Contexto: Nos encontramos en uno de los muchos locales de intercambio sexuales, nuestro protagonista se llama Ángel, es un muchacho de unos 19 años y está obligado a prostituirse a cambio de poder mantenerse. Ángel es un muchacho que le da igual que abusen de él, al contrario, disfruta de ser abusado por hombres mayores. Físicamente es delgado, atractivo, con los ojos castaños, el pelo teñido de blanco, con las puntas teñidas de rosa. Ha probado todo tipo de drogas, pero la que más consume es la droga conocida como "polvo de ángel" . Pero bueno, no importa, lo que he venido a contar cómo es su rutina nocturna. ¿Están listos?.. ¡Comencemos!
Narrador (Ángel): Es una noche cómo otra cualquiera, llego al local donde trabajo, me voy a mi camerino y me pongo el "uniforme", que consiste en una mini falda y la parte de arriba un arnés de corazón. Cuando estoy listo, salgo del camerino, todavía quedan quince minutos para abrir el local, así preparo las bebidas, junto a mis compañeros y compañeras. De repente se presenta el jefe para echar un vistazo y me dice que vaya con el a su despacho, que quiere hablar personalmente conmigo. Le sigo y una vez dentro del cuarto, se sienta y noto como en sus pantalones hay una erección, intento concentrarme en otra cosa, pero me resulta imposible. Mi jefe me pide que le eche una mano con su "pequeño" problema. Me acerco a él y le quito los pantalones, dejando al completo descubierto su enorme pene. Lo agarro medianamente cómo puedo y lo introduzco en mi boca, saboreando cada centímetro. Escucho cómo mi jefe suelta varios gruñidos de placer. Sigo con la mamada, hasta que siento cómo eyacula dentro de mi boca y comienzo a tragar como puedo todo su semen. Me limpio y cuando me levanto, me atrae hacia él y me besa de forma lúbrica, y para finalizar me susurra al oído "Buen chico".
Salgo de su despacho y me dirijo a continuar con mi labor, al abrir el local empiezan a llegar bastantes parejas e incluso hombres mayores solteros. Parece ser que esta noche va a ser bastante productiva....
Continuará...