oh, mierda...– en ese momento Astian se escondió debajo de la mesa como aí algo se le hubiera caído.
–¿Qué pasa?– Harry se agachó un poco pero luego Astian lo jaló para que también se escondiera.
–¡Chit! Es Draco...–le susurró.
–¿Cómo lo sabes?– habló también en un susurro, Astian estaba buscando por todos lados cuando la puerta se abrió, era él, al parecer iba con su papá.
–Lo que me faltaba...– Astian comenzó a sacar de su bolsillo algunos galeones y unos Sickles, los dejo con cautela en la mesa.
–¿Están enojados?– le susurró Harry y Astian lo volteó a ver cómo si lo hubiera insultado.
–¿Por que me lo preguntas como si fuéramos una pareja peleada?– le gritó en el susurro más bajo que pudo.
–Bien, ahora, vamos...– al parecer los Malfoy habían ido a otro lado, Astian se llevó a Harry lo más rápido que pudo a la puerta.

–Estuvo cerca.– soltó aire y comenzó a caminar hacia la parte de atrás del bar.
–Harry, si me haces el honor de abrirnos paso, por favor– Astian se hizo a un lado para dejar que Harry tocara los tabiques con su varita.
–Respondiendo a tu pregunta... No, no estamos enojados, pero... No se que tan agradable seria para ti verlo y sobre todo... No conozco bien a su padre pero no me cae bien, después de todo por su culpa casi hacen pollo asado a Buckbeack.– finalmente estaban en el callejón Diagon.
–Es un buen punto, es tan fastidioso y molesto, no entiendo por qué estás con él.– de nuevo Astian lo miró algo enfadado pero luego se calmo, Harry no entendía como ese chico que con sus padres y amigos era la cosa más tierna y amable del mundo aveces con sólo una mirada te podía  paralizar.

–Bueno...– suspiró. –Supongo que conmigo es diferente... Es como si sólo a mí me mostrará ese lado amable y lindo, de hecho...– pensó un momento. –¿Puedo contarte algo y no te ries?– Astian lo vio algo preocupado.
–Te acabo de contar que me ha dolido la cicatriz por un sueño, te juro que no me voy a burlar.– Harry habló seriamente.
–Esta bien, pero te juro que si lo usas para molestar a Malfoy te voy a encerrar con un Boggart toda una noche. – no se escuchaba como una broma así que Harry se limitó a asentir, y así Astian le contó sobre su secreto de el brazalete y el collar y también como en aquella pesadilla que tuvo Draco lo abrazó y se pasó la noche con él en la enfermería, le daba bastante vergüenza admitir que por un mal sueño se había puesto así, pero al parecer era algo en lo que también se parecía a Harry, ambos tenían sueños muy raros.

–¿Encerio... Draco Malfoy? ¿El Draco Malfoy que yo conozco?– parecía que Harry no terminaba de creerlo.
–Si... Y por favor no le digas a nadie, él único que sabía era Remus y no por qué yo le contara.– después de ir a Gringotts y hacer unas cuantas compras, estaban comiendo helado en Florean Fortescue.
–Y si... ¿Le gustas?– Dijó en voz baja Harry mientras veía atentamente su helado.
Astian soltó una gran risa como si le acabarán de contar el mejor chiste del mundo.
–¡Por todos los Dioses!  Estoy seguro de que se casaría con un Hynkypunk cruzado con un gryndylow disecado antes que eso, es completamente absurdo.– pero a Harry, Lia, Will, incluso a Lupin no les parecía una idea errada, después de todo... ¿Por qué solo a él lo trataba así?