Todo ha cambiado. |Jesús Oviedo|

Capítulo I.

(NARRA ILIANA)

- Llegas tarde - dice Jesús abriendo la puerta de su casa y mirando su reloj - exactamente 4 minutos y 26 segundos - levanta su mirada y se fija en la mía mientras sonríe

- Me tienes muy controlada - digo cruzándome de brazos y frunciendo el ceño, él suelta un carcajada. Se acerca a mí y posa sus labios en mi mejilla izquierda, coge mi mano y entramos a su casa.

- Hola Eva - saludo sonriendo

- Hola Iliana - me devuelve la sonrisa

Jesús no me deja acercarme para hablar con su madre y sube las escaleras agarrándome la mano.

- Pensaba que ya habían llegado tus tíos - digo sentándome en su cama

- Ya mismo tienen que estar aquí - dice mientras busca algo en su armario

Lo observo detenidamente, fijándome en cada uno de sus rasgos. Pero él no se da cuenta, y me sale un sonrisa estúpida y no se por que, lo único que sé es que cuando estoy con él me salen.

Deja de buscar lo que estaba buscando y se dirige a su ordenador.

Veo sus intenciones.

- No pienso bailar como hace tres días en mi habitación - digo muy segura

- ¿Te sigue dando vergüenza? - pregunta pícaramente

- No - me levanto y me acerco a él, rodeando mis manos en su cuello, él no dice nada solo se acerca más y roza su nariz con la mía, sonreímos.

- Jesús baja, ya han llegado - grita Dani desde el piso de abajo

Vaya día me espera, voy a comer con los tíos de Jesús y sus primos. Me los va a presentar. Menos mal que Julia también está.

Bajamos las escaleras y pude ver a un hombre alto, junto a una mujer muy elegante y atractiva, será su esposa, también hay al lado una niña y dos niños, la niña podría tener mi edad, y los dos niños 2 o 3 años más grande que yo.

Acabamos de bajar las escaleras y Jesús se acerca a saludar a sus tíos y primos, Julia se acerca a mí, me susurra algo pero no lo logro entender ya que Jesús me acaba de llamar.

- Iliana, estos es mi tío Julián, mi tía Carmen, y mis primos Jorge, Sebastián y Noemí.

- Encantada - digo dandoles dos besos a cada uno

Me coloco al lado de Jesús y siento mis mejillas rojas. Jesús me mira y sonríe.

Está disfrutando con esto, sabe que lo paso fatal.

- La comida está preparada - anuncia Eva, todos caminamos hacia el salón.

(...)

Me encuentro en la habitación de Jesús, hace 5 minutos que sus tíos y primos se han ido.

Me han caído todos muy bien, la comida a estado riquísima, la madre de Jesús cocina muy bien.

Me lo he pasado muy bien, han estado contando anécdotas de Jesús y Dani, han sido bastantes graciosas.

Los gritos que proceden de la habitación de al lado me despistan de mis pensamientos.

Son Dani y Julia, están discutiendo, al parecer el primo de Dani, Jorge, a intentado besar a Julia, y Dani a entrado en la cocina en ese mismo instante y ya os podéis imaginar como a acabado todo.

- Tu hermano es un exagerado - defiendo a Julia

- Es culpa de Julia, le tenía que haber dado una hostia que se cayera de culo Jorge - le miro atónita

- Julia se ha apartado -

- Cuando había visto a Dani - se levanta y se dirige a la pared para intentar escuchar algo

- Eso es mentira, tu hermano y tú estáis ciegos - me levanto

- Tú eres la ciega - me mira mal

- El único ciego eres tú, te recuerdo que pasamos por una situación parecida, como lo que pasó con tu amiga cuando me dejaste y en Almería, y la culpa fue tuya - digo molesta

- Si quieres discutir te vas - abre la puerta de su habitación

- Si es lo que quieres, me voy - cojo mi móvil que está sobre la cama y me dirijo a la puerta, pero se queda en un intento ya que Jesús me ha cogido del codo

- No he dicho que quiero que te vayas - empuja de mí hacia él y acabo cara a cara con él

- Quiero discutir - digo sin quitar mi mirada de sus ojos color café

- ¿Por qué no discutimos a besos? - acerca sus labios a los míos, los roza, pero sin llegar a besarnos.

Después de unos segundos, por fin se decide a besarme.

Mientras me besa acaricia mi mejilla izquierda. Se me pone la piel de punta.

- Tengo que irme - digo finalizando el beso

- Te acompaño - dice cogiendo mi mano

Le sonrío y bajamos las escaleras tonteando.

- Mamá ahora vuelvo - dice Jesús asomándose a la cocina donde se encuentra su madre

- Vamos a casa de la abuela - escucho decir a Eva

- Jesús no te preocupes, mi casa está a dos calles de aquí, además todavía son las 20:00pm, no me va a pasar nada - digo

- Te acompaño y punto - vuelve a coger mi mano, pero yo la suelto

- Jesús ve a ver a tu abuela, no te preocupes tonto - digo posando mis labios en su mejilla

- Te amo - me susurra, mi piel se pone de punta

- Yo también - le dedico una sonrisa y salgo por la puerta

Es increíble lo que afecta en mí.

Camino despacio hacia mi casa, escucho un coche frenar bruscamente, decido darme la vuelta para ver lo que pasa.

Noto como alguien me agarra por detrás, intento gritar ayuda pero se queda en un intento, siento que me ponen un pañuelo en la boca, intento soltarme de su agarre pero cada vez estoy más débil, mis fuerzas se esfuman a la velocidad de la luz, mis ojos no aguantan más y se cierran.