Capítulo 1 Minho

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Minho
No sé ni como lograba sostenerme en pie, había regresado a Corea después de dos años de estar estudiando en Estados Unidos y mis queridos amigos habían insistido en reunirnos para festejar, Bang Chan era el más entusiasmado, nuestra amistad se había formado desde nuestra infancia y estos dos años habían sido sumamente difíciles por lo que había insistido en ir a ese pequeño bar ubicado en el centro de la ciudad.

Las risas y la plática fueron suficientes para perder la cuenta de cuánto había bebido y me encontraba realmente bastante tomado, por lo que Changbin había insistido en que tomara el subterráneo para ir a casa y dejara mi automóvil en el estacionamiento.

Amaba a ese par de ruidosos.

Changbin se había unido a nuestro pequeño grupo en la escuela secundaria y desde ese momento, los tres nos volvimos inseparables.

Pero ahora, aquí estaba, esperaba pacientemente el tren subterráneo con todo girando a mi alrededor, cuando de pronto lo vi, ese chico hermoso, con sus mejillas regordetas y esos maravillosos ojos brillantes, un verdadero ángel.

Venía caminando lentamente sin despegar su mirada de la mía.

Me sonrió al pasar y yo simplemente no daba crédito a lo que mis ojos veían, esa sonrisa hizo que todo se paralizara de repente y mi corazón comenzó a latir como desesperado.

Era obvio que se dio cuenta del estado en el que me encontraba por que su mirada me escaneó de arriba hacia abajo y me volvió a sonreír con complicidad, como diciéndome que sabía lo bien que lo había pasado, por el nivel de embriaguez en que me encontraba.

De repente, el chico con el que iba, extendió su mano y lo tomó del brazo diciéndole:

--vamos cariño, se nos hace tarde--.

Él se giró rápidamente y continuó caminando sin darse cuenta de la forma acelerada en que mi corazón se encontraba en ese momento.

Quise extender mi mano hacia él para detenerlo y pedirle que me dijera su nombre, necesitaba su número de teléfono, necesitaba más de él.

Pero todo fue tan rápido, ellos subiendo de la mano al vagón que de pronto se abría y yo sólo pensando que nunca en mis 25 años, me había sentido así.

Ni siquiera volteó a verme, sus ojos ahora se posaban en el chico alto, delgado y espectacular que se encontraba a su lado, con esa sonrisa perfecta, con ese cabello oscuro, igualmente perfecto. Allí fue cuando me di cuenta de que nunca podría estar con él, porque su corazón ya tenía dueño.

Y no era yo.

Beautiful (Minsung) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora